El rector de la UNMdP logró la reelección y adelantó cuáles son los nuevos objetivos que se plantea para la casa de altos estudios. "No podemos reducir la educación a vernos las caras por una pantalla", asegura.
Por Matías Varela
Luego de lograr la reelección como rector de la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMdP), Alfredo Lazzeretti aseguró que sueña con una “educación de excelencia” para quienes forman parte de la casa de altos estudios.
“Quiero saludar a todos los que con su participación y su voto fortalecieron la democracia universitaria y nos dieron una fortaleza y un apoyo muy importante”, manifestó Lazzeretti tras conocer el escrutinio definitivo, en el que su lista “Transformación Universitaria” se impuso a “Unifutura”, que era encabezada por el vicerrector Daniel Antenucci. (ver aparte)
En este marco, el rector de la UNMdP se refirió al espacio opositor como “ocasionales adversarios”, con quienes discutió “un proyecto de universidad” y con los que tuvo “distintas miradas”, pero resaltó que a todos los une “el fuerte compromiso” con la casa de altos estudios.
Ahora, se viene “un nuevo tiempo, con nuevos protagonistas y prioridades”, adelantó.
– ¿Qué significa haber logrado esta reelección?
– El acompañamiento mayoritario de la comunidad siempre es muy gratificante, pero esto fue posible porque Transformación Universitaria tiene representantes en todos los claustros de la UNMdP y fue todo ese conjunto de gente la que hizo posible que obtengamos esta representación en la asamblea universitaria, la posibilidad de conducir seis unidades académicas sobre nueve y tengamos representación mayoritaria en el movimiento estudiantil. Eso nos llena de orgullo y alegría.
– ¿Qué cree que se valoró de su gestión para que vuelva a ser electo?
– Fue un período muy particular el que nos tocó atravesar. Enfrentamos las vicisitudes económicas del país y después tuvimos casi dos años de trabajo virtual por la pandemia, pero frente a esa adversidad la comunidad universitaria reaccionó con un esfuerzo enorme. Se virtualizaron más de 2.100 asignaturas y ningún estudiante perdió sus estudios. Además, llevamos adelante un plan de obras. Entonces, pese a lo complejo del tiempo, pudimos aprovecharlo para que no solo la universidad no se detenga, sino que además crezca.
– Se generaron muchas expectativas en torno a esta elección porque desde afuera parecía que se enfrentaba el socialismo y el radicalismo contra el peronismo / kirchnerismo. ¿Usted qué análisis hace de esto?
– Sería una simplificación hacer un análisis de ese tipo por la cantidad de gente que participa de las agrupaciones universitarias y no tienen pertenencias políticas definidas. Creo que las alianzas que se constituyeron para esta elección son mucho más amplias, más inclusivas y con muchos sectores independientes que las nutren. Transformación Universitaria se vio renovada con la incorporación de nuevos sectores, pero mirarlo desde esa perspectiva sería injusto para toda la gente que participa sin estar encuadrada en una organización política.
– Pensando en 2022, ¿Cómo se trabaja para que retorne la presencialidad completa a la UNMdP?
– Confiamos, esperamos y deseamos que en nuestro país no haya rebrotes del virus y que eso nos permita una presencialidad plena, pero va a ser una presencialidad complementada por la virtualidad. Ese equilibrio tendrá que ser motivo de discusión. Habrá que ver cómo vamos a combinar presencialidad y virtualidad con un solo objetivo: garantizar que más jóvenes puedan acceder a la educación superior.
– ¿Entonces la post pandemia será con una cursada híbrida en la UNMdP?
– Creo que vamos a una educación que combine presencialidad con virtualidad. Estamos preparándonos para avanzar en esa educación bimodal, pero habrá que ver cuál es la justa proporción, porque el sistema universitario público argentino es presencial y existe una vida universitaria que va más allá del dictado del tal o cual asignatura. No podemos reducir la educación a vernos las caras por una pantalla. Creo que eso tiene aspectos positivos, sobre todo relacionados con las distancias y con la movilidad, pero evidentemente nada va a suplantar la estrecha relación de los estudiantes entre sí y los estudiantes con sus docentes.
– Más allá de lo que tiene que ver con la presencialidad, ¿Qué otras metas se propone para la nueva gestión?
– Hemos elevado un programa, que se puede consultar en la plataforma de Transformación Universitaria, y ahí están los ejes para la próxima gestión. Nosotros creemos en la planificación participativa y vamos a convocar a los distintos claustros para planificar un futuro común de la UNMdP. Son múltiples aspectos que vamos a abarcar, desde la continuación del plan de obras, a la profundización de lo hecho en materia académica.
– Hablando del plan de obras, ¿En qué estado se encuentra y cómo va a beneficiar a los estudiantes?
– Se han hecho más de 50 obras, distribuidas en todas las unidades académicas. Se han construido más aulas y estamos llevando adelante obras en la Facultad de Ciencias Agrarias, además de haber adquirido un colectivo que se necesita para hacer trabajos de campo y llevar a los estudiantes. También mejoramos todos los servidores de la universidad para que tengan más potencia y esta semana empieza la ejecución de un enlace de fibra óptica. Estas son obras que nos dan más capacidad para llevar adelante las funciones esenciales de la universidad.
– ¿Tiene algún sueño que le gustaría que se cumpla en la UNMdP?
– Es difícil de contestar, pero el sueño es que nuestros estudiantes tengan una educación de excelencia y que podamos formar mejores hombres y mujeres, que sean profesionales conscientes de su responsabilidad social, porque somos parte de una sociedad que nos financia y tenemos que tener siempre presentes que hay que trabajar y dar una mano más allá de nuestro ejercicio profesional.