Marplatense, canta desde chico y recorre la música de manera intuitiva. Prepara un disco que reunirá canciones de diversos géneros. Es autor del EP "Me falta un león".
Viajero, nómade por elección, Bambino partió del barrio Parque Camet, en Mar del Plata, para recorrer los caminos de la música. Podría decirse que los amplios caminos de su música: el rap, el folklore y la canción de autor no le son ajenos, más bien constituyen el ADN de este artista de 28 años.
“Siento que si defino mi música la limito. No tengo una definición precisa de lo que hago, creo que nunca la tendré”, dijo en una entrevista con LA CAPITAL.
Fue la fuerza del impulso viajero la que lo llevó a alejarse del estudio de la música de manera formal. Aunque las clases de guitarra que tomó lo habilitaron para bucear en el mundo de los sonidos con gran sensibilidad. Así empezó a estructurar su espíritu artístico e intuitivo.
“Canto desde que tengo uso de razón”, aseguró y reconoció: “No pude sentarme correctamente a estudiar el instrumento como se debe”. Proyecta hacerlo: ese es parte del nuevo desafío.
Escuchá la canción Sócrates acá:
“El rap lo conocí a los 11 años, en la ciudad de Puerto Madryn. Tenía amigos que improvisaban y componían canciones y otros que bailaban breakdance y poco a poco me fui sumergiendo en ello -recordó-. El folklore lo mamé de chiquito, mi papá escuchaba mucho y era locutor de radio, interpretaba poemas que te ponían la piel de gallo y también pasaba música. El camino de la poesía y la composición lo aprendí de mi hermana mayor, Mariel. Recuerdo estar sentado en la mesa después de comer y le relataba sus escritos a mi mamá, me encantaba escucharla”.
Con letras de su autoría, Bambino tiene un flamente EP de cinco canciones que tituló “Me falta un león”, dentro del género urbano. Y pule su próximo disco, que integrará todos los géneros musicales que lo interpelan. “Ese es nuestro mayor desafío”, dijo y comparte ese nuevo escalón con su productor.
-Una de tus canciones es “Sócrates”, que habla de las personas desfavorecidas, de la violencia, ¿cómo nació?
-El tema de Socrates nació en la casa de un amigo del barrio, tenía un programa que se llama FL Studio y hacíamos instrumentales. Empecé a componer ahí y al tardar tanto en terminar mis canciones van tomando diferentes formas, porque yo también me transformo, pero la inspiración real de Sócrates fue por un amigo, El Gaita, que en un accidente de moto perdió una pierna, lo acompañé en un proceso muy difícil para él, imagínense acostarse con dos piernas y amanecer con una. Las miradas de las personas, los comentarios despectivos, él mismo odiando su cuerpo, su imagen. Es culpa de la sociedad que nos enviste, que nos amordaza el corazón, para que nos sintamos insuficientes, insatisfechos, inseguros. Sócrates cuenta las diabluras y las consecuencias de vivir en una sociedad así, llena de miedos.