Podemos agregar sobre el edificio de la presente,la Foto 1638,cuyo epìgrafe dice:
“El edificio Mirador Cabo Corrientes en plena construcción y el paseo Jesús de Galindez en su esplendor,con sus hoteles sobre la barranca parquizada mirando a playa de los Ingleses (hoy Varese).Fotografía obtenida esde un helicóptero por Pedro Alcalde,más información sobre el autor de esta toma en el epígrafe 1635,que dice lo siguiente:
…fue obtenida por el señor Pedro Alcalde,quien la acompañó con el siguiente texto: “Las cinco fotografias aéreas de nuestra ciudad que las remito en la fecha para “Fotos de Familia 2da,Parte” fueron tomadas por el firmante, entre los años 1966 y 1973 volando en el helicóptero de la Prefectura Nacional Maritima,que tenia posado en el cesped frente al Hotel Hermitage,en prevención de accidentes con los turistas en el mar.El Subprefecto Flores fue el aviador que me condujo y apoyó todos los ángulos que yo buscaba para concretar las fotos.En aquellos años el que firma era Jefe de Turno en Correos y Telégrafos,al mismo tiempo y por haber ganado las catedras por concurso y oposición,fui profesor de Fotografía y Técnicas Audiovisuales en la Facultad de Turismo y en lo que hoy es la Facultad de Ciencias de la Salud,en la carrera de Terapia Ocupacional,pertenecientes a la Universidad Nacional de Mar del Plata”.
“Tambien fui docente en el Ateneo Municipal de Gral. Pueyrredon,con sede el Escuela Nro.1 de nuestra ciudad,a cargo del curso de Fotografia y en el Escuela Nacional de Educación Técnica nro 1. Domingo F. Sarmiento,en la catedra de Optica”.
“La fotografía en mi vida fue una verdadera pasión y en lo particular desarrollé la actividad profesional cubriendo el segmento de la fotografia social,comercial y realizaba fotografias “murales” para oficinas y comercios locales y de otras ciudades (Buenos Aires,e interior como en Ayacucho en donde en el Hotel Plaza de esa localidad constan los murales de Gato y Mancha dos caballos emblemàticos del lugar por su historia”).
“Las cinco fotografias que le remito las obtuve gracias a una autorizacion que dio la Dirección Provincial de Turismo para volar en el helicoptero citado”.
“Hoy ya estoy jubilado y observo con mucho cariño el Diario La Capital cuando publica “Fotos de Familia” ya que es trasladarse en el tiempo a una epoca que ya pasó”.
Hablar de la historia del E.Mirador Cabo Corrientes nos transporta inexorablemente a referirnos a la vida de su constructor Domingo Fiorentini.Nació en esta ciudad en el seno de una humilde familia de inmigrantes italianos.Creció y se formó en la escuela de la antigua cultura de la pasión por el trabajo diario y la austeridad como norma de vida.Desde muy pequeño se incorporó al sector de la construcción junto a sus hermanos. Su alma emprendedora lo condicionó a crecer sin límites. Había nacido para triunfar.Siendo muy joven vio la posibilidad de crear su propia empresa constructora.Fundó así una insipiente empresa contratista que no detuvo su expansión hasta convertirse en una de las principales firmas constructoras-inmobiliarias de la República Argentina.Falleció en su ciudad,Mar del Plata,el 22 de Mayo de 1980. Protagonista principal del cambio en la fisonomía ciudadana local, Fiorentini fue uno de los pioneros del concepto de construcción vertical reinante en todas las grandes urbes del mundo,ciudades que por su importancia turística asistieron a un crecimiento demográfico esplendoroso.Desde 1935 el auge de la construcción caracterizó a esta pujante ciudad balnearia.Su salto al crecimiento total se produjo en 1948 con la sanción de la Ley de Nº 13.512 denominada de Propiedad Horizontal,sancionada el 13 de Octubre de 1948.Fue entonces cuando el hábil empresario constructor comenzó a soñar con un edificio monumentalen un predio único –por su ubicación- en Cabo Corrientes. Fiorentini soñaba algo especial para ese terreno de 9347m2 con frente convexo desde la vista marina.El notable constructor “no durmió” hasta concretar la compra de esa importante fracción de tierra costera, ubicada sobre el B.Marítimo Patricio Peralta Ramos,entre las calles Aristóbulo del Valle y Falucho.Lugar donde hoy se erige,orgulloso de su estirpe,el Edificio Mirador Cabo Corrientes.Fiorentini fue fundador de una de las empresas constructoras marplatenses más grandes de todos los tiempos.A su ingenio y visión empresaria no sólo le debemos nuestro querido Edificio Mirador del Cabo.Entre sus proyectos concretados podemos citar al Edificio Galería Sacoa,el Edificio Mirador del Torreón del Monje y los edificios Eiffel,entre otras importantes obras.
Conocido como uno de los precursores de la Avenida del Ruido,Domingo Fiorentini le dio gran impulso a la Av.Constitución como zona privilegiada de la noche marplatense.Fue propietario de memorables locales nocturnos entre los que podemos mencionar a la famosa confitería Enterprise,La Jeneusse,en Moreno entre Sgo. Del Estero y Sta. Fe, y el bailable 2001,Buenos Aires entre Rivadavia y Belgrano.
Cuando todavía no se había inventado la moda de hablar de responsabilidad social empresaria, frase que hoy muchos confunden con marketing de bajo costo…, Domingo Fiorentini ocupaba sus horas de descanso en trabajar para importantes instituciones sin fines de lucro. Con esmero,tiempo y apoyo económico propio fue precursor del proyecto El Portal del Sol,institución de la cual fue Presidente en repetidas oportunidades.Consideraba al deporte como una herramienta indispensable para el desarrollo de jóvenes,así pues Fiorentini dedicó gran parte de su vida al crecimiento del Club Atlético Kimberley,del cual fue Presidente durante los años 1968&9/70/71/72 y 73.A su destacada gestión,el Club debe su sede anexa,las piscinas y la adquisición del excelente predio deportivo ubicado en Av. Polonia y Vertiz de la ciudad de Mar del Plata.
Domingo Fiorentini y su Obra Cumbre,El Mirador:
El Edificio Mirador Cabo Corrientes fue para Fiorentini un verdadero desafío que otros dejaron pasar por el grado de complejidad que significaba construir en ese predio.Hace casi medio siglo realizar un edificio de grandes dimensiones en un predio donde el Macizo de Tandilia aflora en plena superficie era una verdadera proeza.La cantidad de metros que se debería cavar en esas antiguas rocas originadas en la era Proterosoica,hace 3.000 millones de años,sí que era un desafío.A su terreno cien por ciento pétreo se sumaba su irregular forma y su franca pendiente hacia el mar del Cabo de las dos Corrientes.Construir allí,en un cabo,dentro del propio mar,era emprender una batalla despiadada contra su majestad el océano,sus vientos implacables, sus olas insistentes y su aire tan salino como la pura sal.Crear una mega obra en ese lugar era una tarea que Fiorentini no podía encargarle a un muy buen arquitecto sino a un arquitecto especial.La elegida por Fiorentini fue una de las pocas mujeres arquitectas de la época.Todavía en la década del 60 la arquitectura era una profesión decididamente masculina. Débora Di Veroli,fue la elegida. Su nombre aparece firmándo más de 60 grandes obras marplatenses.El Edificio Mirador Cabo Corrientes se terminó de construir el 24 de Noviembre de 1972.Desde 1971 había comenzado la venta de departamentos ya que el sistema de torres individuales permitía comercializar las unidades funcionales por etapas.En 2004 fueron pintados sus más de 30.000m2 de paredes,remplazándose su color arena original por el actual celeste y blanco.En 2012 el Edificio Mirador Cabo Corrientes cumple el 40º Aniversario de su final de obra.Durante parte de 2010 y todo el 2011 su Consejo de Administración y la Administradora se abocaron a la tarea de renovar sus espacios públicos y modernizar todos los sistemas operativos del edificio.Una ardua tarea realizada gracias al aporte de todos los vecinos del Mirador.Hoy el Mirador Cabo Corrientes fue totalmente renovado y posee la máxima tecnología edilicia,brindando seguridad y confort a sus más de 2.500 habitantes.(fuente:Edificio Mirador Cabo Corrientes)
HISTORIA DE UN DESAFÍO EDILICIO.
