Licenciado , el relato en esta segunda parte de su entrega me resulta , sin temor a exagerar , realmente emocionante : “…Así se formó cada una de las casitas de éste pueblo : sobre la base del amor y del trabajo…”
También notamos que el autor ubica el tal poblado en cercanías del Puerto ; quizá alguno de los compañeros del blog pueda acercarnos , al ver las imágenes , alguna precisión acerca de las calles que vemos.
Encantado con este material.
Lo saludo atte.
Prof. Julián Mendozzi.
Continuaciòn del texto de la presente,pertenece a la pàgina 43,de la citada revista,que posiblemente se publique,dado por un error involuntario,envìè las dos primeras pàginas solamente,y la tercera lo hice a destiempo.
“Oyese un estruendo formidable que hace temblar el piso.Despuès otro.Varios…
-¿Que es eso ?
-Las cuatro.
-¿Anuncian las horas asì?
-Son las explosiones de la dinamita paara romper la piedra.Los barrenos tienen horario fijo,todos los dìas de 10 a 11 y de 16 a 17.
Es una cantera enorme.Trabajan dos mil operarios.
Me asomo a la calle.Detràs de las casas se levantan columnas de humo.Algunas mujeres salen a las puertas.llaman a sus hijos…
A lo lejos trombas de piedras inflaman el aire de silbidos.
-Es rara la semana que no ocurren desgracias -me afirma el bolichero- El sàbado una piedra de 40 kilos cayò sobre una chica.Muchos obreros quedan ciegos,mancos,rengos,locos.En ocaciones la piedra revienta donde menos se espera.Las vìctimas reciben una indemnizaciòn y ¡chau! La dinamaita es caprichosa.Con poca carga manda por los aires bloques que dan miedo…Ese miedo se observa en los rostros de todas las mujeres.
Es la angustia natural de las madres o de las esposas que tienen a sus hombres en aquellos peligros.Cada explosiòn les arranca el alma fuera de la vida.
-¡Viera usted que cuadro triste cuando traen de la cantera algùn hombre mal herido o muerto! Corren las mujeres y los niños,llorando.
Se oye un clamor que espanta.
-¿Quien es ?-preguntan.
Las gentes se atropellan alrededor de la camilla.La detienen en medio de la calle.Quieren saber quien es la vìctima.Verle la cara.Convencerse de que no es el marido,o el padre,o el…De pronto,por encima de los murmullos tràgicos,una mujer solloza:
-¡Hijo mìo! ¡Muerto!
Las mujeres y los niños se arrodillan,muchas sin creer en Dios.Los hombres se quitan las gorras.Y esa noche no suena en ninguna casa el acordeòn.Pero se vende un poco mas de vino…
-¿Que diversiones tienen los obreros? ¿Cine?
-¿Para que? Cuando esta pobre gente viene del trabajo se dobla de cansancio.
Luego el bolichero exclama:
-Aqui la ùnica diversiòn es esta…
Y señala los estantes con botellas en fila.
-Sin embargo -yo pienso- este bolichero es bolichero.Debe haber otros placeres de Dios que compensen la privilegiada desventura de trabajar como animales.Estoy viendo pasar muchas caras de obreros felices.
Obscurece.Me voy…
De una casita de latas y cajones brota un delicioso olor a tallarines.Tuco.Pomidoro…Dos criaturas juegan en la acera.Por la ventana una robusta muchacha,fresca y apetitosa,llama a los chiquilines:
-¡A manggiare,flgli miei!
Adentro,un obrero grandote,radiante de salud,se ha sentado a la mesa,frente a los tallarines…El hombre espera que los chicos se sienten.Luego mira a la mujer.Mira a la fuente.Mira a los hijos.Y,riendo,se restrega las manos.
-¿Pain,pim!
Pim,pum!
Lic. Somma. Gracias por rescatar estos relatos y así poder enterarme de situaciones impensadas, es de no creer que para poder consumar una obra no se pensara como proteger la vida humana, pero… se que trabajar hoy día en una central atómica Argentina es acortarse la vida. Lo saluda Atte. José Alberto Lago.
Creo no equivocarme al sostener que el edificio con cúpula que vemos en la imagen superior de ésta página de “Caras y Caretas” aparece retratado también en la imagen N*2194 .
Licenciado , el relato en esta segunda parte de su entrega me resulta , sin temor a exagerar , realmente emocionante : “…Así se formó cada una de las casitas de éste pueblo : sobre la base del amor y del trabajo…”
También notamos que el autor ubica el tal poblado en cercanías del Puerto ; quizá alguno de los compañeros del blog pueda acercarnos , al ver las imágenes , alguna precisión acerca de las calles que vemos.
