El vehículo está estacionado en Hipólito Yrigoyen casi Balcarce. Al tercer día, los vecinos rompieron el vidrio para suminstrarle agua y alimento, y ahora el animal quedó a cuidado de personal policial.
Los vecinos de La Perla comenzaron a inquietarse por la presencia de un perro encerrado en un auto abandonado y la total ausencia de sus dueños.
Los días pasaban, la preocupación aumentaba y al tercer día, tras comentar la indignación que sentían, se pusieron de acuerdo y decidieron romper el vidrio del Gol blanco para suministrarle agua y alimento. “Lo habían dejado atado al apoya cabezas del asiento del acompañante, sin nada para comer o tomar”, contó Lautaro.
Según el vecino, si bien llamaron a Zoonosis y al Colegio de Veterinarios ninguno respondió ni se acercó a la ubicación del vehículo, en Hipólito Yrigoyen casi Balcarce. Lugar que el perro tampoco quería abandonar con la esperanza del regreso de sus dueños.
Sin embargo, el domingo por la madrugada, al cuarto día de encierro, el estado en el que se encontraba el can los alertó y se comunicaron con la Policía, quien lo retiró del rodado dejándolo al cuidado de una de los efectivos.
Además, se secuestró un equipo de música, papeles y un microondas que se encontraba en el interior del vehículo. Aún no hay noticias de los dueños del animal.