La imagen parece sacada de una película de catástrofes. O bien podría reflejar el humo gris que aparece como consecuencia de algún voraz incendio. Pero, afortunadamente, solo responde a un fenómeno climatológico: la niebla.
La densa masa comenzó a advertirse en las primeras horas del día pero, en lugar de desaparecer llegado el mediodía, se densificó, llamando la atención de los transeúntes y automovilistas que circulan por algunas calles de la ciudad, como la avenida Colón.