Un sector elevará el pedido formal el lunes al Concejo Deliberante y propondrá equiparar la bajada de bandera con tres boletos de colectivo. Otro avala la suba pero no comparte el criterio.
Afectados por la inflación, el incremento de costos, el GNC y la pérdida de rentabilidad, un grupo de taxistas de Mar del Plata solicitará el lunes formalmente un incremento de la tarifa y, a su vez, propondrá una serie de cambios en el cálculo y el servicio que brindan, como la equiparación de la bajada de bandera con tres boletos planos de colectivo y el cobro de un extra en el horario nocturno, medidas en las que no todos los sectores están de acuerdo.
La propuesta es impulsada por el Sindicato Marplatense de Peones de Taxis (Simpetax) y si bien la Sociedad de Conductores de Taxis avala la necesidad de actualizar la tarifa, no comparte el mismo criterio.
Desde Simpetax confirmaron a LA CAPITAL que, “con el aval de los titulares” se está llevando a cabo un estudio de costos que será elevado al Concejo Deliberante la próxima semana junto a la recomposición de la tarifa.
“Nos hemos reunido y tomado la decisión de solicitar un aumento de la tarifa”, expresó el secretario general, Miguel Rodríguez, quien enseguida aclaró: “No queremos matar a la gente, pero realmente no podemos seguir perdiendo”.
Actualmente, la bajada de bandera en el partido de General Pueyrredon cuesta $ 150, mientras que la ficha por cada 160 metros de recorrido vale $ 10.
En principio, lo que se solicitará esta vez no sería un porcentaje unificado de aumento. Uno de los planteos es que el valor de la bajada de bandera -como ocurría años atrás- se equipare al de tres boletos planos de colectivo.
Así, considerando el nuevo valor que tendrá el pasaje a partir del 5 de mayo ($ 74.38), iniciar el viaje en taxi equivaldría a unos $223. Al menos así dan las cuentas, aunque restan definiciones y persisten diferencias en torno a este criterio.
En cuanto a la ficha, “hay un desfasaje importante” y “lo ideal sería que también vuelva a ser como antes”, es decir, que diez fichas sean equivalentes a una bajada de bandera (y no 15 como ahora), pero los taxistas nucleados en Simpetax están dispuestos a que el debate en ese sentido se genere con los concejales en la comisión de Movilidad Urbana, donde la nota que elevarán el lunes debería tener su primer tratamiento legislativo.
Además de este incremento, desde Simpetax impulsan la idea de incorporar “un porcentaje extra” (que rondaría el 20%) durante el horario nocturno, posiblemente entre las 21 (o 22) y las 6.
Se trata, explicaron, de “una manera de incentivar” que más titulares y choferes salgan a la noche debido a la “baja rentabilidad” en este turno. “Hoy salís de 18 a 6 y en 12 horas como mucho haces $2500, no te rinde”, comentaron desde el sindicato, a sabiendas del problema de falta de unidades en circulación durante la noche en la ciudad.
La nota que ingresará al Concejo el lunes, además, propondrá dejar establecido que, debido a la inflación, la discusión en torno al valor de la tarifa no se abra una sino dos veces al año, o bien dejar asentada una cláusula gatillo para mitigar el consecuente incremento del combustible, los repuestos e insumos de limpieza y mantenimiento de los vehículos.
Otro de los cambios que propone este sector de taxistas es que la vida útil de los taxis en la calle vuelva a ser de 14 años, como ocurría anteriormente. En los últimos años se reglamentó que los taxis no deben tener más de 10 años de antigüedad. “Hay muchos que están al límite de los 10 años y el valor de los O km e incluso de algunos usados semi nuevos es inaccesible”, apuntó Rodríguez.
Por su parte, desde la Sociedad de Conductores de Taxis evidenciaron sustantivas diferencias en torno al planteo, sobre todo en las formas, ya que también coinciden en la necesidad de actualizar las tarifas.
“Hay una sumatoria de cosas” que llevan al sector a tener que solicitar una recomposición de la tarifa, pese a que “no era la idea”, reconoció su titular, Raúl Vicente.
Los índices inflacionarios, la situación de la macroeconomía, la suba del GNC -el combustible más demandado por los taxis- y el aumento de la canasta básica en el primer trimestre del año generaron “un combo” que ameritan que la próxima semana “las entidades que nuclean a taxistas y remiseros nos reunamos para evaluar cómo seguimos adelante” para compensar la “pérdida del 20% de rentabilidad” que el sector viene sufriendo.
“Nosotros sabemos que hoy el marplatense tiene mal humor con el taxista por las dificultades sobre todo para encontrar unidades a la noche. Lo sabemos y tenemos que recomponer esa relación. No era la idea tocar la tarifa pero la realidad nos marca que el primer cuatrimestre del año va a cerrar con una inflación por arriba del 20%”, reconoció Vicente.
No obstante, la Sociedad de Conductores se opone a la idea de equiparar a la bajada de bandera con tres boletos de colectivo, como así también que la bajada vuelva a ser equivalente a 10 fichas.
“Las entidades que históricamente presentamos las solicitudes de aumento de tarifa consideramos un logro muy importante que la bajada de bandera sea actualmente equivalente a 15 fichas”, subrayó Vicente y destacó que esta modificación permitió tener “una tarifa más equilibrada”, ya que “dio rentabilidad mínima al viaje corto”, entre otros beneficios.
Por otro lado, consideró que sería “un gravísimo error” cambiar el criterio de que la bajada de bandera sea equivalente al valor de tres boletos plano de colectivo, porque “el valor del boleto está directamente relacionado con los subsidios provenientes del Estado”, considerando a su vez que General Pueyrredon se ve “muy desfavorecida” en materia de subsidios.
“No se puede atar la tarifa de los taxis a las relaciones políticas de las autoridades de turno”, consignó Vicente y advirtió que los cambios de tarifa “deben estar únicamente relacionados con el índice inflacionario del momento en que se pide su modificación”.
Haciendo cuentas, el titular de la Sociedad de Conductores de Taxis señaló que, con la próxima actualización del boleto de colectivo, la bajada de bandera “sería equivalente a $ 223, es decir casi un 50% más cara que el valor actual”, lo que “significaría la pérdida de muchos clientes”.
A su entender, lo conveniente sería avanzar en un incremento del orden del 20% en la bajada de bandera, que de esta manera pasaría de $ 150 a $ 180.
En cuanto al plus nocturno, Raúl Vicente recordó que es un tema que hace años viene planteándose, sobre todo para el turno de 22 a 6, franja horaria en la que viajar en taxi costaría un 20% más, como ya ocurre en Capital Federal, Rosario y Córdoba, entre otras ciudades, con la intención de que sea “un incentivo y un reconocimiento” para los choferes de la noche que “sin dudas, en materia de seguridad está mucho más expuesto al peligro”.