La película de Darío Doria mezcla el mundo de la ficción y un caso real. Relata el caso de Vicenta Avedaño, una madre que luchó para que su hija abusada pudiera abortar.
Basada en el caso de Vicenta Avedaño, una madre que defendió el derecho de su hija con retraso madurativo a abortar por un abuso sexual intrafamiliar y que llegó a demandar al Estado argentino, “Vicenta” es la película de Darío Doria que pasó por Mar del Plata y que reconstruye esta historia a través de un original tratamiento. Se vale de personajes de plastilina para narrar los hechos que sucedieron en 2006. La película ya es parte de la grilla de contenidos de la plataforma CineAr Play.
“La historia que contamos transcurrió mayoritariamente en el año 2006, pero nosotros como equipo de realización no queríamos contar los hechos en tiempo pasado sino volver el tiempo atrás y acompañar a Vicenta y su familia mientras las cosas iban sucediendo”, contó Doria a LA CAPITAL.
“Queríamos contar la historia en tiempo presente. Pero, ¿cómo hacerlo sin que ello implique recurrir a la recreación con actores? Buscamos por varios caminos hasta que con la artista plástica Mariana Ardanaz nos planteamos recrear las situaciones que atravesó esta familia con personajes de plastilina y maquetas”, agregó.
Estrenada durante el Festival de Cine de Mar del Plata de 2020, la película documental logra emocionar a través de esos personajes de plastilina. “Hicimos algunas pruebas y vimos que funcionaba, que el pasado se volvía presente”, indicó el realizador.
A pesar de la presencia de estos muñecos, el filme se afianza en la realidad. “Los hechos que narramos respetan fielmente lo sucedido. Así que de alguna manera esta peli junta dos mundos, el de la ficción como forma y el del documental como historia. Y en el medio, uniéndolos, una voz en off, escrita en segunda persona por Florencia Gattari, cuyo cuerpo y alma lo puso Liliana Herrero con su hermosa y profunda voz”.
El disparador del filme fue la noticia que daba cuenta de que finalmente Vicenta -una madre pobre de una ciudad bonaerense- había logrado cumplir el derecho a la interrupción legal del embarazo de su hija de 19 años. “Sentí que teníamos que hacer esta película desde el respeto y la admiración hacia ella para intentar cambiar el mensaje que había quedado en relación a esta historia“, apuntó el cineasta.
Y recordó que “la historia de Vicenta fue tapa de los diarios más importantes del país y se le dedicaron horas y horas en los noticieros y programas de radio del momento, todo era incomprensible, indignante, violento hacia Vicenta y sus hijas. Aquella vieja lucha a favor y en contra del aborto se había metido en la vida de estas mujeres exponiéndolas brutalmente“. Se trataba de 2006, aún estaba lejos la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, aunque sí regía la Interrupción Legal del Embarazo para los casos como el de la hija de Vicenta.
“Al momento que sucedieron los hechos llevaba casi cien años de aprobada (la Ley de Interrupción Legal) y a pesar de ello no fue respetada. Vicenta habla de los derechos avasallados, de las leyes que a pesar de estar promulgadas no son cumplidas. De la lucha que muchísimas mujeres tienen que dar para que las leyes sea cumplidas. De ahí, creemos modestamente, que es importante que la historia de Vicenta sea recordada como feliz y victorioso ejemplo de lucha”, dijo el director, para quien la protagonista representa la frase del poeta y escritor Mario Benedetti. “Quien lo diría, los débiles de veras nunca se rinden”.