Encantado con este material.
Lo saludo atte.
Prof. Julián Mendozzi.
Continuaciòn del texto de la presente,pertenece a la pàgina 43,de la citada revista,que posiblemente se publique,dado por un error involuntario,envìè las dos primeras pàginas solamente,y la tercera lo hice a destiempo.
“Oyese un estruendo formidable que hace temblar el piso.Despuès otro.Varios…
-¿Que es eso ?
-Las cuatro.
-¿Anuncian las horas asì?
-Son las explosiones de la dinamita paara romper la piedra.Los barrenos tienen horario fijo,todos los dìas de 10 a 11 y de 16 a 17.
Es una cantera enorme.Trabajan dos mil operarios.
Me asomo a la calle.Detràs de las casas se levantan columnas de humo.Algunas mujeres salen a las puertas.llaman a sus hijos…
A lo lejos trombas de piedras inflaman el aire de silbidos.
-Es rara la semana que no ocurren desgracias -me afirma el bolichero- El sàbado una piedra de 40 kilos cayò sobre una chica.Muchos obreros quedan ciegos,mancos,rengos,locos.En ocaciones la piedra revienta donde menos se espera.Las vìctimas reciben una indemnizaciòn y ¡chau! La dinamaita es caprichosa.Con poca carga manda por los aires bloques que dan miedo…Ese miedo se observa en los rostros de todas las mujeres.
Es la angustia natural de las madres o de las esposas que tienen a sus hombres en aquellos peligros.Cada explosiòn les arranca el alma fuera de la vida.
-¡Viera usted que cuadro triste cuando traen de la cantera algùn hombre mal herido o muerto! Corren las mujeres y los niños,llorando.
Se oye un clamor que espanta.
-¿Quien es ?-preguntan.
Las gentes se atropellan alrededor de la camilla.La detienen en medio de la calle.Quieren saber quien es la vìctima.Verle la cara.Convencerse de que no es el marido,o el padre,o el…De pronto,por encima de los murmullos tràgicos,una mujer solloza:
-¡Hijo mìo! ¡Muerto!
Las mujeres y los niños se arrodillan,muchas sin creer en Dios.Los hombres se quitan las gorras.Y esa noche no suena en ninguna casa el acordeòn.Pero se vende un poco mas de vino…
-¿Que diversiones tienen los obreros? ¿Cine?
-¿Para que? Cuando esta pobre gente viene del trabajo se dobla de cansancio.
Luego el bolichero exclama:
-Aqui la ùnica diversiòn es esta…
Y señala los estantes con botellas en fila.
-Sin embargo -yo pienso- este bolichero es bolichero.Debe haber otros placeres de Dios que compensen la privilegiada desventura de trabajar como animales.Estoy viendo pasar muchas caras de obreros felices.
Obscurece.Me voy…
De una casita de latas y cajones brota un delicioso olor a tallarines.Tuco.Pomidoro…Dos criaturas juegan en la acera.Por la ventana una robusta muchacha,fresca y apetitosa,llama a los chiquilines:
-¡A manggiare,flgli miei!
Adentro,un obrero grandote,radiante de salud,se ha sentado a la mesa,frente a los tallarines…El hombre espera que los chicos se sienten.Luego mira a la mujer.Mira a la fuente.Mira a los hijos.Y,riendo,se restrega las manos.
-¿Pain,pim!
Pim,pum!
Juan Josè Soiza Reilly
Mar del Plata
Lic. Somma , muy gentil por reproducir el texto completo . Realmente una crónica que no tiene desperdicios ; una pintura.
Atte. Prof. Julián Mendozzi.
Lic. Somma. Gracias por rescatar estos relatos y así poder enterarme de situaciones impensadas, es de no creer que para poder consumar una obra no se pensara como proteger la vida humana, pero… se que trabajar hoy día en una central atómica Argentina es acortarse la vida. Lo saluda Atte. José Alberto Lago.
Como siempre el Lic. Somma nos deleita con sus maravillosos relatos. Gracias!!!
Creo no equivocarme al sostener que el edificio con cúpula que vemos en la imagen superior de ésta página de “Caras y Caretas” aparece retratado también en la imagen N*2194 .
http://www.lacapitalmdp.com/contenidos/elgranalbumdemardelplata/imagenes/2194.jpg
Prof. Julián Mendozzi.