""Lo sacamos porque no fue senador, no fue vicepresidente y yo no soy su viuda", se justificó la vicepresidente y le recordó al kirchnerismo que "ustedes no quisieron poner el busto de la exvicepresidenta (y luego presidenta de la Nación, María Estela) Martínez de Perón",
La vicepresidenta Victoria Villarruel retiró un busto de Néstor Kirchner del salón de las Provincias del Congreso, lo que generó airadas protestas de legisladores del Frente de Todos (FdT) durante una sesión preparatoria en la que se reeligieron a las autoridades del Senado y en la que también hubo cruces por asuntos como la cuestión Malvinas y la investidura presidencial.
Uno de los cruces se produjo con el jefe del interbloque mayoritario, José Mayans, quien le preguntó a Villarruel qué había pasado con un busto del expresidente fallecido Néstor Kirchner que se había instalado hace algunos años en el Salón de las Provincias.
“¿Qué pasó con el busto de Néstor Kirchner que lo hicieron desaparecer?”, preguntó el senador formoseño, a lo que la titular del Senado le respondió que habían comunicado el cambio y que estaba en la sección de Archivo de la Cámara.
“Lo sacamos porque no fue senador, no fue vicepresidente y yo no soy su viuda. Y le recuerdo que ustedes no quisieron poner el busto de la exvicepresidenta (y luego presidenta de la Nación, María Estela) Martínez de Perón”, respondió Villarruel.
Por su parte, la agrupación política La Cámpora enmarcó esa decisión como parte de una “venganza” ejecutada “a escondidas” por la Vicepresidenta, a quien calificaron como “perversa” y “viuda de (Jorge Rafael) Videla”.
“De esta manera, cree que repara el daño a la figura de quien visitó en prisión”, publicó La Cámpora en un comunicado, en alusión a las visitas que realizó Villarruel al exdictador Videla cuando estaba en prisión cumpliendo su pena por cometer delitos de lesa humanidad durante la última dictadura.
En el comunicado, la agrupación recordó que el propio Videla reconoció en una entrevista que su “peor momento llegó con los Kirchner”.
Tras la polémica, el busto de bronce que representa el rostro del expresidente Kirchner fue instalado en una de las oficinas que el interbloque de senadores que el FdT ocupa en el Congreso.
Otro de los cruces que tuvo la Vicepresidenta fue cuando discutió con la senadora fueguina María Eugenia Duré por la cuestión Malvinas, luego de que la legisladora mencionara que la actual presidenta de la Cámara alta “hizo campaña diciendo que era la primera hija de un veterano” del conflicto del Atlántico Sur en llegar a la vicepresidencia.
“Le voy a pedir que cuando se refiera a la Causa Malvinas, tenga el respeto de no usarla para politiquería barata. Soy hija de un veterano de guerra y Malvinas no es un tema de campaña”, le respondió Villarruel.
Duré, haciendo uso de una cuestión de privilegio contra Villarruel, pero también contra el presidente Javier Milei y la canciller Diana Mondino por su comportamiento respecto de la visita del canciller inglés David Cameron a las islas había declarado: “Usted durante toda su campaña dijo que era la primera hija de un veterano de Malvinas en asumir la Vicepresidencia de la Nación. Yo soy hija de la generación de Malvinas de cientos de fueguinos que no van a claudicar en entregar nada de lo que tenga que ver con la soberanía y el reclamo legítimo”.
Pese a que -según la normativa legislativa- las cuestiones de privilegio no se responden, y a que la Vicepresidenta no debe participar de los debates (aunque en el pasado ha ocurrido con Cristina Fernández de Kirchner y con Gabriela Michetti), Villarruel -antes de darle la palabra al radical Pablo Blanco, quien también fue aludido por la senadora Duré- eligió responder.
“En mi casa, desde el ’82 mi padre dio la vida y ofreció su tranquilidad, su cuerpo, su sangre y la de sus camaradas para que este país sostuviera reclamo de soberanía. Así que por favor, tenga el respeto de no usar la causa Malvinas cuando es de todos los argentinos”, enfatizó la Vicepresidenta.
El padre de Villarruel, el teniente coronel Eduardo Villarruel, fallecido en 2021, combatió en la guerra de 1982.
A continuación, la vicepresidenta se sintió en la obligación de pedirle “respeto” al senador chaqueño Antonio Rodas quien había llamado “Calígula” al presidente Milei y mencionado que “lo que falta es que se case con su hermana”.