Tras el éxito comercial, la película presentada por nuestro país para los premios Goya y Oscar, tuvo un destacado paso por el Festival Internacional de Cine de Mar del Plata.
La película que narra el histórico juicio a las juntas militares, durante la recién recuperada democracia en Argentina, fue central durante los primeros días del Festival Internacional de Cine de Mar del Plata que se está desarrollando desde el 3 de noviembre y continúa hasta el domingo 13.
El filme que ya se perfiló como el más visto del año en nuestro país, se proyectó en el ciclo gratuito y al aire libre de Villa Victoria, se exhibió durante la inauguración del Espacio Incaa de Mar del Plata y, también, en el marco del reconocimiento a la trayectoria de Ricardo Darín, su protagonista y productor.
La película, además de haber sido la elegida de Argentina para los premios Goya y Oscar, fue definida por autoridades del Incaa como un ejemplo de las producciones que demuestran la capacidad de los y las argentinas de hacer cine, como resultado de años de capacitación, inversión y talento, tanto en las actuaciones, como en los rubros técnicos: sonido, maquillaje, vestuario, reconstrucción de época, etc.
“Es una película sobre la cual vengo trabajando hace muchos años”, indicó.
El director del filme, Santiago Mitre, se encuentra en Mar del Plata acompañando a la película que, además, continúa proyectándose en cine comercial y ya se puede ver en la plataforma Amazon Prime Video.
“Es una película sobre la cual vengo trabajando hace muchos años y que logramos filmar en un contexto muy difícil, en medio de la pandemia, en la primera etapa de la cuarentena” indicó el director, quien se manifestó “muy contento, aunque sea una obviedad decirlo”, por las repercusiones que está teniendo el trabajo.
“Retrató un hecho importantísimo para el inicio de la democracia y para la historia argentina, trabaja sobre una herida que creo que tiene toda la sociedad. Fue muy importante para mí poder hacerla y estoy muy contento con la recepción que tuvo” definió.
El cineasta, autor de otras importantes películas como Carancho, La Patota, La cordillera, por mencionar algunos ejemplos, analizó que “funcionó muy bien en los cines y ahora hace tres semanas ya está en Amazon y sigue en cartel y sigue yendo gente al cine, así que me alegra confirmar que las dos cosas pueden coexistir y que no rivalizan. La gente que quiere ir al cine y le gusta ir al cine, va a verla y la gente quiere ver películas en su casa, mira la película en su casa. Está bueno entender eso, son formas complementarias de exhibición y que el hecho de ir al cine y de compartir una experiencia viendo una película sigue siendo algo muy importante para muchas personas. Son dos experiencias distintas, la experiencia colectiva de ir al cine es algo incomparable, pero no creo que haya, como leí, una rivalidad tan marcada”.
Vale señalar que el éxito de “Argentina, 1985” se dio a pesar de que cuatro importantes distribuidoras cinematográficas Hoyts, Cinépolis, Showcase y Cinemark, no acordaron la proyección en las salas que gestionan.
Contar la historia
“Hacía falta recordar lo importante que fue recuperar la democracia, lo importante que es la justicia, lo doloroso que fue el proceso de la dictadura” respondió Santiago Mitre sobre la motivación para meterse en este tema de la historia reciente de nuestro país.
“Fue una película muy difícil de armar, un proceso de investigación muy largo, que se desarrolló desde 2017. Fueron cerca de tres años en los que estuvimos investigando, hablando con muchísima gente que participó directamente en el juicio, en todos los lugares, del gobierno del momento gente que dio testimonio, periodistas que cubrieron, fue una investigación muy intensa, pues sabíamos que era un tema muy importante muy sensible y que había que tratarlo con muchísimo respeto y que era importante volver a recordar ese juicio tan importante para el inicio de la democracia argentina y que ahora tiene un valor simbólico tan grande”.
El director indicó que para él fue “un gran aprendizaje” dicho proceso. “Yo conocía algo del juicio, pero no todos los detalles. Hay algo que es increíble, el juicio está completamente filmado. En el momento no se transmitió en vivo para proteger a las víctimas, porque en el 85 todavía la mayoría de las personas que los habían secuestrado y torturado estaban libres. Tuve acceso a todos los videos de ese juicio, así que fue doloroso meterme ahí, pero también muy interesante. Ahora estamos articulando con distintas organizaciones que tienen el material como para intentar que ese registro original del juicio pueda estar al alcance de la mayoría de la gente”.
Sobre el contexto actual social y la repercusión de presentar el tema a una generación que no vivió ni la dictadura, ni el proceso judicial, Mitre reflexionó: “Pasó mucho tiempo, para mucha gente, es un tema que continúa estando muy presente, pero hay mucha gente que por razones lógicas, por el paso del tiempo, porque nacieron después del juicio y mucho después de la dictadura, no tienen conciencia del peso de esos hechos. Hacía falta, tal vez, recordar lo que significó esa dictadura, lo doloroso que fue para este país, lo importante que fue recuperar la democracia y lo importante que es la justicia, para consolidar esa democracia y para intentar traer justicia y algo de paz y sanar un poco las heridas que dejó esa situación”.