Domingo Fiorentini (1911-1980) “El Padre del Mirador”.
Hablar de la historia del E.Mirador Cabo Corrientes nos transporta inexorablemente a referirnos a la vida de su constructor Domingo Fiorentini.
Nació en esta ciudad en el seno de una humilde familia de inmigrantes italianos. Creció y se formó en la “escuela” de la antigua cultura de la pasión por el trabajo diario y la austeridad como norma de vida. Desde muy pequeño se incorporó al sector de la construcción junto a sus hermanos. Su alma emprendedora lo condicionó a crecer sin límites. Había nacido para triunfar.
Siendo muy joven vio la posibilidad de crear su propia empresa constructora. Fundó así una insipiente empresa contratista que no detuvo su expansión hasta convertirse en una de las principales firmas constructoras-inmobiliarias de la República Argentina. Falleció en su ciudad, Mar del Plata, el 22 de Mayo de 1980. Protagonista principal del cambio en la fisonomía ciudadana local, Fiorentini fue uno de los pioneros del concepto de “construcción vertical” reinante en todas las grandes urbes del mundo, ciudades que por su importancia turística asistieron a un crecimiento demográfico esplendoroso. Desde 1935 el auge de la construcción caracterizó a esta pujante ciudad balnearia. Su “salto” al crecimiento total se produjo en 1948 con la sanción de la Ley de Nº 13.512 denominada de Propiedad Horizontal, sancionada el 13 de octubre de 1948. Fue entonces cuando el hábil empresario constructor comenzó a soñar con un edificio monumentalen un predio único –por su ubicación- en Cabo Corrientes. Fiorentini soñaba algo especial para ese terreno de 9347m2 con frente convexo desde la vista marina. El notable constructor “no durmió” hasta concretar la compra de esa importante fracción de tierra costera, ubicada sobre el Blvr. Marítimo Patricio Peralta Ramos, entre las calles Aristóbulo del Valle y Falucho. Lugar donde hoy se erige, orgulloso de su estirpe, el Edificio Mirador Cabo Corrientes.
Fiorentini fue fundador de una de las empresas constructoras marplatenses más grandes de todos los tiempos. A su ingenio y visión empresaria no sólo le debemos nuestro querido Edificio Mirador del Cabo. Entre sus proyectos concretados podemos citar al Edificio Galería Sacoa, el Edificio Mirador del Torreón del Monje y los edificios “Eiffel”, entre otras importantes obras.
Conocido como uno de los precursores de la “Avenida del Ruido”, Domingo Fiorentini le dio gran impulso a la Av. Constitución como zona privilegiada de la “noche” marplatense. Fue propietario de memorables locales nocturnos entre los que podemos mencionar a la famosa confitería Enterprise, “La Jeneusse (en Moreno entre Sgo. Del Estero y Sta. Fe) ” y el bailable “2001” (Buenos Aires entre Rivadavia y Belgrano).
Cuando todavía no se había inventado la moda de hablar de “responsabilidad social empresaria”, frase que hoy muchos confunden con “marketing de bajo costo”…, Domingo Fiorentini ocupaba sus horas de descanso en trabajar para importantes instituciones sin fines de lucro. Con esmero, tiempo y apoyo económico propio fue precursor del proyecto “El Portal del Sol”, institución de la cual fue Presidente en repetidas oportunidades.
Consideraba al deporte como una herramienta indispensable para el desarrollo de jóvenes, así pues Fiorentini dedicó gran parte de su vida al crecimiento del Club Atlético Kimberley, del cual fue Presidente durante los años 1968, 1969, 1970, 1971, 7972 y 1973. A su destacada gestión, el Club debe su sede anexa, las piscinas y la adquisición del excelente predio deportivo ubicado en Av. Polonia y Vertiz de la ciudad de Mar del Plata.
DOMINGO FIORENTINI Y SU OBRA CUMBRE, “EL MIRADOR”
El Edificio Mirador Cabo Corrientes fue para Fiorentini un verdadero desafío que otros dejaron pasar por el grado de complejidad que significaba construir en ese predio. Hace casi medio siglo realizar un edificio de grandes dimensiones en un predio donde el “Macizo de Tandilia” aflora en plena superficie era una verdadera proeza. La cantidad de metros que se debería cavar en esas antiguas rocas originadas en la era “Proterosoica” (hace 3.000 millones de años) sí que era un desafío. A su terreno cien por ciento pétreo se sumaba su irregular forma y su franca pendiente hacia el mar del “Cabo de las dos Corrientes”.
Construir allí, en un cabo, dentro del propio mar, era emprender una batalla despiadada contra “su majestad” el océano, sus vientos implacables, sus olas insistentes y su aire tan salino como la pura sal. Crear una mega obra en ese lugar era una tarea que Fiorentini no podía encargarle a un muy buen arquitecto sino a un arquitecto especial. La elegida por Fiorentini fue una de las pocas mujeres arquitectas de la época. Todavía en la década del sesenta la arquitectura era una profesión decididamente masculina. Débora Di Veroli, fue la elegida. Su nombre aparece firmándo más de 60 grandes obras marplatenses, una maestra del diseño de quien hablaremos en el link “ARQUITECTURA” por ser merecedora de un capítulo aparte.
El Edificio Mirador Cabo Corrientes se terminó de construir el 24 de Noviembre de 1972. Desde 1971 había comenzado la venta de departamentos ya que el sistema de torres individuales permitía comercializar las unidades funcionales por etapas. En 2004 fueron pintados sus más de 30.000m2 de paredes, remplazándose su color “arena” original por el actual celeste y blanco.
En 2012 el Edificio Mirador Cabo Corrientes cumple el 40º Aniversario de su final de obra. Durante parte de 2010 y todo el 2011 su Consejo de Administración y la Administradora se abocaron a la tarea de renovar sus espacios públicos y modernizar todos los sistemas operativos del edificio. Una ardua tarea realizada gracias al aporte de todos los vecinos del Mirador.
Hoy el Mirador Cabo Corrientes fue totalmente renovado y posee la máxima tecnología edilicia, brindando seguridad y confort a sus más de 2.500 habitantes.
Sugiero a los Sres. foristas visitar el sitio web citado (oficial del “Mirador Cabo Corrientes”) , donde se pueden encontrar diversos artículos de interés referentes al dicho edificio y el lugar que ocupa ,como así también numerosas fotografías.
LA IMPORTANCIA DEL “CABO CORRIENTES” PARA LOS AMANTES DEL SURF ; SUS OLAS ; ALGO DE SU HISTORIA Y RECUERDOS PERSONALES.
CABO CORRIENTES Volviendo a la leyenda del Surf Argentino.
La despedida del invierno fue genial!!!. Una seguidilla de muy buenos swells nos hicieron olvidar del frío y, para quienes surfeamos en Mar del Plata, la adrenalina volvió a impregnar nuestros cuerpos.
En realidad, no se trató de un swell cualquiera o uno más de la temporada; éste tuvo la exacta dirección, tamaño y fuerza suficiente para que el Cabo volviera a romper.
