” Jorge Raúl Lombardo (ex intendente de Mar del Plata recientemente fallecido) con cuatro años de edad en Playa La Perla”. Marifé Lombardo
Archive for July, 2013
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Sunday, July 7th, 20138263
Friday, July 5th, 2013“En la vieja rambla marplatense, Francisco Luis Lombardo tomando de la mano a su hijo Jorge Raúl (ex intendente de Mar del Plata, recientemente fallecido) y a Florentina Scerpella (madre de este último). El año, por la edad de mi padre supongo que sería 1923 ó 24”. Marifé Lombardo
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Friday, July 5th, 2013“Allí están en la vieja rambla marplatense Francisco Luis Lombardo y su esposa Florentina Scerpella; no sé en qué año sería pero podría tratarse de 1920 aproximadamente”. Luis y Florentina serían posteriormente los padres de Jorge Raúl Lombardo, intendente de Mar del Plata. La foto fue enviada por su hija, Marifé Lombardo
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Friday, July 5th, 2013Esta foto enviada por Ana María Ordoñez es de Manuel Ribeiro, quien llegó como polizón a la Argentina en la década del 20 desde Cabo Verde, Africa. Desde principios de siglo numerosos caboverdeanos llegaron a nuestra ciudad y muchos de ellos fueron empleados por la Prefectura ya que se trataba de excelentes nadadores. Todos ellos formaron familia y dejaron descendencia en Mar del Plata, ciudad que tiene una desconocida raiz africana. El tema fue tratado en nuestro suplemento aniversario del 25 de Mayo de 2013 en un artículo escrito por la periodista Claudia Roldós. Reproducimos un fragmento en el que Pedro Ribeiro -hijo de Manuel- narra su historia:
La historia de Manuel
Salir de Cabo Verde no fue fácil para Manuel Ribeiro, nativo de la isla de San Nicolás, una de las 10 que forman el archipiélago que hasta la década del 70 estuvo bajo dominio portugués.
En la colonia “lo hacían trabajar se sol a sol” cuenta su hijo, Pedro Ribeiro, quién relata que en su cuarto intento logró escabullirse a pié, con 15 naranjas y unas pocas monedas, hasta el puerto de Preguiça donde esperó la oportunidad de esconderse en algún barco que pasara por allí.
Lo logró y se escondió en la carbonera de un barco desconocido y, aunque fue descubierto por el maquinista, tuvo suerte y no terminó en el mar. “El maquinista le daba agua diariamente, con eso y las naranjas sobrevió hasta que pudo escapar -nadando nuevamente- y llegar a las costas de Bahía Blanca”.
En esa ciudad desconocida alguien le facilitó ropa y calzado. Trabajó colocando postes y comenzó a conocer el idioma, muy diferente de su creol materno. Tras un tiempo en Bahía Blanca, se trasladó a Buenos Aires y de ahí a Mar del Plata, donde llegó en 1925. “Aquí se integró con los caboverdeanos que ya había” relató Ribeiro.
En Mar del Plata, don Manuel se asentó. Comenzó a trabajar en Prefectura primero y luego en la Aduana. Su primera esposa fue de orígen portugués, Piedad Alves. Al enviudar se casó con Bárbara Toledo, nativa de orígen guaraní, madre de Pedro Ribeiro.
“Mi padre conoció a todos los bañeros” recordó, con orgullo, Ribeiro.
También confió que lo trasladaron de la Subprefectura a la Aduana “por un problema con un intendente. Se dice que lo tiró al mar porque lo encontró sacando una botella de wisky de contrabando y le dijeron que no servía para ese trabajo. Terminó sus días siendo funcionario de la aduana”.
Pedro Ribeiro asegura que a pesar de haber compartido pocos años con su padre, guarda muchas anécdotas y recuerdos. “Siempre hablaba de su Cabo Verde y me pidió que, si alguna vez yo podía ir a su tierra, devuelva aquellas monedas con las que llegó en algún lugar de su tierra natal. Pude hacerlo en en 1996, cuando participé de un encuentro de inmigrantes e hijos de inmigrantes y hasta conocí la casa de mis tatarabuelos. Fue conmovedor”.
No solo relatos de la vida en Cabo Verde guarda de su Padre. La katxupa es una comida que sigue preparando y además escucha y ejecuta música caboverdeana. “Mi papá y otros inmigrantes tocaban en las fiestas de campo de la zona su música” aseveró.
También Pedro es muy buen jugador de Udil, “una especie de ajedrez africano, que mi padre me enseñó a jugar de chico. Cuando fui a cabo verde, después de 50 años, no entendía el idioma pero pude jugar y hasta ganar algunas partidas” contó.
Seguir la nube
Pero una de las costumbres que no ha perdido Pedro es la de la tradición caboverdeana que su padre le inculcó de “correr la nube”. “Se dice que cuando pasa una nube solitaria hay que seguirla tratando de permanecer bajo su sombra. La leyenda dice que así se tiene una larga vida. Desde chiquito corrí siguiento la nube, por eso hay tantos africanos que corren. Ahora tengo casi 74 años, creo que estoy comprobando esa leyenda” aseguró con un dejo de picardía en sus ojos.
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Thursday, July 4th, 2013Mar del Plata,Estacion nueva,foto de la Sociedad de Fotografos
Aficionados,c.1923.(A.G.N.)
Ignacio Iriarte
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Thursday, July 4th, 2013Mar del Plata,Estacion nueva,foto de la Sociedad de Fotografos
Aficionados,c.1923.(A.G.N.)
Ignacio Iriarte
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Thursday, July 4th, 2013Postal coloreada: “Club Mar del Plata”, desde un angulo diferente. Enviada por Enrique Mario Palacio.
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Thursday, July 4th, 2013Postal coloreada: “Playa de los Ingleses”, década del ´20. Enviada por Enrique Mario Palacio.
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Thursday, July 4th, 2013Foto postal: “Playa de los Ingleses”, con el paseo costero, año 1943. Enviada por Enrique Mario Palacio.
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Thursday, July 4th, 2013Foto postal: “Playa de los Ingleses”, anterior al paseo costero, década del ´20. Enviada por Enrique Mario Palacio.