El fiscal de La Plata, Fernando Cartasegna, aseguró que, aunque se lo ofrecieron, "jamás" se iría del país y que no renunciará a investigar ninguna de las causas.
El fiscal Fernando Cartasegna, quien fue golpeado y amenazado de ser “el próximo Nisman” el fin de semana pasado, aseguró que no sabe por cuál de las causas que investiga fue la amenaza y que “jamás” se iría del país.
En un primer momento Cartasegna había indicado que la golpiza que sufrió había sido por la causa que investiga a policías acusados de corrupción pero este miércoles, en diálogo radial con María Delia en LU6, manifestó que no sabe “de qué caso se trata” y que es “demasiado” para ser por la de los policías ya que tiene causas “mucho más difíciles”.
“Tengo causas de pedofilia que implican millones de dólares. Tengo causas de delitos con hechos de trata de personas que han desbaratado redes antes de que empiecen con los negocios en donde se había invertido mucho dinero”, indicó.
El fiscal aseguró que las personas que lo atacaron “sabían todo” de su vida. “Yo no tengo una rutina. No es muy fácil encontrarme quieto y solo. Me habían seguido, yo estaba en un lugar que no tenia que estar, en un horario que no tenía que estar”.
Cartasegna fue a declarar por el hecho este martes y aseguró que “por primera vez” se puso en el rol de víctima frente a una colega, la doctora Medina. “Sacó dos horas de charla que me hizo recordar un montón de cosas y relacionar el monólogo de ellos y como ya lo venían relacionando con este tema de Nisman desde que me empezaron a hablar”.
“Me decían que tenía una causa en la que tenia que hacer lo que ellos quisieran, que me iban a dar instrucciones, que me bajara, que si no me suicidaba me suicidaban, que me metiera en el baño y yo en ese momento no entendí y ahí me pidió que cerrara los ojos y me dijo ‘ahora imaginate a tus hijos marchando y yo nunca lo relacioné con Nisman'”, contó el fiscal y aseguró que recién relacionó todo cuando fue a declarar.
A causa de lo sucedido este fin de semana, Cartasegna dijo que hace cuatro días que no ve a su familia porque no los quiere poner en riesgo. “Tengo que estar reservándolos y tampoco incomodarlos”.
Por su parte aseguró que le ofrecieron irse del país un colega de España y otro de Miami pero que “jamás se le ocurriría”. “Yo soy fiscal de Provincia, de una ciudad, no tengo ese perfil de salir del país, de protegerme, yo quiero volver a la vida y seguir investigando y seguir en lo que a mi me apasiona” manifestó.
Además el fiscal recordó que hace siete años sufrió un choque en su auto por la parte delantera y trasera del vehículo y le intentaron sacar una notebook. “Perdí el conocimiento. Era de la primer causa grande de trata de personas. Eran los famosos prostíbulos de la ruta y seguí” explicó.
Cartasegna indicó que con el episodio de este fin de semana le han “despertado la bestia” y que se enojó mucho al igual que sus colegas. “Yo le trato de buscar el lado positivo a todo lo que me ocurrió estos años. Cuando empecé con la trata me dijeron que no se podía, que La Plata era destino de todas las chicas que traían de todos lados. Llegaron a decir que mi mamá era prostituta y que me casé con una. Con mi gente cerramos cuatrocientos y pico de prostíbulos”. “Tenerles miedo empodera a estas mafias” manifestó.
El fiscal dijo creer que se puede salir adelante con la justicia que él persigue. “Esta batalla si la peleamos se gana fácil hay que sentarse y hablar. Hay que ponerse de acuerdo y decir ya está, a mi no me interesa ascender, no me interesa ser juez, no me interesa ganar esta elección, vamos a sentarnos todos y charlar” y continuó “es el momento de madurar, el país está madurando un poco. Los periodistas dicen basta, los judiciales dicen basta, la gente dice basta, un sector grande de la policía también dice basta, que no les gusta que se les diga corruptos”.
Por último el fiscal aseguró que contar lo que le pasó lo protege. “Cometí el error de no contarlo. A mí esto me pasó el sábado y yo recién lo conté el lunes, el afiche apareció en mi casa y yo no había dicho nada porque pensé que era contra mí” y prosiguió “después me di cuenta que hay un grupo de gente atrás mío y que trabaja conmigo y que es muy anónima con los mismos contactos que yo y entonces es muy mezquino que yo me mantenga escondido”.