Diseñada por el arquitecto Eduardo Agüero, la vivienda "San Benito" obtuvo una mención en los premios WATA, entregados en Copenhague. Fue el único proyecto sudamericano seleccionado. El jurado destacó su eficiencia energética y sustentabilidad.
La arquitectura argentina volvió a marcar un hito a nivel internacional, y esta vez, la distinción fue para una vivienda construida en Mar del Plata. La casa “San Benito”, diseñada por el arquitecto marplatense Eduardo Agüero, obtuvo una mención especial en la categoría “Vivienda Individual” de los prestigiosos World Architecture Technal Awards (WATA).
Este galardón, que se entregó en el marco de una colorida ceremonia en el Teatro Real de Dinamarca, en Copenhague, el pasado 26 de noviembre, distinguió especialmente la eficiencia energética y la sustentabilidad de esta casa. Hubo un total de 17 proyectos internacionales ganadores, y el de Mar del Plata fue el único proyecto premiado de Sudamérica.
Eduardo Agüero, quien integra el estudio “Agüero Marcenaro Arquitectos” y fue hasta hace pocos años el presidente del Colegio de Arquitectos Distrito IX, compartió con LA CAPITAL los detalles de “San Benito” y también su “satisfacción y gratitud” por este reconocimiento internacional en los WATA, organizados por Hydro, un grupo internacional presente en 40 países, con sede central en Noruega y 120 años de antigüedad que, entre otras ramas, se dedica al aluminio para la industria automotriz y la construcción.
“Nos genera una alegría muy grande este reconocimiento. Recibimos el premio en una ceremonia muy linda en Copenague, frente al canal, donde nos trataron excelente, con mucho respeto. Y si bien en anteriores ediciones vi muchos premios de alta tecnología, es bueno que acá se valoren también las decisiones proyectuales y cómo en forma más artesanal podemos hacer buena arquitectura“, dijo Agüero.
En su tercera edición, el premio WATA destacó proyectos que combinan una arquitectura excepcional con el uso de sistemas de carpintería de aluminio de las marcas Technal, Sapa y Domal.
El jurado de los premios, compuesto por destacados profesionales de la arquitectura a nivel global, otorgó especial relevancia al uso de la luz natural, la integración de la vivienda al entorno y la implementación de soluciones energéticas innovadoras, factores que hicieron brillar a “San Benito” frente a otros proyectos internacionales.
La casa “San Benito” se encuentra ubicada en un terreno espacioso, de 932 metros cuadrados, dentro de un barrio cerrado de Chapadmalal. El arquitecto la diseñó con una clara intención de adaptarse a las características climáticas de la región.
De acuerdo con el proyecto, la primera decisión proyectual fue construir un ámbito exterior protegido, de esta forma lo construido debía adaptarse a la idea rectora, resguardando un “afuera”, formando un recinto. La idea fundante fue dictando todas las decisiones posteriores, para que la casa pudiera hacer uso de este exterior cuidado, separado de otros espacios exteriores.
Esta decisión no solo responde a una cuestión estética, sino también a la necesidad de crear un refugio ante los vientos intensos, creando un microclima más cálido y acogedor. Además, el uso de postigos plegadizos permite que la casa se adapte de manera flexible a las diferentes condiciones climáticas a lo largo del año.
En cuanto a la sostenibilidad, el jurado destacó el uso eficiente de los recursos naturales. La casa está diseñada para aprovechar al máximo la luz solar, con galerías bien orientadas que permiten que la luz fluya a través de los espacios, generando un ambiente cálido y acogedor.
Además, la elección de materiales y sistemas de carpintería de aluminio de la línea Lumeal (deslizadores) y Soleal (ventanas) contribuye a mejorar la eficiencia energética, garantizando un excelente aislamiento térmico.
El jurado de los WATA resaltó la creatividad y la reflexión sobre la luz natural como elementos claves en el diseño de la casa “San Benito”. Según comentaron, las galerías y la disposición del espacio permiten que la luz fluya por toda la casa de manera natural, creando una atmósfera cálida y luminosa. Esta integración de la luz no solo tiene un efecto estético, sino que también optimiza el consumo energético al reducir la necesidad de iluminación artificial durante el día.
La entrega de los premios WATA se celebró en el majestuoso Royal Danish Theatre, ubicado frente al canal de la ciudad. La ceremonia reunió a arquitectos, expertos de la industria de la construcción, y figuras de renombre internacional, quienes celebraron el reconocimiento a los mejores proyectos arquitectónicos del mundo.
“En nuestro estudio de arquitectura, donde trabajan alrededor de 20 personas, este reconocimiento especial se vivió con mucha alegría. Si bien trabajé solo en el diseño durante la pandemia, es un reconocimiento muy especial que se comparte con todo el equipo”, agregó Agüero.
Por cierto, la mención de “San Benito” no solo es un logro personal para Eduardo Agüero y su estudio, sino también un motivo de orgullo para Argentina y Sudamérica, ya que fue el único proyecto de la región en ser seleccionado para esta edición de los premios, en el que hubo varios ganadores.
En total, se enviaron 20 proyectos desde Argentina, pero solo “San Benito”, de Mar del Plata logró posicionarse entre los elegidos por el jurado de los premios WATA dentro de la categoría “Vivienda Individual”.