Alberto Fernández confirmó que no le dará tratamiento parlamentario al proyecto de Presupuesto enviado por Macri. En los próximos días convocará a todos los sectores para "impulsar un conjunto de medidas económicas y sociales.
El presidente Alberto Fernández advirtió hoy que “va a llevar algún tiempo lograr la recuperación de la economía” y recordó que “el tejido social está en estado de extrema fragilidad por la fuga de capitales”.
Sostuvo que “los argentinos hemos pasado del estancamiento a una caída libre” en los últimos años.
Asimismo, confirmó que no le dará tratamiento parlamentario al proyecto de Presupuesto enviado por Macri: “No refleja las realidades sociales ni los compromisos de deuda que se han asumido”.
En su primer discurso como Presidente, sostuvo que en los próximos días convocará a todos los sectores para “impulsar un conjunto de medidas económicas y sociales que comiencen a revertir el atraso social y productivo”.
Dijo que impulsará “la puesta en marcha de acuerdos básicos” para que “la Argentina se encienda y pueda volver a caminar”.
Señaló que el anterior gobierno dejó “la tasa de desocupación más alta desde 2006”, y llevó “el dólar de 9,70 a 63 pesos solo en cuatro años”.
“La Argentina no para de achicar su economía”, lamentó Fernández, e indicó que “la pobreza actual está en los valores más altos desde 2008, se han retrocedo más de 10 años”.
Prometió pregonar por un Estado “presente y constructor de una economía social” y anunció que creará un sistema masivo de créditos no bancarios a tasas bajas.
Fernández enumeró las “prioridades” económicas y señaló a las familias que están “asfixiadas” por los “altos niveles de endeudamiento”, porque han tomado créditos “para comprar alimentos, remedios o pagar facturas de servicios”.
También hizo notar la situación “dramática” de las pequeñas y medianas empresas y prometió que en la economía que viene se tendrá en cuenta al “cooperativismo y la agricultura familiar”: “la cultura del trabajo se garantiza creando trabajo, no de otro modo”.
Lamentó que en los jóvenes el índice del desempleo es del 30 por ciento y en las mujeres más aún, sumado a que más de un millón de jóvenes “no estudian ni trabajan”.