Las declaraciones indagatorias a ex ministros y ex funcionarios españoles tendrían lugar entre el 4 y el 22 de abril.
MADRID, España.- La jueza argentina María Servini de Cubría, que instruye la causa que investiga los crímenes del franquismo y de la Guerra Civil, solicitó tomar declaración a 19 ex altos cargos y miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado español durante la dictadura franquista.
Según informó la Coordinadora Estatal de Apoyo a la Querella Argentina (Ceaqua) en un comunicado, los ex ministros Rodolfo Martín Villa, José Utrera Molina (suegro de Alberto Ruiz Gallardón), Antonio Carro Martínez, Alfonso Osorio García, José María Sánchez-Ventura y Fernando Suárez están entre los 19 imputados.
Además de los ex ministros franquistas, se encuentran entre los diecinueve imputados el abogado que redactó la sentencia de Puig Antich, Carlos Rey, y otros importantes cargos como el de un antiguo fiscal, un ex juez y ex guardia civil, y antiguos policías, entre otros.
En base a la comisión rogatoria que fue entregada a las autoridades españolas el pasado 9 de marzo, las declaraciones indagatorias tendrían lugar entre el 4 y el 22 de abril.
La aprobación de esta comisión por España implicaría la citación en la Audiencia Nacional de los diecinueve ex altos cargos, que prestarían declaración ante un juez del Estado español y ante la jueza Servini de Cubría.
No obstante, es posible que se cite a los imputados en los juzgados territoriales en función del lugar de su domicilio.
Dicha medida se enmarca dentro de la investigación que realiza la Justicia de Argentina para dilucidar si los crímenes cometidos durante la dictadura franquista y la Guerra Civil se enmarcan en crímenes de “lesa humanidad”.
La jueza Servini instruye esta investigación por el principio de la justicia universal a raíz de que en 2010 más de 100 asociaciones presentaran la conocida como “querella argentina”.
Desde entonces, Servini tomó declaración en Argentina a varios de los denunciantes -tanto víctimas directas como a hijos- y también se desplazó a España para facilitar que comparecieran algunos de ellos.