El diputado provincial expresó su apoyo al gobernador Axel Kicillof por su decisión de elevar a la Corte Suprema el reclamo por la quita de fondos a la provincia dispuesta por el gobierno nacional.
Gustavo Pulti, el diputado provincial de Unión por la Patria y ex intendente de Mar del Plata, expresó su “más decidido apoyo al gobernador Axel Kicillof y su decisión de elevar a la Corte Suprema el reclamo en contra de la quita de fondos anunciada por la gestión del presidente Javier Milei”.
“Lo que está haciendo Milei con la provincia de Buenos Aires y con el resto del país demuestra que, bajo la excusa de reducir el déficit fiscal, está llevando adelante un plan que significa el desmantelamiento del Estado y de buena parte de sus funciones, además de lesionar profundamente el federalismo. Está lisa y llanamente queriendo desmantelar el país”, señaló el legislador.
“Ya comienzan a manifestarse en la producción y el trabajo -agregó Pulti- los efectos del descalabro que está produciendo, ya vivimos las consecuencias de políticas similares pero llama la atención la agresividad de un programa que, como tuve la oportunidad de señalar, apunta a transformar a la Argentina en un simple territorio para que un puñado reducido de empresas hagan negocios sin ningún tipo de límites o restricciones”.
El diputado bonaerense dijo que lo que se ha visto durante los últimos días es “un presidente completamente insensible y despreocupado por las consecuencias sociales de sus medidas de ajuste”.
Y resaltó: “Milei no muestra ninguna empatía con la suerte que puedan tener las provincias argentinas y sus ciudadanos. Es más, parece que el sufrimiento de los que la están pasando muy mal lo lleva a endurecer aún más sus políticas de ajuste”.
Por último, el ex intendente consideró que, “a juzgar por sus comentarios, Milei parece ser de aquellos que disfrutan cuando se trata de ensañarse con los más débiles”.
“Es un presidente que no respeta la investidura de los gobernadores o de los legisladores elegidos por el voto, mostrando una arrogancia y cara autoritaria que nada tiene que ver con el espíritu democrático basado en el respeto a los poderes constitucionales, el diálogo y la búsqueda de consensos”, finalizó Pulti.