El jefe de la Policía Bonaerense, comisario general Daniel García, estuvo en Mar del Plata y comunicó la remoción de su puesto a Lucio Pintos, quien será redestinado. El ministro Sergio Berni oficializará este martes la medida.
Luego de una jornada de reuniones y tratativas, el jefe de la Policía Bonaerense, comisario general Daniel Alberto García, comunicó este lunes distintos cambios en la cúpula de la fuerza en Mar del Plata: la decisión incluyó remover de su puesto al titular de la Jefatura Departamental, el comisario mayor Lucio Pintos.
La medida será oficializada este martes por el ministro de Seguridad provincial, Sergio Berni, quien además podría anunciar modificaciones en la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) y la Dirección General del Tráfico de Drogas Ilícitas.
De esta forma, los comisarios José Segovia y Diego Díaz Aguirre, quienes estaban al frente de las respectivas dependencias citadas, serían reubicados en otros destinos, al igual que Pintos.
Si bien no se conocieron los motivos oficiales de la medida, fuentes consultadas por LA CAPITAL relacionaron el anuncio con la reunión que la semana pasada el intendente Guillermo Montenegro había mantenido con el ministro Berni. Inclusive, en horas del mediodía circuló fuertemente el rumor de que el funcionario de Axel Kicillof iba a viajar a Mar del Plata al atardecer para evaluar personalmente la situación y luego oficializar los cambios.
Según pudo saber este medio, en los próximos días las tres dependencias policiales serán comandadas por sendos remplazos y, una vez que se formalicen los nombramientos de los nuevos jefes, se darán a conocer a la ciudadanía.
Con respecto a Pintos y Díaz Aguirre, todavía no fueron informados sobre sus nuevos destinos, mientras que trascendió que Segovia, con el apoyo de gran parte del Poder Judicial, podría permanecer en Mar del Plata en un puesto distinto al que ocupó en los últimos años.
En cuanto a las comisarías y las áreas que dependían de la DDI y la Dirección General del Tráfico de Drogas Ilícitas, no se descartan más cambios en los próximos días. Es que, como suele ocurrir en estos casos, una vez en funciones los nuevos jefes -cuyas identidades aún no trascendieron- evaluarán el escenario local en materia de inseguridad y el trabajo que realizan sus subalternos, para luego definir sus respectivos equipos de trabajo en cada una de las seccionales.