De repente y sin sospecharlo pudimos regresar al glorioso point de la mejor ola que tuvo la Argentina. En esta oportunidad- sin llegar a ser la ola de antaño- brindó dos excelentes posibilidades de buenas olas: una de ellas, para ser corrida desde una posición muy cerrada, bien pegado a las grandes rocas originales del Cabo y, la otra, tomándola desde la punta de la escollera.
La primera de ellas seguía siendo una ola muy rápida, parada y casi perfecta, pero luego de un corto recorrido desgraciadamente terminaba frente a la maldita escollera, por lo cual debíamos salir cautelosamente para no repetir los numerosos accidentes que tuvieron lugar en el viejo Cabo (fractura de caderas, clavícula, golpes y cortes de todo tipo). Esta fue la ola por la que optaron los surfistas profesionales que corrieron durante esos magníficos días otoñales. En cuanto a la otra ola, un poco más gorda que la anterior, se la podía correr pegándose a la punta de la escollera.
En sus orígenes, las buenas olas del Cabo podían ser corridas con una pared perfecta desde las grandes rocas costeras hasta aproximadamente la punta de la antigua escollera Varese. En ese entonces, correr las grandes olas del Cabo era para nosotros como diplomarse de surfista. Pero esta fiesta de olas no terminaba ahí, ya que cuando rompía sensacional en el Cabo, también lo hacía en el Torreón, si bien con una ola diferente y menos crítica, pero enorme como una gran montaña de agua que rompía con un estrépito inolvidable contra los pilotes del Torreón, lugar por donde los surfistas ingresaban al point. Algunos de los primeros campeonatos argentinos de surf fueron realizados en este legendario lugar. Simultáneamente rompían excelentes olas en el viejo muelle de la Popular y lo bueno es que éramos muy poco los surfistas en todo el país.
Recuerdo perfectamente aquellos días de grandes olas que convocaban a numerosos espectadores que, totalmente sorprendidos por este nuevo deporte, nos veían deslizar sobre el agua y soportar las bajas temperaturas del invierno.
El Cabo Corrientes tiene, a su vez, una larga historia anterior al inicio del Surf y a la fundación de la ciudad de Mar del Playa. Paradójicamente, el Cabo Corrientes actual no es el punto que fue descripto como Cape Currents por el pirata y, posteriormente noble, Sir Francis Drake en 1578. En ese año navegaba frente a nuestras costas rumbo al Pacífico para atacar las poblaciones de Chile y Perú que estaban bajo el dominio de la Corona Española. Tres años después del paso de Drake, la zona fue visitada por el conquistador español Juan de Garay que la describió como una verdadera “costa galana” (de ahí el nombre del hotel ubicado en Playa Grande). Por lo tanto, el verdadero Cabo Corrientes estaría ubicado en la Punta Mogotes y su nombre inspirado en las corrientes y rompientes que se forman en sus bajos fondos rocosos.
El actual Cabo Corrientes también fue testigo de nuestras luchas por la independencia. En el año 1826 el Almirante Guillermo Brown aguardó a la escuadra chilena y desde ahí inició su inmortal crucero corsario a las costas del Brasil, donde libró importantes batallas ante una flota muy superior que logró vencer heroicamente.
En esta zona, también existían importantes colonias de lobos marinos de uno y de dos pelos que sustentaban- en parte- a las poblaciones aborígenes de la región. A partir del período 1850-1900 estas poblaciones de lobos fueron diezmadas por la explotación del hombre blanco y el posterior crecimiento de nuestra ciudad.
Antes de ser famoso por sus olas, el Cabo Corrientes actual protegía una angosta playa conocida como Playa de los Ingleses. Su nombre precisamente hacía referencia a que esa diminuta playa era la preferida por las familias de origen inglés, Nación con la cual la Argentina estuvo íntimamente vinculada desde sus inicios.
Quienes acudían a esta playa solían alojarse en una serie de hoteles muy pintorescos construidos al borde de la rambla costera y en las mismas barrancas que rodean a la pequeña bahía del Cabo. Con el correr de los años, estas construcciones fueron abandonadas y, hace unas pocas décadas, finalmente demolidas como una muestra más de nuestro pobre espíritu conservacionista.
En nuestros días el Cabo Corrientes se ha convertido en una verdadera leyenda del surf argentino, dado que son muy pocos los surfistas actuales que han tenido la oportunidad de correrlo en sus épocas de máximo esplendor y perfección. Sin embargo, además de ser una leyenda, el Cabo también constituye un claro ejemplo de la estupidez humana.
A fines de la década del 70, debido a que nuestra costa se encontraba en un importante proceso erosivo, las autoridades gubernamentales decidieron llevar a cabo un proyecto de “protección y recuperación de playas”. Desgraciadamente, como ya es frecuente en nuestro país, no se efectuó una consulta interdisciplinaria previa entre los profesionales de mayor experiencia en el tema. De esta forma, y sin ningún estudio de impacto ambiental que pudiera evaluar las consecuencias, se optó por la peor de las soluciones: construir a lo largo de toda la costa un sistema de escolleras rocosas.
En cuanto a lo que se ganó con este proyecto no merece la pena extendernos, pero sí nos ocuparemos de lo que se perdió al alterar el diseño natural de la costa.
Lamentablemente no supimos con la antelación necesaria que el Cabo Corrientes iba a ser modificado con la construcción de dos importantes escolleras. Casi todos nos enteramos de este aberrante proyecto cuando vimos los camiones descargando enormes rocas provenientes de las canteras locales. Este acontecimiento me impactó tanto como surfista y como biólogo marino; como surfista- obviamente- estábamos por perder la mejor ola del país, por lo cual no es necesario entrar en detalles.
Recuerdo que en ese momento la primer reacción que tuve fue sentarme frente a mi querida Olivetti (no teníamos PC en esa época) y redactar un artículo en defensa del Cabo, cuyo título era: “El valor incalculable de una ola”. Como era de suponer, el diario se negó a publicarla, pues la misma estaba en una posición contraria a un Proyecto Gubernamental que, erróneamente, sostenía que la obra sería fundamental para el desarrollo turístico de la ciudad de Mar del Plata.
Desde el punto de vista científico, la modificación del Cabo y del Torreón también produjo un daño de valor incalculable.
Como todos los surfistas sabemos, la costa de la provincia de Buenos Aires carece en casi toda su extensión de fondos rocosos costeros. Los únicos puntos, en cientos de kilómetros, son las formaciones de rocas duras de Punta Iglesias, el Torreón, Cabo Corrientes-Playa Grande y Punta Canteras.
Estas rocas cuarcíticas, originadas hace nada menos que 500 millones de años, son las más antiguas de la Argentina y se caracterizan por permitir que sobre ellas se desarrollen comunidades de organismos animales y vegetales, únicos en todo el país. Precisamente en Cabo Corrientes y en el Torreón fue donde tuvieron lugar las primeras colecciones biológicas y los primeros estudios realizados por el Instituto de Biología Marina. Esta fue una institución pionera en Latinoamérica en las Ciencias Marinas, creada al comienzo de la década del 60 y, hoy día, se levanta como una lamentable ruina en Playa Grande.
Desde el punto de vista biológico, el atributo principal de los fondos rocosos del Cabo y del Torreón, era la formación de una plataforma de poca pendiente que, durante la baja marea, dejaba expuestas comunidades constituidas por una amplia variedad de organismos de gran valor científico, muchos de ellos incluso desconocidos para la ciencia. Hoy día, estas comunidades ya no existen como tales, pues la plataforma rocosa ha sido cubierta por un manto asfixiante de arena.
