Aseguraron que hay trabajadores en negro y esperando el pase a planta permanente hace seis años. Por la situación social, también destacan violentas situación en la atención al público.
Trabajadores del PAMI, con el apoyo de la CGT y la CTA, denunciaron este miércoles la precarización laboral que viven empleados de la obra social de jubilados y las situaciones de mal trato laboral a la que son expuestos quienes atienen al público en la sede ubicada en Balcarce y Salta.
En conferencia de prensa, y en el marco del desarrollo de la asamblea, su representante, Patricio Bechini, señaló que existen “trabajadores que están ‘en negro’, precarizados con más de seis años de antigüedad”. “Habiendo ingresado en 2013, no tiene recibo de haberes, aguinaldos, obra social o permiso por examen, entre otras de las carencias que conlleva trabajar en esa situación”, agregó.
Según señaló, al asumir la nueva gestión en 2015, se les había prometido que “en 90 días iban a pasar a planta permanente”. Sin embargo, señaló que “ya pasaron más de tres años y no hay respuesta alguna. Mientras, en el sanatorio Bernardo Houssay (sito en Juan B. Justo 1774) está entrando personal a planta permanente y contratada con un sueldo tres veces más grande al de nuestros compañeros contratados”.
Por otra parte, Bechini puso el foco en la falta de empleados que hay en la Unidad de Gestión Local (UGL). “Mar del Plata es la tercera ciudad del mundo con mayor población de personas mayores, pero es, a su vez, la que menos cantidad de trabajadores tiene, en relación a la cantidad de afiliados”, señaló. Según indicaron, la UGL local tiene cerca de 240.000 afiliados y 350 trabajadores en planta permanente.
Para los dirigentes, este desfasaje entre personal y cantidad de jubilados lleva a que el afiliado, sin tener un lugar dónde atenderse rápido, termine yendo al Hospital Interzonal, “colapsando el sistema de salud público”.
A su vez, tanto Bechini como el resto de los dirigentes presentes destacaron la “violencia laboral” a la que son expuestos quienes atienden al público. Según señalaron, la situación social y económica apremiante no favorece a que los jubilados realicen sus reclamos en buenos términos.
“La violencia laboral que están sufriendo los compañeros de atención al público es preocupante. La gestión no hace absolutamente nada. Conoce bien el diagnóstico y no hace absolutamente nada, por lo que los hacemos responsables directos, tanto a la gestión local como la nacional, de cualquier problema que tenga tanto físico como psíquico el compañero trabajador“, señaló el representante de la asamblea, quien también aprovechó la presencia de medios presentes para hablarle a los jubilados.
“Muchas veces se producen algunas peleas con los jubilados y yo les quiero decir que tienen mucha razón porque realmente están siendo golpeados por este sistema perverso, pero también los trabajadores estamos siendo golpeados por este sistema perverso. Mientras a ustedes les tocó perder medicamentos, perder muchas conquistas, nosotros el último año tuvimos una paritaria vergonzosa y perdimos un 30% de poder adquisitivo. Por lo cual, ambos somos víctimas de este sistema, y espero que esto al menos sirva para unirnos. Creo que tenemos que, a futuro, dar la lucha en conjunto: no somos enemigos, somos víctimas los dos“, indicó.
A su turno, el titular de la CGT Mar del Plata, Miguel Guglielmotti, manifestó su apoyo a los trabajadores y atribuyó la situación a “los recortes presupuestarios que viene realizando el Gobierno nacional a través de sus políticas neoliberales”. “Esto genera la falta de entrega de prestaciones y medicamentos, la problemática con las internaciones, que jubilados que se han jubilado hace dos años no tengan un efector clínico que los atienda, lo que lleva a atenderse al Higa. Es importante comenzar a tomar acciones para intentar contrarrestar estas situaciones”, dijo.
En la misma línea, Diego Lencina, de la CTA, se solidarizó con los trabajadores del PAMI y aseguró que la presencia de las centrales sindicales no era más que “una señal contundente” de que la pelea es “en conjunto”.
“Esta situación a la que llega hoy PAMI no es por azar, sino es el resultado de políticas que están dirigidas a golpear los sectores de la niñez y la tercera edad”, señaló, y aseguró que hace cuatro años, el PAMI contaba con cuatro clínicas privadas como efectores de la obra social: “Hoy, con una cápita mucho más superior a la de por ese entonces, nos encontramos con que cada vez son menos las clínicas donde se pueden atender”, señaló.
Por su parte, Pedro Sanllorenti, secretario general de ADUM, cerró la conferencia comprometiendo el apoyo de los docentes universitarios marplatenses para con los trabajadores del PAMI.
“Estamos acá presente por todo lo que ya se expresó, pero fundamentalmente porque es un problema de Mar del Plata. Mar del Plata es una ciudad en la que muchas personas, en el momento de su retiro, deciden venir a vivir y a encontrar esa ciudad feliz que en algún momento creyeron que existía. Y por eso no podemos permitir que los trabajadores del PAMI, una institución tan importante para la ciudad, estén en la situación en la que están. Como tampoco puede ser que quienes necesitan la atención de salud, no la reciban”, concluyó.