El próximo sábado se realizará el acto de apertura. En principio, habrá 40 empleados. El lugar había cerrado en 2001 con un fuerte conflicto y luego funcionó un tiempo como cooperativa.
El frigorífico San Telmo, ex Sadowa, reabrirá sus puertas en Mar del Plata y empezará a funcionar después de muchos años y conflictos.
El acto de inauguración se realizará este sábado a las 11,30 en la planta ubicada en Constitución al 10.300 y estará presente el presidente Alberto Fernández, según confirmaron fuentes de este medio.
En principio, el frigorífico empleará a 40 personas y se dedicará a la faena para el consumo interno pero la expectativa es reconquistar un mercado de 20 países y llegar a generar 300 puestos de trabajo.
El tradicional frigorífico San Telmo – Sadowa, de Mar del Plata, que se dedicaba únicamente a las exportación de carnes, cerró de forma permanente el 15 de marzo del 2001, a raíz de los prejuicios que le ocasionó la prohibición de ingreso de productos argentinos a los mercados internacionales, dejando en la calle a 300 trabajadores.
Fue debido a la falta de respuesta a los planteos y exigencias por parte del mercado internacional, ante los casos de aftosa detectados.
Sadowa S.A era una empresa exportadora que en el año 1997 logró recuperar al frigorífico San Telmo, luego de más de cinco años de crisis. En los últimos tiempos había obtenido nuevos mercados internacionales gracias a la desaparición de la fiebre aftosa, en ese entonces.
En su momento, este establecimiento faenaba 7.000 animales por mes y factura anualmente 45 millones de dólares, de los cuáles el 70% de esa suma provenían de las ventas al exterior en su mayor parte a Chile Brasil, Estados Unidos, Canadá y la Unión Europea., que justamente fueron los mercados que decidieron dar por finalizada la importación debido a la aftosa.
El 1 de julio del 2010 el frigorífico presentó la quiebra, lo que produjo que al poco tiempo fuese comprado por la empresa SIPER SA dentro del remate judicial que en aquel momento estaba valuado en 41 millones de pesos. Trabajadores pasaron cien días adentro de la planta hasta que fueron desalojados y armaron una carpa afuera.
En ese contexto, empezaron a diseñar una cooperativa llamada FRIGORE y de esta manera impulsaron la expropiación que finalmente fue aprobada en la Legislatura Bonaerense. y terminó por efectivizarse en septiembre de 2011. Casi un año más tarde, llegaría el momento de la primera faena con 45 animales.
Esa ley de expropiación contempló que diez de las hectáreas las utilizaría la cooperativa y las otras 43 quedarían en manos de Estado provincial para el desarrollo de planeamiento urbano y viviendas sociales, proyecto que tampoco se concretó.
Con el proyecto de ley caído, el entonces gobernador de la provincia Daniel Scioli le entregó finalmente el frigorífico a SIPER en julio de 2016.
En 2017, el frigorífico pasó a manos de un nuevo grupo empresario liderado por Eugenio Sangregorio. Llevó un largo tiempo de inversión y arreglos para acondicionar el lugar de trabajo para poder reabrir. La pandemia del coronavirus demoró el proyecto y finalmente a partir de la próxima semana abrirá sus puertas.