por Adrián Freijo
“El lunes le pido la renuncia a Telpuk”, dijo Arroyo cuando agitaba su plan secreto para desembarcar en Normandía. Un año después el comisario sigue subiendo.
En el marco de la mayor improvisación que gobernante alguno haya tenido en la historia de la ciudad, la patética gestión de Carlos Arroyo suma otra “perlita” para el álbum de los disparates.
A hora de asumir, cuando presumía de tener un plan secreto que por su magnitud y brillantez no podía ser adelantado para evitar que sus ideas sin igual fuesen robadas por los opositores, El Mago de Oz de las costas marplatenses bramaba que lo primero que haría sería pedirle la renuncia al por entonces Jefe de la Policía Local y secretario de Seguridad, Fernando Telpuk.
Zorro Uno insistía en que el citado no tenía la capacidad suficiente para llevar adelante el proyecto de policía que él deseaba implementar y que, por supuesto, también era secreto. Y anunciaba además que el nombre de su reemplazante “sorprendería a todos por la importancia del elegido”.
Un año después Telpuk no solo continúa en su cargo sino que además será promovido al de Secretario de Seguridad que quedó vacante desde la estentórea renuncia de Julio Razona, impactado por el nivel de desconocimiento e irresponsabilidad con la que se encontró apenas asumido.
“Es un hombre que lo merece, ha sido brillante en su desempeño. Probablemente sea el mejor hombre de seguridad de la provincia de Buenos Aires”, afirmó el jefe comunal, sin que ningún periodista presente atinara a preguntarle el porqué de aquellas afirmaciones descalificadoras de entonces.
¿Es que lo había reputado de inservible sin siquiera analizar su desempeño?, ¿era tal el nivel de irresponsabilidad con la que Arroyo encaraba nada más y nada menos que el gobierno del Partido de General Pueyrredón?. ¿Eran tantos los parientes a acomodar que ello le insumía todo el tiempo previo a la asunción?.
Si bien no confirmó cómo quedará estructurada el área anticipó que Marcelo Lencina quedará a cargo de la Policía Local. Otro de los que estaba en la mira del chusco mandamás y que ahora, sin que se observen las costas de Normandía en el horizonte, será también ascendido en plena navegación.
Aunque algunos prefieran utilizar el término naufragio…