El proyecto implementado en defensa de las playas nunca debió haberse llevado a cabo en virtud de los graves problemas que ocasionó y seguirá produciendo en el futuro. En vez de optarse por construcciones rocosas tan imponentes y estáticas se debería haber implementado un proyecto de refulado de arena proveniente de zonas más profundas, como el que se efectuó últimamente y que aún podría ser mejorado. Este último tiene la característica de ser un sistema dinámico y de mejor control en el tiempo.
Hablando de este tema con Fredy Tortora, Director de Surfista, y en plena redacción de esta nota, me hizo una pregunta que aún sigue rondando por mi cabeza: -”Ricardo, no podríamos volver a construir el Cabo como en las viejas épocas y así recuperar la ola?”. Me quedé pensando un rato y le dije que todo era posible, pero que habría que analizarlo con detenimiento. Al margen del costo económico y de su desarrollo técnico, es imprescindible buscar la alternativa capaz de compatibilizar con otros intereses que están en juego y que van más allá del Surf y de la Biología Marina.
A lo largo de su historia, el hombre ha afrontado con éxito desafíos aún mayores que la reconstrucción del Cabo Corrientes. Ante todo sería importante saber el apoyo que este proyecto podría tener dentro del ambiente del Surf, como así también de las autoridades gubernamentales y de los potenciales sponsors del mismo.
En caso de proseguirse con esta idea, todo el proyecto debería estar sustendado sobre la base de un estudio científico-técnico interdisciplinario para que no se repitan los errores del pasado que nos privó de la mejor ola de la Argentina.
AUTOR : Bastida , Ricardo . Surfista y Biólogo Marino.
PARA : Surfrider Foundation Argentina.
Domingo Fiorentini.Su fallecimiento-30º Aniversario 21-5-2010
Retirado de las actividades comerciales falleció en la ciudad de Mar del Plata de la cual era nativo.Hijo de laboriosos inmigrantes italianos, su ciudad natal sintió y vivió el palpitar de su gran capacidad empresaria.Dedicado a la Industria de la construcción se convirtió siendo muy joven en pionero de la actividad.Es así que el tiempo en su transcurrir fue dando testimonio inexorable de su férrea voluntad de hacer.Esa misma voluntad que lo llevó a fundar numerosísimas sociedades,entre ellas las más destacadas: DOMINGO FIORENTINI Y HNOS. S.A. y DOMINGO FIORENTINI Y CIA. S.A. (con su socio Italino Orlando Pablo Pasquariello),de las que fue su indiscutible Presidente.Su quehacer de construir hogares a través de sus empresas fue extendiéndose paulatinamente a casi todo el ámbito del país.No conforme con las realizaciones empresarias,su siempre inclaudicable espíritu lo impulsó a colaborar en entidades de bien social y deportivo.Fue presidente de El Portal del Sol -institución de enseñanza diferenciada y reeducativa-y del Club Kimberley -entidad deportiva de gran arraigo en la ciudad balnearia-.Diferente una de otra no fue obstáculo para que Domingo Fiorentini pudiera estar al lado de los niños necesitados y vigilar al mismo tiempo el desarrollo de la sana juventud del club de sus preferencias.Mar del Plata llora a uno de sus hijos más queridos y es así que como lo vio nacer hace casi setenta años, hoy toma sus restos para guardarlos con el profundo respeto que su hombría de bien merece.Que duerma en paz.Amaba su ciudad natal,y por ella dedicó su vida.Deja un gran legado a la sociedad,cristalizado en la construcción del Edificio Mirador Cabo Corrientes,premiado como emblema de Mercosur,como así también el Edificio Mirador del Torreón y los edificios Eiffel de la ciudad feliz.En su 30º aniversario lo recuerdan,con profundo amor,su hija María Angélica de Pasquariello y Pablo Fernando Pasquariello.(Fuente: angelicapablo.wordpress)
Señor Mendozzi: el interesante artículo del señor Bastida, surfista y biólogo marino, incluye una brevísima referencia histórica: “El actual Cabo Corrientes también fue testigo de nuestras luchas por la independencia. En el año 1826 el Almirante Guillermo Brown aguardó a la escuadra chilena y desde ahí inició su inmortal crucero corsario a las costas del Brasil…”. Tal vez no debería vincularse a ese acontecimiento con las luchas por la independencia. Por otra parte, el almirante no aguardó a la “escuadra chilena”, expresión que sugiere un apresto de enfrentamiento naval, cuando en realidad estaba esperando tres barcos que compró en Chile para emprender la campaña a Brasil. De esos tres barcos llegó solamente uno, la corbeta Chacabuco. Al igual que la vida del gran marino, éste fue un muy interesante hecho histórico ocurrido en el área que es hoy MdP. Atentamente, Lafra.
Podemos agregar a la presente imagen documental,la foto 8372,enviada por el Sr. Ignacio Iriarte,donde se observa la zona antes de la construcciòn del edificio.
Quizá algún forista pueda confirmar si la baliza de enfilación del Cabo Corrientes -antiguamente sobre el Scafidi- está actualmente sobre el primer edificio del conjunto Mirador aparece en la fotografía del señor Vita. Muchas gracias, Lafra.
Sr. Lafra , tenga Ud. buenas tardes ; que interesante esto que nos cuenta ; lamento no conocer personalmente al autor del artículo como para poder contactarlo con Ud. para que debatan el tema.
Una muestra mas de lo importante que resulta citar las fuentes.
A título personal , y ya que menciona el tema , le confienso que a mi juicio la lucha por la Independencia de nuestro País y de tantas otras Naciones Latinoamericanas hermanas continúa aun hoy , claro que en un marco muy distinto al de la llamada Independencia en términos formales y contra nuevos (…o no tanto…) Imperios colonialistas y sus diversos medios de dominación , sometimiento y explotación .
En fin , pero eso ya es “harina de otro costal” y no es mi intención discutirlo aquí ni plantear un debate con Ud. o con el foro.
Le dejo un saludo y hasta cualquier momento en Fotos de Familia.
Atte. Prof. Julián Mendozzi.
Señor Mendozzi: creo que la lucha por la Independencia de la Argentina y muchos países de América es un período histórico cerrado ya. Las otras luchas a las que usted se refiere son las que nunca terminarán de ocurrir por ser propias de la naturaleza humana, como tratar de imponer a otros sus ideas, conveniencias y pretensiones. Los imperios son hoy de otra esencia y pueden ser indistintamente de derechas, izquierdas, de arriba o abajo, como lo son el colonialismo, la dominación, el sometimiento y la explotación. Y estoy de acuerdo en que Fotos de Familia tiene un propósito tal vez cándido y delicioso en contraste con esos otros menesteres de la raza humana. Mis saludos. Lafra.
Buenas tardes Sr. Lafra , en fin , digamos entonces que lo que Ud. aprecia como un “punto y aparte” , yo lo veo como un “punto y seguido” ; y así debe ser nuestra naturaleza ciudadana , con acuerdos y discensos.
Buenos días y saludos para todos los colaboradores de fotos de familia,esta genial idea del diario La Capital.
Coincido con la opinión del señor Jorge,el edificio es uno de los más feos construidos en la costa,según mi criterio.
Edificio que fue construido por Domingo Fiorentini…según recuerdo.
