El escrutinio tuvo, según las denuncias del Partido Democrático, extraños y sorprendentes cambios. Alberto Becchi aparecía entre los candidatos a obtener una banca.
¿De no haber mediado serias irregularidades hoy el marplatense Alberto Becchi sería diputado de la República de Italia? Se lo pregunta el mismo Becchi y también la organización política a la que pertenece y a la que representó en las elecciones del pasado 4 de marzo: el Partido Democrático (PD).
El escrutinio, realizado a partir de ese domingo 4 y continuado con llamativas interrupciones durante los dos días subsiguientes, tuvo según las denuncias del PD extraños y sorprendentes cambios.
De acuerdo a la información suministrada por varios portales italianos, y cuando restaba escrutar el 20 por ciento de los votos, Becchi aparecía el lunes 5 entre los cuatro candidatos que habrían de obtener una de las sendas bancas de diputado que estaban en juego por América del Sur.
Más aún, conforme a las mismas fuentes de información, en esos momentos Becchi superaba por 1.500 votos a Fausto Longo, otro candidato del PD, pero tras la interrupción y a poco de reiniciarse el conteo, Becchi pasó a estar 2.000 votos abajo de Longo, quien al fin sería uno de los cuatro electos.
Los cuatro nuevos diputados por América del Sur son dos argentinos Mario Borghese (del partido MAIE), y Eugenio San Gregorio (del partido USEI) y dos brasileños, el ya citado Longo (Partido Democrático) y Luis Roberto Di San Martino (Forza Italia).
Las dos bancas de senadores por la misma sección de América Meridional fueron para Ricardo Merlo (MAIE) y Adriano Cario (USEI).
Presuntas maniobras
¿Dónde, quiénes y cómo consumaron las presuntas maniobras? Especialmente sobre esta pregunta giran las sospechas en el PD, dentro del cual se desestima la posibilidad de que se hayan cometido dentro del mismo partido.
En el seno del PD, y en el afán de convertir sospechas en certezas, ha cobrado fuerza la versión de que el supuesto manejo espúreo se dirigió en particular a alterar el desarrollo de la elección para senadores y que esto provocó el arrastre que terminó afectando a Becchi.
Los compañeros de campaña se preguntan cómo es posible que este candidato marplatense haya obtenido unas 6.200 preferencias en la Argentina, pero tan sólo 150 votos en Brasil, y unos escasos 700 en el resto de nuestro país.
Ante la Corte D’Appello de Roma (Justicia Electoral en Italia), los apoderados del PD han presentado ya varias denuncias. En una de ellas –por citarla a manera de ejemplo– se menciona el caso de varias mesas electorales de la circunscripción electoral de Buenos Aires en las que el partido ganador aparece obteniendo un mismo y sorprendente apoyo electoral del 90 por ciento, que rompe “escandalosamente” con el promedio de las mesas en toda la circunscripción electoral y en particular con el de ese espacio electoral, en las cuáles la fuerza con más apoyo raramente superaba un porcentual tres o cuatro veces menor a ese 90 por ciento.
Un sistema cuestionado
No es posible precisar en qué momento la Justicia electoral italiana se pronunciará sobre el caso. Sí es factible imaginar el impacto que pudiera provocar una decisión confirmando las graves denuncias: podría determinar hasta la anulación de las elecciones en la sección electoral.
Consultado sobre la situación, Becchi expresó su deseo de ser prudente y esperar las resoluciones de la Corte d’Appello, pero también el compromiso de seguir trabajando para garantizar la transparencia del sistema de elección de legisladores italianos en el exterior; sistema, admite, que ya fue cuestionado en anteriores instancias electorales por irregularidades como las que ahora parecen evidenciarse nuevamente.
Y finalmente, recalcó: “Quiero expresar mi agradecimiento a todos los que fueron a votar, sea por mi partido, el PD o por cualquier de las otras listas, pero en nombre de todos quiero decir que la gente quiere participar, quiere votar, pero no quiere que le roben o que sus votos sean cambiados o no lleguen a destino”.