En Mar del Plata hubo dos censistas a los que les robaron sus teléfonos celulares.
Dos censistas fueron asaltados en barrios periféricos de Mar del Plata mientras cumplían con su labor casa por casa y los ladrones pudieron escapar con un teléfono celular como botín.
En ambos casos los trabajadores reportaron el problema ante los coordinadores de zona, quienes a su vez dieron aviso a las autoridades policiales de jurisdicción.
El balance general de los encargados de seguridad, tanto de la policía como de las autoridades municipales del área, es “normal”, ya que si bien se sabía que en los anillos exteriores del ejido urbano podía haber problemas, estos no fueron ni numerosos ni graves.
Desde el COM (Centro de Operaciones y Monitoreo) se señaló que tuvieron que intervenir en dos ocasiones por llamadas de emergencias de censistas. Una de ellas fue cuando una mujer avisó que estaba siendo perseguida en Gardel y Bouchard, pero finalmente pudo librarse de esa situación.
En otro de los casos, ocurrido en Salta y 25 de Mayo, el COM asistió a una censista, tras articular con la policía, por la agresividad de un hombre que le reclamaba más celeridad.
Insólito
Un policía bonaerense fue detenido hoy junto a una joven acusados de haber cometido tres robos a personas que estaban censando, en el partido de Quilmes.
Los hechos ocurrieron durante esta mañana en las zonas de Berazategui y Quilmes, en la zona sur del conurbano.
Fuentes policiales y judiciales informaron que todo comenzó cuando se irradió un alerta a través del 911 por un raid cometido por delincuentes que se desplazaban en un Volkswagen Voyage gris oscuro.
Los asaltantes le sustrajeron pertenencias a tres censistas y escaparon a toda velocidad, tras lo cual se inició un operativo hasta que personal de la seccional 2da. de Quilmes detuvo la marcha del vehículo involucrado en Belgrano, entre Misiones y Formosa, de la localidad de Don Bosco.
Según las fuentes, el conductor resultó ser un efectivo de 41 años, quien desempeñaba sus tareas en la comisaría 4ta. de Sarandí, partido de Avellaneda.
En su poder, sus compañeros le secuestraron una pistola Bersa Thunder Pro calibre 9 milímetros provista por el Ministerio de Seguridad bonaerense con nueve municiones intactas.
El sospechoso estaba acompañado de una joven de 25 años que tenía dos celulares que no eran suyos.
Además, dentro del rodado encontraron una réplica de arma de fuego y otras pertenencias que luego fueron reconocidas por dos víctimas de los asaltos, una mujer de 45 años y otra de 39.
El policía y la joven quedaron a disposición de la fiscal Karina Gallo, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 4 del Departamento Judicial Quilmes, en una causa caratulada como “robo agravado por el uso de arma de fuego”.