Podemos agregar sobre el edificio de la presente,la Foto 1638,cuyo epìgrafe dice:
“El edificio Mirador Cabo Corrientes en plena construcción y el paseo Jesús de Galindez en su esplendor,con sus hoteles sobre la barranca parquizada mirando a playa de los Ingleses (hoy Varese).Fotografía obtenida esde un helicóptero por Pedro Alcalde,más información sobre el autor de esta toma en el epígrafe 1635,que dice lo siguiente:
…fue obtenida por el señor Pedro Alcalde,quien la acompañó con el siguiente texto: “Las cinco fotografias aéreas de nuestra ciudad que las remito en la fecha para “Fotos de Familia 2da,Parte” fueron tomadas por el firmante, entre los años 1966 y 1973 volando en el helicóptero de la Prefectura Nacional Maritima,que tenia posado en el cesped frente al Hotel Hermitage,en prevención de accidentes con los turistas en el mar.El Subprefecto Flores fue el aviador que me condujo y apoyó todos los ángulos que yo buscaba para concretar las fotos.En aquellos años el que firma era Jefe de Turno en Correos y Telégrafos,al mismo tiempo y por haber ganado las catedras por concurso y oposición,fui profesor de Fotografía y Técnicas Audiovisuales en la Facultad de Turismo y en lo que hoy es la Facultad de Ciencias de la Salud,en la carrera de Terapia Ocupacional,pertenecientes a la Universidad Nacional de Mar del Plata”.
“Tambien fui docente en el Ateneo Municipal de Gral. Pueyrredon,con sede el Escuela Nro.1 de nuestra ciudad,a cargo del curso de Fotografia y en el Escuela Nacional de Educación Técnica nro 1. Domingo F. Sarmiento,en la catedra de Optica”.
“La fotografía en mi vida fue una verdadera pasión y en lo particular desarrollé la actividad profesional cubriendo el segmento de la fotografia social,comercial y realizaba fotografias “murales” para oficinas y comercios locales y de otras ciudades (Buenos Aires,e interior como en Ayacucho en donde en el Hotel Plaza de esa localidad constan los murales de Gato y Mancha dos caballos emblemàticos del lugar por su historia”).
“Las cinco fotografias que le remito las obtuve gracias a una autorizacion que dio la Dirección Provincial de Turismo para volar en el helicoptero citado”.
“Hoy ya estoy jubilado y observo con mucho cariño el Diario La Capital cuando publica “Fotos de Familia” ya que es trasladarse en el tiempo a una epoca que ya pasó”.
http://www.lacapitalmdp.com/contenidos/fotosfamilia/fotos/1638
Hablar de la historia del E.Mirador Cabo Corrientes nos transporta inexorablemente a referirnos a la vida de su constructor Domingo Fiorentini.Nació en esta ciudad en el seno de una humilde familia de inmigrantes italianos.Creció y se formó en la escuela de la antigua cultura de la pasión por el trabajo diario y la austeridad como norma de vida.Desde muy pequeño se incorporó al sector de la construcción junto a sus hermanos. Su alma emprendedora lo condicionó a crecer sin límites. Había nacido para triunfar.Siendo muy joven vio la posibilidad de crear su propia empresa constructora.Fundó así una insipiente empresa contratista que no detuvo su expansión hasta convertirse en una de las principales firmas constructoras-inmobiliarias de la República Argentina.Falleció en su ciudad,Mar del Plata,el 22 de Mayo de 1980. Protagonista principal del cambio en la fisonomía ciudadana local, Fiorentini fue uno de los pioneros del concepto de construcción vertical reinante en todas las grandes urbes del mundo,ciudades que por su importancia turística asistieron a un crecimiento demográfico esplendoroso.Desde 1935 el auge de la construcción caracterizó a esta pujante ciudad balnearia.Su salto al crecimiento total se produjo en 1948 con la sanción de la Ley de Nº 13.512 denominada de Propiedad Horizontal,sancionada el 13 de Octubre de 1948.Fue entonces cuando el hábil empresario constructor comenzó a soñar con un edificio monumentalen un predio único –por su ubicación- en Cabo Corrientes. Fiorentini soñaba algo especial para ese terreno de 9347m2 con frente convexo desde la vista marina.El notable constructor “no durmió” hasta concretar la compra de esa importante fracción de tierra costera, ubicada sobre el B.Marítimo Patricio Peralta Ramos,entre las calles Aristóbulo del Valle y Falucho.Lugar donde hoy se erige,orgulloso de su estirpe,el Edificio Mirador Cabo Corrientes.Fiorentini fue fundador de una de las empresas constructoras marplatenses más grandes de todos los tiempos.A su ingenio y visión empresaria no sólo le debemos nuestro querido Edificio Mirador del Cabo.Entre sus proyectos concretados podemos citar al Edificio Galería Sacoa,el Edificio Mirador del Torreón del Monje y los edificios Eiffel,entre otras importantes obras.
Conocido como uno de los precursores de la Avenida del Ruido,Domingo Fiorentini le dio gran impulso a la Av.Constitución como zona privilegiada de la noche marplatense.Fue propietario de memorables locales nocturnos entre los que podemos mencionar a la famosa confitería Enterprise,La Jeneusse,en Moreno entre Sgo. Del Estero y Sta. Fe, y el bailable 2001,Buenos Aires entre Rivadavia y Belgrano.
Cuando todavía no se había inventado la moda de hablar de responsabilidad social empresaria, frase que hoy muchos confunden con marketing de bajo costo…, Domingo Fiorentini ocupaba sus horas de descanso en trabajar para importantes instituciones sin fines de lucro. Con esmero,tiempo y apoyo económico propio fue precursor del proyecto El Portal del Sol,institución de la cual fue Presidente en repetidas oportunidades.Consideraba al deporte como una herramienta indispensable para el desarrollo de jóvenes,así pues Fiorentini dedicó gran parte de su vida al crecimiento del Club Atlético Kimberley,del cual fue Presidente durante los años 1968&9/70/71/72 y 73.A su destacada gestión,el Club debe su sede anexa,las piscinas y la adquisición del excelente predio deportivo ubicado en Av. Polonia y Vertiz de la ciudad de Mar del Plata.
Domingo Fiorentini y su Obra Cumbre,El Mirador:
El Edificio Mirador Cabo Corrientes fue para Fiorentini un verdadero desafío que otros dejaron pasar por el grado de complejidad que significaba construir en ese predio.Hace casi medio siglo realizar un edificio de grandes dimensiones en un predio donde el Macizo de Tandilia aflora en plena superficie era una verdadera proeza.La cantidad de metros que se debería cavar en esas antiguas rocas originadas en la era Proterosoica,hace 3.000 millones de años,sí que era un desafío.A su terreno cien por ciento pétreo se sumaba su irregular forma y su franca pendiente hacia el mar del Cabo de las dos Corrientes.Construir allí,en un cabo,dentro del propio mar,era emprender una batalla despiadada contra su majestad el océano,sus vientos implacables, sus olas insistentes y su aire tan salino como la pura sal.Crear una mega obra en ese lugar era una tarea que Fiorentini no podía encargarle a un muy buen arquitecto sino a un arquitecto especial.La elegida por Fiorentini fue una de las pocas mujeres arquitectas de la época.Todavía en la década del 60 la arquitectura era una profesión decididamente masculina. Débora Di Veroli,fue la elegida. Su nombre aparece firmándo más de 60 grandes obras marplatenses.El Edificio Mirador Cabo Corrientes se terminó de construir el 24 de Noviembre de 1972.Desde 1971 había comenzado la venta de departamentos ya que el sistema de torres individuales permitía comercializar las unidades funcionales por etapas.En 2004 fueron pintados sus más de 30.000m2 de paredes,remplazándose su color arena original por el actual celeste y blanco.En 2012 el Edificio Mirador Cabo Corrientes cumple el 40º Aniversario de su final de obra.Durante parte de 2010 y todo el 2011 su Consejo de Administración y la Administradora se abocaron a la tarea de renovar sus espacios públicos y modernizar todos los sistemas operativos del edificio.Una ardua tarea realizada gracias al aporte de todos los vecinos del Mirador.Hoy el Mirador Cabo Corrientes fue totalmente renovado y posee la máxima tecnología edilicia,brindando seguridad y confort a sus más de 2.500 habitantes.(fuente:Edificio Mirador Cabo Corrientes)
HISTORIA DE UN DESAFÍO EDILICIO.
