Fueron conducidos ante el fiscal Leandro Favaro pero decidieron mantener el silencio. Los tres hombres y la mujer continuarán presos. Aún no fue localizado el líder de la banda.
Los cuatro aprehendidos en la tarde del viernes por integrar una banda dedicada a la venta de drogas a clientes vip de esta ciudad se negaron a declarar frente al fiscal Leandro Favaro.
Se trata de una mujer y tres hombres, entre ellos un ex policía, que fueron asistidos por sus defensores y prefirieron mantener el silencio a la espera del avance de la causa.
Debido a que todos los aprehendidos llegaron a la audiencia de hoy con orden de detención librada por la Justicia de Garantías, la fiscalía solo tiene por delante solicitar la prisión preventiva por el delito de tenencia agravada de estupefacientes o con fines de comercialización.
En tanto, nada se supo aún del paradero de Gustavo “El Pelado” Arce, a quien se le considera el líder de esta organización y que durante los allanamientos escapó con su camioneta tras chocar un automóvil de Prefectura Naval.
El denominado Operativo Elmer permitió a los fiscales Leandro Favaro, de la unidad temática de Estupefacientes, y Javier Pettigiani, del CATI, desbaratar la banda que tenía por característica proveer de drogas a consumidores de clase media alta. Sus repartos, siempre coordinados por Arce, se realizaban en los alrededores de Güemes, Playa Grande, Loma de Stella Maris, Los Troncos y Chauvin.
Para facilitar el traslado de la cocaína y no tenerla en su casa, los investigadores determinaron que Arce la ocultaba en el locker de un gimnasio de la zona de Güemes.
Estructura
La estructura de la banda era verticalista, con Arce como líder referente y proveedor de drogas, según consta en la causa 17256/16, de los demás aprehendidos salvo la mujer, que es su novia y encargada de temas administrativos.
El modo de operar de esta organización era sencillo y el que, hoy por hoy, es el más extendido en Mar del Plata. Coordinaban las ventas por teléfono y luego hacían las entregas en puntos acordados de la vía pública. Surgen de las escuchas esquinas como Colón y la Costa, Colón y Catamarca, Colóny Mendoza, la puerta del hospital Materno Infantil, Peña y España, etcétera.
Entre los detenidos hay tres hombres que vendían para Arce, en particular el más joven de 19 años a quien el 2 de octubre último, al realizar una entrega, lo asaltaron de manera brutal. En el mundo del narcotráfico se conoce la maniobra como “mejicaneada” y consiste, ni más ni menos, en el robo de la droga. El joven fue víctima de ese hecho en Santiago del Estero y Falucho, donde además de ser despojado de la cocaína sufrió un puntazo en la frente y otro en una mano.
Los otros dos individuos también intermediaban entre Arce y los consumidores, uno de ellos un ex policía y actual empleado del Ministerio de Salud que tenía como grupo de clientes personas relacionadas con la práctica de la medicina. También se cree que este individuo era quien contactaba a policías y obtenía datos sobre las investigaciones.
Otra de las singularidades de la banda, especialmente de Arce, era los malos modos en las comunicaciones telefónicas. Esto sucedía ante dos circunstancias: cuando llamaban fuera de horario -porque solo atendían hasta las 21- y cuando mencionaban palabras comprometedoras.
El 1 de octubre Arce recibe una llamada de una mujer de nombre Paula y le dice secamente “Ya es tarde”. La mujer le pregunta si “no es hasta las diez” y Arce le corta. Luego cuando retoma la comunicación, el líder de la banda le dice “¿qué diez? Boluda, a las nueve, que diez?” y tras preguntarle donde está la cita para la venta: “bueno, andá a Catamarca y Colón”.
Esa misma noche, a las 0.45 Arce responde a un llamado por mensaje de texto: “Jodete hace las cosas temprano o andá a luro y perú”.
En otra ocasión, un comprador le dice por teléfono “Te puedo ver?… te tengo que ver” a lo que Arce le dice, levantando la voz “me venís con una gilada te arranco la cabeza, así nomás te lo digo”. El interlocutor le dice “no, no. Tengo plata…” y Arce le dice que vaya para Catamarca y Paso.
Para cuidarse de no evidenciar la operación se usaban palabras claves como venta de entradas o préstamos de dinero, en alusión a la venta de cocaína.
Durante los allanamientos de ayer realizados por personal de Prefectura Naval se secuestraron cerca de 450.000 pesos en la casa de la novia de Arce, además de cocaína, teléfonos celulares, plantas de marihuana y computadoras.
Según trascendió hoy, en la próxima semana podrían producirse novedades respecto a las filtraciones desde las fuerzas de seguridad y que ponían en alerta a los miembros de la banda.