La cooperativa La Nueva Esperanza mantiene la protesta frente a la sede de Desarrollo Social.
“La comida es innegociable”. Con esa frase, uno de los referentes de la cooperativa La Nueva Esperanza, Nelio Sánchez, confirmó la continuidad del acampe frente a la sede de la Secretaría de Desarrollo Social.
Los cooperativistas reclaman principalmente un incremento en la cantidad de alimentos que reciben por parte del municipio y están desde el martes en la calle Teodoro Bronzini entre Balcarce y 11 de septiembre a la espera de una solución.
“Lo que nosotros pedimos es que la bolsa de comida pase de 5 alimentos, a 14 que es lo que habíamos pactado y no se cumplió”, aseguró Sánchez y denunció que esa cantidad (14) es la que habían acordado y la que envía el gobierno de la provincia de Buenos Aires. “No sabemos que pasa en el medio porque nosotros no la recibimos”, contó.
El cooperativista aseguró que continuarán en el acampe “hasta que nos den una respuesta positiva a nuestros reclamos”. “Hoy no nos atendió nadie, ni siquiera nos llamaron, así que vamos a seguir acá”, señaló.
Los manifestantes se reunieron el miércoles con la secretaria de Desarrollo Social, Patricia Leniz, pero no llegaron a un acuerdo.
Tras ese encuentro, el sector de los manifestantes representado por el Movimiento Barrial de la CTA, llegó a un acuerdo y se retiró del acampe que había comenzado el martes.
Además del incremento en la entrega de alimentos, los cooperativistas reclaman materiales para reparar las casas dañadas por los temporales.
Por otra parte, los cooperativistas consiguieron una donación de 20 mil kilos de papa que fueron entregados en el Barrio Belisario Roldán. “Para que vean que no estamos con los brazos cruzados sino que tratamos de ayudar a los que tienen necesidades”, dijo Sánchez.