Domingo Fiorentini (1911-1980) “El Padre del Mirador”.
Hablar de la historia del E.Mirador Cabo Corrientes nos transporta inexorablemente a referirnos a la vida de su constructor Domingo Fiorentini.
Nació en esta ciudad en el seno de una humilde familia de inmigrantes italianos. Creció y se formó en la “escuela” de la antigua cultura de la pasión por el trabajo diario y la austeridad como norma de vida. Desde muy pequeño se incorporó al sector de la construcción junto a sus hermanos. Su alma emprendedora lo condicionó a crecer sin límites. Había nacido para triunfar.
Siendo muy joven vio la posibilidad de crear su propia empresa constructora. Fundó así una insipiente empresa contratista que no detuvo su expansión hasta convertirse en una de las principales firmas constructoras-inmobiliarias de la República Argentina. Falleció en su ciudad, Mar del Plata, el 22 de Mayo de 1980. Protagonista principal del cambio en la fisonomía ciudadana local, Fiorentini fue uno de los pioneros del concepto de “construcción vertical” reinante en todas las grandes urbes del mundo, ciudades que por su importancia turística asistieron a un crecimiento demográfico esplendoroso. Desde 1935 el auge de la construcción caracterizó a esta pujante ciudad balnearia. Su “salto” al crecimiento total se produjo en 1948 con la sanción de la Ley de Nº 13.512 denominada de Propiedad Horizontal, sancionada el 13 de octubre de 1948. Fue entonces cuando el hábil empresario constructor comenzó a soñar con un edificio monumentalen un predio único –por su ubicación- en Cabo Corrientes. Fiorentini soñaba algo especial para ese terreno de 9347m2 con frente convexo desde la vista marina. El notable constructor “no durmió” hasta concretar la compra de esa importante fracción de tierra costera, ubicada sobre el Blvr. Marítimo Patricio Peralta Ramos, entre las calles Aristóbulo del Valle y Falucho. Lugar donde hoy se erige, orgulloso de su estirpe, el Edificio Mirador Cabo Corrientes.
Fiorentini fue fundador de una de las empresas constructoras marplatenses más grandes de todos los tiempos. A su ingenio y visión empresaria no sólo le debemos nuestro querido Edificio Mirador del Cabo. Entre sus proyectos concretados podemos citar al Edificio Galería Sacoa, el Edificio Mirador del Torreón del Monje y los edificios “Eiffel”, entre otras importantes obras.
Conocido como uno de los precursores de la “Avenida del Ruido”, Domingo Fiorentini le dio gran impulso a la Av. Constitución como zona privilegiada de la “noche” marplatense. Fue propietario de memorables locales nocturnos entre los que podemos mencionar a la famosa confitería Enterprise, “La Jeneusse (en Moreno entre Sgo. Del Estero y Sta. Fe) ” y el bailable “2001” (Buenos Aires entre Rivadavia y Belgrano).
Cuando todavía no se había inventado la moda de hablar de “responsabilidad social empresaria”, frase que hoy muchos confunden con “marketing de bajo costo”…, Domingo Fiorentini ocupaba sus horas de descanso en trabajar para importantes instituciones sin fines de lucro. Con esmero, tiempo y apoyo económico propio fue precursor del proyecto “El Portal del Sol”, institución de la cual fue Presidente en repetidas oportunidades.
Consideraba al deporte como una herramienta indispensable para el desarrollo de jóvenes, así pues Fiorentini dedicó gran parte de su vida al crecimiento del Club Atlético Kimberley, del cual fue Presidente durante los años 1968, 1969, 1970, 1971, 7972 y 1973. A su destacada gestión, el Club debe su sede anexa, las piscinas y la adquisición del excelente predio deportivo ubicado en Av. Polonia y Vertiz de la ciudad de Mar del Plata.
DOMINGO FIORENTINI Y SU OBRA CUMBRE, “EL MIRADOR”
El Edificio Mirador Cabo Corrientes fue para Fiorentini un verdadero desafío que otros dejaron pasar por el grado de complejidad que significaba construir en ese predio. Hace casi medio siglo realizar un edificio de grandes dimensiones en un predio donde el “Macizo de Tandilia” aflora en plena superficie era una verdadera proeza. La cantidad de metros que se debería cavar en esas antiguas rocas originadas en la era “Proterosoica” (hace 3.000 millones de años) sí que era un desafío. A su terreno cien por ciento pétreo se sumaba su irregular forma y su franca pendiente hacia el mar del “Cabo de las dos Corrientes”.
Construir allí, en un cabo, dentro del propio mar, era emprender una batalla despiadada contra “su majestad” el océano, sus vientos implacables, sus olas insistentes y su aire tan salino como la pura sal. Crear una mega obra en ese lugar era una tarea que Fiorentini no podía encargarle a un muy buen arquitecto sino a un arquitecto especial. La elegida por Fiorentini fue una de las pocas mujeres arquitectas de la época. Todavía en la década del sesenta la arquitectura era una profesión decididamente masculina. Débora Di Veroli, fue la elegida. Su nombre aparece firmándo más de 60 grandes obras marplatenses, una maestra del diseño de quien hablaremos en el link “ARQUITECTURA” por ser merecedora de un capítulo aparte.
El Edificio Mirador Cabo Corrientes se terminó de construir el 24 de Noviembre de 1972. Desde 1971 había comenzado la venta de departamentos ya que el sistema de torres individuales permitía comercializar las unidades funcionales por etapas. En 2004 fueron pintados sus más de 30.000m2 de paredes, remplazándose su color “arena” original por el actual celeste y blanco.
En 2012 el Edificio Mirador Cabo Corrientes cumple el 40º Aniversario de su final de obra. Durante parte de 2010 y todo el 2011 su Consejo de Administración y la Administradora se abocaron a la tarea de renovar sus espacios públicos y modernizar todos los sistemas operativos del edificio. Una ardua tarea realizada gracias al aporte de todos los vecinos del Mirador.
Hoy el Mirador Cabo Corrientes fue totalmente renovado y posee la máxima tecnología edilicia, brindando seguridad y confort a sus más de 2.500 habitantes.
Texto e investigación periodística: P. Márquez Peleteiro ©2012 – Depto. de Prensa E.M.C.C. prensa@cabocorrientes.org
FUENTE : cabocorrientes.org
Sugiero a los Sres. foristas visitar el sitio web citado (oficial del “Mirador Cabo Corrientes”) , donde se pueden encontrar diversos artículos de interés referentes al dicho edificio y el lugar que ocupa ,como así también numerosas fotografías.
Prof. Julián Mendozzi.
LA IMPORTANCIA DEL “CABO CORRIENTES” PARA LOS AMANTES DEL SURF ; SUS OLAS ; ALGO DE SU HISTORIA Y RECUERDOS PERSONALES.
CABO CORRIENTES Volviendo a la leyenda del Surf Argentino.
La despedida del invierno fue genial!!!. Una seguidilla de muy buenos swells nos hicieron olvidar del frío y, para quienes surfeamos en Mar del Plata, la adrenalina volvió a impregnar nuestros cuerpos.
En realidad, no se trató de un swell cualquiera o uno más de la temporada; éste tuvo la exacta dirección, tamaño y fuerza suficiente para que el Cabo volviera a romper.
