Los imputados por comercializar pastillas de éxtasis en fiestas electrónicas presentaron en la causa al mismo abogado, Lucas Tornini, quien solicitó una audiencia para el jueves en la que se estima que al menos uno de los dos podría aceptar la indagatoria del fiscal Leandro Favaro. Permanecen alojados en la Alcaidía Penitenciaria Nº 44 de Batán.
El DJ y el cambista detenidos el pasado viernes en el marco de un operativo antidrogas se negaron a declarar ante la Justicia y permanecerán alojados en la Alcaidía Penitenciaria Nº 44 de Batán.
Los hombres, apodados “Betto” y “Tuti”, presentaron en la causa al mismo abogado particular, Lucas Tornini, quien solicitó una audiencia para el jueves. Según pudo saber LA CAPITAL de una fuente con acceso al expediente, el defensor pidió el plazo de tres días hábiles para analizar las pruebas reunidas en contra de sus clientes hasta el momento.
Una vez que se produzca esa diligencia, se espera que al menos uno de los dos imputados declare. De acuerdo a la información obtenida, la situación procesal del DJ pareciera ser más compleja que la de su presunto cómplice: es que, en su poder, los policías que allanaron su casa y lo detuvieron hallaron más de 250 pastillas de éxtasis. En cambio, el otro aprehendido sólo poseía ocho, aunque los mensajes de Whatsapp y los llamados telefónicos que examinan los investigadores lo incriminarían de todas formas.
El razonamiento que esbozó el informante consultado por este medio indicaría que, de existir la posibilidad de que uno de los dos declare el jueves, éste sería “Tuti”, pero eso recién podrá confirmarse más cerca de ese día.
Vale recordar que el operativo en el que fueron detenidos los dos hombres se registró el viernes a la madrugada, tras un importante operativo desplegado por orden del fiscal de Estupefacientes, Leandro Favaro, quien seguía la pista de ambos sospechosos en busca de determinar si habían montado un sistema de venta de pastillas de éxtasis y otras drogas sintéticas en fiestas de música electrónica.
Es que tanto “Betto”, en su rol de DJ, como “Tuti” -relacionista público de distintos boliches-, se hallaban fuertemente vinculados con el ambiente de la nocturnidad local. En ese marco, ambos fueron investigados y, debido a sospechas que sobre ellos se montaron, fueron intervenidos sus teléfonos.
Las detenciones fueron, entonces, resultado de varios meses de averiguaciones y recolección de datos, además medio millar de horas de escuchas telefónicas analizadas en las que se pudo conocer la modalidad empleada por los dos presuntos “dealers”.
Polvo de MMDA para la elaboración de pastillas de éxtasis, piedras de cristal fraccionadas en tubos plásticos y píldoras de éxtasis fue parte del secuestro del personal policial que estuvo al frente del procedimiento. Asimismo, se secuestraron teléfonos celulares y automóviles que utilizaban ambos imputados para desarrollar sus actividades que tenían como clientes a sectores elevados de la sociedad: la mayoría, adultos que suelen concurrir a fiestas electrónicas en boliches o playas.
Los allanamientos tuvieron lugar en las casas de ambos. En el caso del DJ, fue sorprendido por los uniformados que derribaron la puerta de su vivienda, cuando se encontraba con su pareja. Por su parte, “Tuti” llegó a su departamento cerca de las 6 de la mañana procedente de uno de los balnearios del sur de la ciudad, al que había concurrido para presenciar una fiesta de música electrónica, cuando la policía ya se encontraba allí: tenía 240 mil pesos en su mochila. En el lugar estaba su novia, que se había quedado durmiendo.
Conforme trascendió luego de finalizado el operativo, en algunas llamadas telefónicas interceptadas por la Justicia se pudo establecer que “Betto” se encargaba de repartir la droga en lugares previamente acordados o, incluso, hacía las entrega en el mismo boliche en el que “pasaba” música. Respecto su supuesto cómplice, tenía una labor específica de ingresar las ganancias de las ventas en el sistema financiero ya que su principal labor, o por lo menos la que desarrollaba a la vista, era la venta de moneda extranjera. También desarrollaba operaciones con criptomonedas y en ocasiones quienes les compraban drogas requerían sus servicio para el cambio de dólares, además de haber ganado distintos campeonatos de póker en el pasado.