La película de Mariano Cohn y Gaston Duprat se exhibió en la sección Culinary Zinema.
por Alicia García de Francisco
SAN SEBASTIAN.- La obsesión de los argentinos por el asado es algo “salvaje, primitivo, contradictorio”, que supera cualquier límite, y eso es lo que los directores Mariano Cohn y Gaston Duprat quieren mostrar en “Todo sobre el asado“, una película proyectada en la sección Culinary Zinema del Festival de San Sebastián.
Un asunto sagrado en Argentina, tanto que los realizadores no sólo participan en el festival español con su película, sino que se atreven a participar en un duelo muy especial: asado argentino frente a chuletón español, explican divertidos Cohn y Duprat a EFE.
Hasta se han aventurado a preparar la típica salsa que acompaña al asado, el chimichurri, para una cita que se celebrará esta noche. Y ante la duda del periodista: ¿Pero no es una salsa vasca?, los dos saltan al unísono: “¡No, ¿esta también?, no!”.
Porque uno de los principios de su película es que el típico asado argentino en realidad tiene muy poco de argentino y mucho de apropiación de ideas originarias de otros países, desde España hasta China.
Solo el ‘asado con cuero’ -en el que la carne se asa con la piel y el pelo del animal- parece genuínamente argentino, aunque es algo con lo que muchos de los participantes de la película no están de acuerdo.
Más de tres años tardaron Cohn y Duprat en conseguir a las personas que participan en una película que tiene tanto de ficción como realidad, una mezcla muy habitual en el cine de esta pareja de cineastas que acaban de presentar en Venecia, con gran éxito, “El ciudadano ilustre”, por la que Oscar Martínez se llevó la Copa Volpi al mejor actor.
Pese a las diferencias, entre las dos películas hay más relación de la que en un principio cabría suponer. Y hasta en una escena del ciudadano, el personaje de Martínez va a comer un asado a casa de un amigo y utiliza frases repetidas ahora en “Todo sobre el asado”.
No ocultan los directores que comparten esa pasión tan nacionalista por el asado y cuentan divertidos cómo tenían un guion pero se fue transformando durante el rodaje porque los personajes reales se convirtieron en ficción.
“Sabíamos lo que buscábamos pero no hacía dónde iríamos”, reconoce Cohn, que señala que lo que sí tenían claro es que no querían mostrar “el lado gourmet, sino el de los asadores”.
El resultado de esa búsqueda es una “película impredecible”, divertida, crítica, irónica y con una gran carga de autocrítica que los realizadores creen que será bien recibida en su tierra natal, o al menos eso esperan, aseguran entre risas.
Porque, como señala Duprat, “el asado es ese tema que todo el mundo cree que conoce bien, como el fútbol”, pero que en realidad no es así, lo que da pie a situaciones y personajes surrealistas que se toman el punto de cocción de la carne como si fuera un dogma religioso.
“Nos ha servido como excusa para generar debate sobre un tema sacro en Argentina”, reconoce Duprat.
Y además de ahondar en algo tan idiosincrático de los argentinos, “Todo sobre el asado” sirve también para analizar con poca distancia y mucho humor el contexto social de su país, algo que se repite desde su debut en el cine con el documental “Enciclopedia” (2000).
Un análisis social que se vio en “Yo, presidente” (2006), en “El hombre de al lado” (2009) y ahora en esta inteligente mezcla de parodia y homenaje que “habla de una realidad, de cómo son, de cómo se posicionan frente al mundo” unas personas concretas.
EFE.