De repente y sin sospecharlo pudimos regresar al glorioso point de la mejor ola que tuvo la Argentina. En esta oportunidad- sin llegar a ser la ola de antaño- brindó dos excelentes posibilidades de buenas olas: una de ellas, para ser corrida desde una posición muy cerrada, bien pegado a las grandes rocas originales del Cabo y, la otra, tomándola desde la punta de la escollera.
La primera de ellas seguía siendo una ola muy rápida, parada y casi perfecta, pero luego de un corto recorrido desgraciadamente terminaba frente a la maldita escollera, por lo cual debíamos salir cautelosamente para no repetir los numerosos accidentes que tuvieron lugar en el viejo Cabo (fractura de caderas, clavícula, golpes y cortes de todo tipo). Esta fue la ola por la que optaron los surfistas profesionales que corrieron durante esos magníficos días otoñales. En cuanto a la otra ola, un poco más gorda que la anterior, se la podía correr pegándose a la punta de la escollera.
En sus orígenes, las buenas olas del Cabo podían ser corridas con una pared perfecta desde las grandes rocas costeras hasta aproximadamente la punta de la antigua escollera Varese. En ese entonces, correr las grandes olas del Cabo era para nosotros como diplomarse de surfista. Pero esta fiesta de olas no terminaba ahí, ya que cuando rompía sensacional en el Cabo, también lo hacía en el Torreón, si bien con una ola diferente y menos crítica, pero enorme como una gran montaña de agua que rompía con un estrépito inolvidable contra los pilotes del Torreón, lugar por donde los surfistas ingresaban al point. Algunos de los primeros campeonatos argentinos de surf fueron realizados en este legendario lugar. Simultáneamente rompían excelentes olas en el viejo muelle de la Popular y lo bueno es que éramos muy poco los surfistas en todo el país.
Recuerdo perfectamente aquellos días de grandes olas que convocaban a numerosos espectadores que, totalmente sorprendidos por este nuevo deporte, nos veían deslizar sobre el agua y soportar las bajas temperaturas del invierno.
El Cabo Corrientes tiene, a su vez, una larga historia anterior al inicio del Surf y a la fundación de la ciudad de Mar del Playa. Paradójicamente, el Cabo Corrientes actual no es el punto que fue descripto como Cape Currents por el pirata y, posteriormente noble, Sir Francis Drake en 1578. En ese año navegaba frente a nuestras costas rumbo al Pacífico para atacar las poblaciones de Chile y Perú que estaban bajo el dominio de la Corona Española. Tres años después del paso de Drake, la zona fue visitada por el conquistador español Juan de Garay que la describió como una verdadera “costa galana” (de ahí el nombre del hotel ubicado en Playa Grande). Por lo tanto, el verdadero Cabo Corrientes estaría ubicado en la Punta Mogotes y su nombre inspirado en las corrientes y rompientes que se forman en sus bajos fondos rocosos.
El actual Cabo Corrientes también fue testigo de nuestras luchas por la independencia. En el año 1826 el Almirante Guillermo Brown aguardó a la escuadra chilena y desde ahí inició su inmortal crucero corsario a las costas del Brasil, donde libró importantes batallas ante una flota muy superior que logró vencer heroicamente.
En esta zona, también existían importantes colonias de lobos marinos de uno y de dos pelos que sustentaban- en parte- a las poblaciones aborígenes de la región. A partir del período 1850-1900 estas poblaciones de lobos fueron diezmadas por la explotación del hombre blanco y el posterior crecimiento de nuestra ciudad.
Antes de ser famoso por sus olas, el Cabo Corrientes actual protegía una angosta playa conocida como Playa de los Ingleses. Su nombre precisamente hacía referencia a que esa diminuta playa era la preferida por las familias de origen inglés, Nación con la cual la Argentina estuvo íntimamente vinculada desde sus inicios.
Quienes acudían a esta playa solían alojarse en una serie de hoteles muy pintorescos construidos al borde de la rambla costera y en las mismas barrancas que rodean a la pequeña bahía del Cabo. Con el correr de los años, estas construcciones fueron abandonadas y, hace unas pocas décadas, finalmente demolidas como una muestra más de nuestro pobre espíritu conservacionista.
En nuestros días el Cabo Corrientes se ha convertido en una verdadera leyenda del surf argentino, dado que son muy pocos los surfistas actuales que han tenido la oportunidad de correrlo en sus épocas de máximo esplendor y perfección. Sin embargo, además de ser una leyenda, el Cabo también constituye un claro ejemplo de la estupidez humana.
A fines de la década del 70, debido a que nuestra costa se encontraba en un importante proceso erosivo, las autoridades gubernamentales decidieron llevar a cabo un proyecto de “protección y recuperación de playas”. Desgraciadamente, como ya es frecuente en nuestro país, no se efectuó una consulta interdisciplinaria previa entre los profesionales de mayor experiencia en el tema. De esta forma, y sin ningún estudio de impacto ambiental que pudiera evaluar las consecuencias, se optó por la peor de las soluciones: construir a lo largo de toda la costa un sistema de escolleras rocosas.
En cuanto a lo que se ganó con este proyecto no merece la pena extendernos, pero sí nos ocuparemos de lo que se perdió al alterar el diseño natural de la costa.
Lamentablemente no supimos con la antelación necesaria que el Cabo Corrientes iba a ser modificado con la construcción de dos importantes escolleras. Casi todos nos enteramos de este aberrante proyecto cuando vimos los camiones descargando enormes rocas provenientes de las canteras locales. Este acontecimiento me impactó tanto como surfista y como biólogo marino; como surfista- obviamente- estábamos por perder la mejor ola del país, por lo cual no es necesario entrar en detalles.
Recuerdo que en ese momento la primer reacción que tuve fue sentarme frente a mi querida Olivetti (no teníamos PC en esa época) y redactar un artículo en defensa del Cabo, cuyo título era: “El valor incalculable de una ola”. Como era de suponer, el diario se negó a publicarla, pues la misma estaba en una posición contraria a un Proyecto Gubernamental que, erróneamente, sostenía que la obra sería fundamental para el desarrollo turístico de la ciudad de Mar del Plata.
Desde el punto de vista científico, la modificación del Cabo y del Torreón también produjo un daño de valor incalculable.
Como todos los surfistas sabemos, la costa de la provincia de Buenos Aires carece en casi toda su extensión de fondos rocosos costeros. Los únicos puntos, en cientos de kilómetros, son las formaciones de rocas duras de Punta Iglesias, el Torreón, Cabo Corrientes-Playa Grande y Punta Canteras.
Estas rocas cuarcíticas, originadas hace nada menos que 500 millones de años, son las más antiguas de la Argentina y se caracterizan por permitir que sobre ellas se desarrollen comunidades de organismos animales y vegetales, únicos en todo el país. Precisamente en Cabo Corrientes y en el Torreón fue donde tuvieron lugar las primeras colecciones biológicas y los primeros estudios realizados por el Instituto de Biología Marina. Esta fue una institución pionera en Latinoamérica en las Ciencias Marinas, creada al comienzo de la década del 60 y, hoy día, se levanta como una lamentable ruina en Playa Grande.
Desde el punto de vista biológico, el atributo principal de los fondos rocosos del Cabo y del Torreón, era la formación de una plataforma de poca pendiente que, durante la baja marea, dejaba expuestas comunidades constituidas por una amplia variedad de organismos de gran valor científico, muchos de ellos incluso desconocidos para la ciencia. Hoy día, estas comunidades ya no existen como tales, pues la plataforma rocosa ha sido cubierta por un manto asfixiante de arena.
