Si bien la ordenanza que regula los lugares y horarios en los que puede haber oferta sexual, la actividad insiste en instalarse en la histórica zona roja de la avenida Luro. Denuncias de vecinos, infracciones, vehículos secuestrados y detenidos en torno a un submundo vinculado con la delincuencia.
Pasaron 18 meses desde que una ordenanza municipal “prohibió” las zonas rojas y estableció que en Mar del Plata solo puede haber oferta sexual en la vía pública en la avenida 10 de Febrero, a metros de los cementerios Parque y Colinas de Paz, de 22 a 6 y, sin embargo, cada noche la avenida Luro parece volver a ser el punto en el que, principalmente trans, se paran en las esquinas para ejercer la prostitución.
Cada noche la historia es la misma: vecinos denuncian que hay trans ofreciendo servicios sexuales en la vía pública, la policía o personal de la municipalidad van al lugar, labran actas por infracciones y los expulsan de allí. Para que a la noche siguiente vuelvan a llamar -desde la misma zona u otra cercana- para tener que hacer lo mismo. Una especie de día de la marmota de la prostitución en la vía pública.
La ordenanza 25.590/22 contempla que prostitutas y clientes pueden ser multados con montos que van desde los 290.000 pesos a 1.450.000 por estar en zonas y horarios no permitidos. Pero no contempla qué pasa si a la persona multada esto no le importa. Para citar un ejemplo: una trans que se dedica a la prostitución ya ha recibido un centenar de infracciones, un centenar de actas labras que, luego un Juzgado de Faltas podría convertirlas en un centenar de multas. Si todas estas actas se traducen en multas, la trans debería abonar una suma de entre 29.000.000 a 145.000.000 de pesos.
En la práctica sucede que prostitutas y clientes por más faltas contravencionales que cometan no pueden ser trasladados a una unidad penal. Por lo que la policía y desde el área de Seguridad del Municipio lo que suelen hacer es “incomodarlos”: parar a los clientes, pedirles documentaciones, controlarlos.
La zona que más preocupa a las autoridades hoy por hoy es la de siempre: la avenida Luro entre las calles Guido, Funes, Olazábal, San Juan, La Pampa y Chaco. Después pareciera existir un corte en la actividad, hasta que renueva sobre las calles Victoriano Montes y Juncal, con ramificaciones por esas arterias en Chacabuco e Ituzaingó.
La oferta de servicios sexuales atrae a personas del submundo de la delincuente y, sobre todo, de la compra venta de estupefacientes al menudeo en su más bajo escalón. Este microclima altera la convivencia en esas zonas en las que viven familias y hay negocios.
El secretario de Seguridad del Municipio, Rodrigo Goncálvez, explicó a LA CAPITAL que “nunca se dejaron de hacer operativos” y que se realizan de manera dinámica por diferentes puntos de la ciudad. Además, agregó que ante el recrudecimiento de la oferta sexual en zonas no permitidas se han ordenado controles constantes por las noches.
“Durante esta última semana hemos reforzado los controles sobre esta actividad, ya que si no cuenta con el control adecuado, logra imponerse en algunos sectores del Mar de Plata”, dijo Goncálvez y agregó: “Siempre es un esfuerzo muy grande desde el punto de vista operativo. La Patrulla Municipal, que hace diferentes tipos de actividades, en este caso toma el control y trabaja con Prefectura, con la Comisaría de Jurisdicción y alguna descentralizada”.
“Vamos a seguir en esa zona, a ampliarla y a estar monitoreando algunas otras que, en este sentido, generan alguna complicación para el vecino, que lo transmite y le corresponde hacerlo”, concluyó.
Infraccionan a más de cuatro personas por noche
En lo que va de la semana, el Municipio realizó cuatro operativos nocturnos de saturación y control, en los que desarticularon múltiples situaciones de oferta y demanda de sexo e infraccionaron a 23 personas. Estas acciones, según explicaron, “tienen como objetivo preservar la convivencia en el espacio público, prevenir posibles conflictos y evitar situaciones de peligro para los vecinos”.
Según cifras oficiales a las que accedió LA CAPITAL, en Mar del Plata, desde diciembre de 2023 hasta el 20 de marzo de 2024, se labraron 498 actas a prostitutas y clientes por infringir la ordenanza que regula la oferta sexual. Es decir, que más de cuatro personas por día (o por noche en este caso) han sido infraccionadas, que luego podrían recibir multas.
Además, en ese tiempo se han secuestrado 299 vehículos -179 motos y 120 autos o camionetas- y han sido aprehendidas 16 personas por diferentes delitos.
En 2023 -el primer año en el que la ordenanza estuvo en vigencia en sus doce meses-, en total el Municipio labró 2135 actas, entre oferta y demanda de servicios sexuales, casi 6 por noche.
Según estos números, en 2023 se labraron más actas por día que en lo que va de este 2024 por incumplir la ordenanza que regula la oferta sexual en la vía. Desde el Municipio han intensificado los controles para una problemática que, ha pesar de una ordenanza que prevé multas, no desaparece, sino que se traslada de zona en zona.
Este tipo de situaciones se pueden denunciar durante las 24 horas a la línea de WhatsApp 2234 549131.