El titular de Consumidores Argentinos, Sergio Procelli, aseguró que la situación financiera de muchas familias “es una olla a presión” y que la preocupación está en “qué va a pasar cuando explote”.
“Estamos viendo una situación complicada, que inició en un principio con una restricción de los consumidores a comprar cosas superfluas, luego pasó a la restricción en gastos diarios y, a fines del año pasado, pasó a una situación de endeudamiento y toma de préstamos para pagar servicios y sostenerse”, señaló Procelli, quien agregó: “Esta situación, sumado a los reclamos por los préstamos UVA, otros préstamos personales y el enfriamientos de algunos aumentos de servicios programados, es una olla a presión y nos preocupa qué va a pasar cuando explote”.
En este sentido, Procelli aseguró que “según consultoras privadas, los niveles de morosidad aumentaron. Sobre todo con lo que respecta al pago de tarjetas de crédito”.
“La gente paga el mínimo, algo que nosotros no recomendamos. Esto los lleva a intentar pagar lo menos posible con crédito y afrontar dentro de sus posibilidades los compras en efectivo”, cerró.