El proyecto implementado en defensa de las playas nunca debió haberse llevado a cabo en virtud de los graves problemas que ocasionó y seguirá produciendo en el futuro. En vez de optarse por construcciones rocosas tan imponentes y estáticas se debería haber implementado un proyecto de refulado de arena proveniente de zonas más profundas, como el que se efectuó últimamente y que aún podría ser mejorado. Este último tiene la característica de ser un sistema dinámico y de mejor control en el tiempo.
Hablando de este tema con Fredy Tortora, Director de Surfista, y en plena redacción de esta nota, me hizo una pregunta que aún sigue rondando por mi cabeza: -”Ricardo, no podríamos volver a construir el Cabo como en las viejas épocas y así recuperar la ola?”. Me quedé pensando un rato y le dije que todo era posible, pero que habría que analizarlo con detenimiento. Al margen del costo económico y de su desarrollo técnico, es imprescindible buscar la alternativa capaz de compatibilizar con otros intereses que están en juego y que van más allá del Surf y de la Biología Marina.
A lo largo de su historia, el hombre ha afrontado con éxito desafíos aún mayores que la reconstrucción del Cabo Corrientes. Ante todo sería importante saber el apoyo que este proyecto podría tener dentro del ambiente del Surf, como así también de las autoridades gubernamentales y de los potenciales sponsors del mismo.
En caso de proseguirse con esta idea, todo el proyecto debería estar sustendado sobre la base de un estudio científico-técnico interdisciplinario para que no se repitan los errores del pasado que nos privó de la mejor ola de la Argentina.
AUTOR : Bastida , Ricardo . Surfista y Biólogo Marino.
PARA : Surfrider Foundation Argentina.
Prof.Julián Mendozzi.
Domingo Fiorentini.Su fallecimiento-30º Aniversario 21-5-2010
Retirado de las actividades comerciales falleció en la ciudad de Mar del Plata de la cual era nativo.Hijo de laboriosos inmigrantes italianos, su ciudad natal sintió y vivió el palpitar de su gran capacidad empresaria.Dedicado a la Industria de la construcción se convirtió siendo muy joven en pionero de la actividad.Es así que el tiempo en su transcurrir fue dando testimonio inexorable de su férrea voluntad de hacer.Esa misma voluntad que lo llevó a fundar numerosísimas sociedades,entre ellas las más destacadas: DOMINGO FIORENTINI Y HNOS. S.A. y DOMINGO FIORENTINI Y CIA. S.A. (con su socio Italino Orlando Pablo Pasquariello),de las que fue su indiscutible Presidente.Su quehacer de construir hogares a través de sus empresas fue extendiéndose paulatinamente a casi todo el ámbito del país.No conforme con las realizaciones empresarias,su siempre inclaudicable espíritu lo impulsó a colaborar en entidades de bien social y deportivo.Fue presidente de El Portal del Sol -institución de enseñanza diferenciada y reeducativa-y del Club Kimberley -entidad deportiva de gran arraigo en la ciudad balnearia-.Diferente una de otra no fue obstáculo para que Domingo Fiorentini pudiera estar al lado de los niños necesitados y vigilar al mismo tiempo el desarrollo de la sana juventud del club de sus preferencias.Mar del Plata llora a uno de sus hijos más queridos y es así que como lo vio nacer hace casi setenta años, hoy toma sus restos para guardarlos con el profundo respeto que su hombría de bien merece.Que duerma en paz.Amaba su ciudad natal,y por ella dedicó su vida.Deja un gran legado a la sociedad,cristalizado en la construcción del Edificio Mirador Cabo Corrientes,premiado como emblema de Mercosur,como así también el Edificio Mirador del Torreón y los edificios Eiffel de la ciudad feliz.En su 30º aniversario lo recuerdan,con profundo amor,su hija María Angélica de Pasquariello y Pablo Fernando Pasquariello.(Fuente: angelicapablo.wordpress)
Señor Mendozzi: el interesante artículo del señor Bastida, surfista y biólogo marino, incluye una brevísima referencia histórica: “El actual Cabo Corrientes también fue testigo de nuestras luchas por la independencia. En el año 1826 el Almirante Guillermo Brown aguardó a la escuadra chilena y desde ahí inició su inmortal crucero corsario a las costas del Brasil…”. Tal vez no debería vincularse a ese acontecimiento con las luchas por la independencia. Por otra parte, el almirante no aguardó a la “escuadra chilena”, expresión que sugiere un apresto de enfrentamiento naval, cuando en realidad estaba esperando tres barcos que compró en Chile para emprender la campaña a Brasil. De esos tres barcos llegó solamente uno, la corbeta Chacabuco. Al igual que la vida del gran marino, éste fue un muy interesante hecho histórico ocurrido en el área que es hoy MdP. Atentamente, Lafra.
Podemos agregar a la presente imagen documental,la foto 8372,enviada por el Sr. Ignacio Iriarte,donde se observa la zona antes de la construcciòn del edificio.
http://www.lacapitalmdp.com/contenidos/fotosfamilia/fotos/8352
Quizá algún forista pueda confirmar si la baliza de enfilación del Cabo Corrientes -antiguamente sobre el Scafidi- está actualmente sobre el primer edificio del conjunto Mirador aparece en la fotografía del señor Vita. Muchas gracias, Lafra.
Sr. Lafra , tenga Ud. buenas tardes ; que interesante esto que nos cuenta ; lamento no conocer personalmente al autor del artículo como para poder contactarlo con Ud. para que debatan el tema.
Una muestra mas de lo importante que resulta citar las fuentes.
A título personal , y ya que menciona el tema , le confienso que a mi juicio la lucha por la Independencia de nuestro País y de tantas otras Naciones Latinoamericanas hermanas continúa aun hoy , claro que en un marco muy distinto al de la llamada Independencia en términos formales y contra nuevos (…o no tanto…) Imperios colonialistas y sus diversos medios de dominación , sometimiento y explotación .
En fin , pero eso ya es “harina de otro costal” y no es mi intención discutirlo aquí ni plantear un debate con Ud. o con el foro.
Le dejo un saludo y hasta cualquier momento en Fotos de Familia.
Atte. Prof. Julián Mendozzi.
Señor Mendozzi: creo que la lucha por la Independencia de la Argentina y muchos países de América es un período histórico cerrado ya. Las otras luchas a las que usted se refiere son las que nunca terminarán de ocurrir por ser propias de la naturaleza humana, como tratar de imponer a otros sus ideas, conveniencias y pretensiones. Los imperios son hoy de otra esencia y pueden ser indistintamente de derechas, izquierdas, de arriba o abajo, como lo son el colonialismo, la dominación, el sometimiento y la explotación. Y estoy de acuerdo en que Fotos de Familia tiene un propósito tal vez cándido y delicioso en contraste con esos otros menesteres de la raza humana. Mis saludos. Lafra.
La cosa mas fea que se haya constuido sobre la costa
Buenas tardes Sr. Lafra , en fin , digamos entonces que lo que Ud. aprecia como un “punto y aparte” , yo lo veo como un “punto y seguido” ; y así debe ser nuestra naturaleza ciudadana , con acuerdos y discensos.
Como de costumbre , le dejo mis saludos
Prof. Julián Mendozzi.
Buenos días y saludos para todos los colaboradores de fotos de familia,esta genial idea del diario La Capital.
Coincido con la opinión del señor Jorge,el edificio es uno de los más feos construidos en la costa,según mi criterio.
¡Impactante fotografía! Enorme estructura, digamos no muy bonita (hay peores)
Libro diamante la capitalel dueño de de los boliches era enrique fiorentini
Hay una confusión, el dueño de las confiterías bailables en Constitución no era Domingo Fiorentini, sino su hermano menor, Enrique.
si domingo era mi bis abuelo.
El último caballero.