por Jesús Vázquez
Una de las características distintivas de estos tiempos es la rapidez con que se producen los cambios. Estos si bien a veces solo implican modificaciones coyunturales, circunstanciales o modas, en otras expresan transformaciones estructurales más profundas, pudiendo llegar a verdaderos cambios de paradigma.
La rapidez con que se producen estas transformaciones es uno de los motivos del llamado “stress”, dado que en general no estamos preparados y nos resulta sumamente dificultoso adaptarnos a estas rápidas modificaciones.
En educación el cambio de paradigma operado en las últimas décadas significó que la figura relevante del proceso de enseñanza y aprendizaje pasase de la educación basada en el docente a la etapa de la educación fundada en el alumno. Actualmente estamos transitando a poner énfasis a la educación basada en las necesidades del individuo y la comunidad.
Verdades
En la primera etapa el docente era sin discusión el depositario de la verdad. Se trataba de un método autocrático, donde el estudiante participaba en forma fundamentalmente pasiva como receptor del conocimiento (aprendizaje basado en la trasmisión). La clase teórica expositiva era la estrategia fundamental en este tipo de enseñanza.
Posteriormente pasamos a la etapa en que el objetivo más importante del proceso era el estudiante, dado que lo más importante era la verdadera capacidad o competencia del futuro egresado para resolver los problemas de salud (enseñanza basada en la construcción guiada del conocimiento).
En la actualidad el énfasis esta puesto fundamentalmente en una educación basada en las necesidades del individuo y la comunidad, ya que precisamos un profesional capaz de utilizar sus competencias para resolver los problemas individuales de los pacientes y de la comunidad y estos son distintos y con diferentes necesidades y elementos disponibles en cada momento y en cada lugar.
Objetivos
Para alcanzar estos objetivos están cambiando las estrategias de enseñanza. Las clases teóricas expositivas dejan de tener un rol protagónico y las actividades participativas grupales como los talleres de discusión de casos clínicos, el aprendizaje basado en problemas, la clase invertida así como las actividades en el terreno de la práctica clínica alcanzan dimensiones cada vez más importantes en el desarrollo de los programas.
Un ejemplo de ello es el llamado Aprendizaje Basado en Problemas (ABP) que representa un verdadero cambio de paradigma, ya que primero se expone el problema y luego se busca la información y los demás elementos necesarios para resolverlo, en general en actividades de aprendizaje grupales que son útiles para capacitar en comunicación y toma de decisiones en equipo de salud.
Modernidad
Todas estas modificaciones están favorecidas por la revolución provocada por las nuevas tecnologías de la información y comunicación (TICs).
Los cambios provocados por las mismas generan expectativas no pensadas en épocas anteriores, como la propuesta de “globalización”. No obstante es importante señalar, para limitar los alcances de estos avances tecnológicos en el área educativa, que lo que fundamentalmente facilitan es la rapidez del acceso a la información y la comunicación.
Esto permite disponer de mayores espacios áulicos en los programas para las actividades prácticas y el desarrollo del área actitudinal. Aprender a comunicarse, a trabajar en equipo, a tomar decisiones, desarrollar la creatividad y mejorar la relación médico-paciente son los nuevos desafíos en la educación médica.
Si bien la facilidad para obtener la información exige el aprendizaje para buscarla y la capacidad para seleccionar la calidad de la misma, en medicina ya existen sitios web donde grupos de expertos realizan revisiones sistemáticas de la literatura brindando automáticamente información de buena calidad basada en la evidencia de las investigaciones clínicas. Un ejemplo de ello es el “Up to date”.
Competencia
Hoy el objetivo fundamental en la enseñanza de la medicina es formar un profesional competente y comprometido que posea conocimientos, habilidades y destrezas, con aptitudes y actitudes de responsabilidad y compromiso para promocionar la salud y prevenir, tratar y rehabilitar la enfermedad teniendo en cuenta fundamentalmente las necesidades de las personas y la comunidad y los problemas prevalentes de salud en la región donde ejerce, además de los elementos con que se cuenta o debe gestionar para solucionarlos. Todo lo expresado con una visión integral humanística (bio psico social y espiritual) y con profundo sentido ético y de servicio.
Para lograr estos objetivos es importante que la mayoría del cuerpo docente pertenezca a la comunidad donde la casa de estudios ejerza lo que hoy se denomina responsabilidad social universitaria (RSU).
La RSU puede definirse como la intención, capacidad y efectividad de la universidad para responder dinámicamente a las necesidades de transformación de la sociedad donde esta inmersa, mediante el ejercicio de sus funciones sustantivas: formación de ciudadanos competentes (docencia), producción y difusión del conocimiento (investigación) y participación en el desarrollo de la sociedad (extensión y transferencia).
En los últimos tiempos ha surgido y está en crecimiento el aprendizaje con simulación, utilizando para ello verdaderos simuladores o situaciones o problemas de salud representados por actores que pueden ser los mismos docentes o los alumnos. Una estrategia de este tipo es el llamado “role playing”.
Escenarios
También es importante realizar el aprendizaje en los mismos escenarios que se desarrolla la práctica clínica (aprendizaje en terreno) dado que constituye una enseñanza vivencial íntimamente ligada al ejercicio real de la profesión (aprendizaje supervisado en la práctica profesional). En este caso también las TICs facilitan la obtención de información en el tiempo real de la consulta.
Otro tema es la necesidad de generar en el alumno el hábito y las estrategias para estudiar durante toda la vida (educación médica permanente) debido a que la rápida obsolescencia de los conocimientos y su reemplazo por nuevos, es una característica de las profesiones en general y en especial de la medicina. La falta de actualización genera importantes deficiencias en el desempeño profesional.
Resulta útil señalar que el desarrollo de estas estrategias requiere poseer recursos adecuados como aulas que permitan realizar actividades de aprendizaje grupal y campos de práctica clínica verdaderos, además de disponer de recursos docentes capacitados en cantidad suficiente para mantener una relación docente/alumno adecuada.
En general, mayor número de docentes que para los programas basados en clases teóricas expositivas.
Conclusiones
Sintetizando, hemos señalado que en las ultimas décadas se han producido cambios importantes en la enseñanza de la medicina que van de una enseñanza basada en el docente y el alumno, a un aprendizaje fundamentalmente centrado en las necesidades de los individuos y la comunidad y que esto implica utilizar en mayor medida estrategias de enseñanza participativas y en terreno. También señalamos y definimos la necesidad de formar profesionales competentes y comprometidos para resolver los problemas prevalentes de la salud en sus comunidades con una actitud de servicio, ética, humanística y un enfoque integral biopsicosocial y espiritual.
Actualmente se define a esta época como la era de la información tratando de jerarquizar su importancia que no es poca, pero además como hemos señalado en educación médica es necesario convertir la información en conocimientos y adquirir las habilidades, destrezas y actitudes para poder aplicarlos y solucionar satisfactoriamente los problemas de salud y si es posible prevenirlos (mantenimiento de comunidades saludables).
El futuro profesional deberá estar preparado para desempeñarse en políticas de salud que tengan como objetivo lograr comunidades sanas, en lo posible libres de enfermedad y con hábitos de vida saludables.
(*): Director de la carrera de Medicina en Universidad Fasta.