Dirigentes de varias instituciones deportivas de esta ciudad admitieron que ellas “revivieron” desde que se permitió la práctica de algunas de disciplinas. Crece la sensación de que “pasó lo peor”.
La vuelta de las actividades deportivas a los clubes, luego de meses de parate, fue recibida por las instituciones con alegría, entusiasmo y alivio. Pese a las limitaciones imperantes, los chicos respondieron casi masivamente a la hora de la reapertura. El balance realizado por un grupo de clubes de esta ciudad es auspicioso.
“La verdad fue que me sorprendió este regreso. Veníamos con muy poca gente en los zooms, perdíamos chicos en todas las divisiones y se nos estaba agotando la creatividad. Teníamos miedo de volver y de que no respondan. Pero cuando reabrimos con el acondicionamiento físico con distanciamiento vinieron hasta los más chiquitos y los padres se mostraron muy agradecidos. Hoy tenemos chicos nuevos en todas las divisiones y tenemos más que antes en hockey y rugby. Sentimos que pasó lo peor. Padres y jugadores estuvieron a la altura y se mantuvieron cerca del club. Y además pudimos reacondicionar el predio en los meses de pandemia, algo que el trajín habitual siempre impide. Estamos ilusionados con un 2021 lo más normal posible”, sostuvo Sebastián Garro, presidente de Biguá Rugby Club.
Guillermo Herrero, titular de Atlético Mar del Plata, señaló que su club arrancó “con fútbol en la villa deportiva”. Y en la sede social las actividades se reanudaron esta semana. “Patín artístico, algo de handball y un turno de roller derby con los protocoles correspondientes a cada disciplina. Se trabajará hasta 19.30 tratando de no encender las luces porque hoy nuestros ingresos son muy bajos y trataremos de no incrementar los gastos”, afirmó con cautela. “Los clubes fuimos muy golpeados en todo este tiempo. Trataremos de pasar lo que queda de este año tan feo y tan duro para los clubes de la ciudad”, finalizó.
Daniel Lemmi, presidente de San José, destacó la convocatoria de la vuelta del fútbol. “En el predio de Canosa al 600 comenzamos con el futbol infantil a mediados de noviembre. Retomaron alrededor del 95% de los chicos, con muchos cuidados y protocolos. Los papás sólo pueden ingresar al predio en autos. Si bajan, con mucho distanciamiento para mirar el entrenamiento. Tratamos de cuidar mucho ese aspecto”, afirmó. “Arrancó también el fútbol femenino con 60 chicas y el patín carrera en el Patinódromo y en la pista de ruta con actividad fluida”, amplió.
Al igual que Biguá, San José de alguna manera logró aprovechar el parate. “Durante el tiempo de pandemia pudimos seguir adelante con algunos trabajos de acondicionamiento en el predio. Hicimos baños nuevos, revestimos con material unas tribunas e hicimos nuevos asientos para que los padres disfruten con comodidad de ver jugar a sus hijos. Y en la sede social, de a poquito, estamos haciendo un nuevo ingreso con los medios que tenemos. San José es un club de garra y corazón, vamos despacito. Pero pintamos, hicimos arreglos en el techo del gimnasio y en el buffet”, finalizó Lemmi.
Talleres logró reactivarse en su sede y en la villa deportiva. “Arrancamos hace un mes con las actividades en la sede. Costó mucho y estamos muy contentos. Es sumamente importante para los chicos. Trabajamos con cantidades chicas, en grupos de a diez, con media hora de distanciamiento entre grupo y grupo, y protocolos. Tuvimos una respuesta y una convocatoria muy importante. Este mes fue una especie de oxígeno para nosotros, para los padres y para los chicos”, sostuvo la presidenta Alejandra Bonci.
“En la villa deportiva volvimos con hockey , una actividad habilitada con anterioridad, y desde el 10 de noviembre con fútbol. Estamos felices de volver y hacer lo que nos gusta y seguiremos trabajando para que los chicos vuelvan a entrenar y a competir normalmente”, concluyó.
El regreso de General Mitre pasó por el patín carrera. “Fui muy importante regresar con esta disciplina”, afirmó el vicepresidente Alejandro Salguero. “Esta actividad, de alto rendimiento, exige entrenamientos diarios. Lo mejor para nuestros patinadores fue volver a interactuar y a entrenar todos juntos. Volver al Patinódromo y a la pista rutera fue muy importante para nosotros”, destacó.
Alejandro Yapuncic, por su parte, contó cómo fue la reactivación en River. “Comenzamos hace dos meses y medio con el tenis, una de las actividades permitidas con anterioridad por el distanciamiento entre los competidores. Nuestras dos canchas tuvieron mucho movimiento”, puntualizó.
“Hace 30 días comenzaron los entrenamientos de preparación física de hockey y fútbol. En las dos actividades tuvimos muy buenas respuestas y dispusimos horarios amplios para darle lugar a todos con los cuidados debidos. Te diría que la vuelta fue emotiva porque, después de tantos meses, ver llegar a los chicos con su ropa de entrenamiento y a los profes nos provocó mucha alegría”, continuó.
“Ya volvió a entrenar el equipo de voleibol femenino senior y también se pusieron en marcha el patín artístico y el taekwondo. Sólo pararemos en la semana de las Fiestas y proyectamos volver en los primeros días de enero. River no se toma vacaciones porque queremos un comienzo de año bien activo”, finalizó el activo dirigente.