La fiscal Ana Caro tomó declaración a los dos policías acusados desvalijar una casa en Mar del Sud.
Los dos policías de Mar del Sud que fueron detenidos luego de que desvalijaran una casa de esa localidad y huyeran con el botín en el patrullero admitieron los hechos al declarar ante la fiscal Ana Caro.
Facundo Toloza y Roberto Roldán fueron conducidos hasta el despacho de la fiscal desde la Unidad Penal N°44 de Batán, donde se encuentran detenidos por el delito de robo agravado en concurso real e incumplimiento de los deberes de funcionario público.
Los policías, asistidos por el abogado Raúl Ruiz, indicaron que se habían apoderado de un ciclomotor Yamaha, tres televisores y otros objetos de valor de la casa de 11 y 194 de Mar del Sud para luego venderlos y así poder algunas deudas.
El caso, que se conoció tras la publicación de LA CAPITAL en la noche del jueves, posee algunas características tan peculiares que rayan lo inverosímil. El primer dato caricaturesco es que Toloza y Roldán eran los únicos policías de la pequeña localidad, con lo cual tenían bajo su responsabilidad mantener a sus habitantes seguros.
Vale recordar que antes de desvalijar la casa habían concurrido al lugar convocados por una empresa de monitoreo de alarma y por amigos de los propietarios, quienes viven en Chacabuco. Eso sucedió durante la madrugada del último sábado y tras comprobarse que solo había sido forzada una puerta se retiraron del lugar.
Horas más tarde, después del mediodía del sábado, los amigos de los dueños pasaron para ver si estaba todo bien y se encontraron con la sorpresa de que la casa había sido desvalijada.
Tras la denuncia la fiscal Caro y el jefe de la policía de General Alvarado, Diego Gancedo, iniciaron una investigación en la que rápidamente surgió la extraña actividad del patrullero de Mar del Sud. Los datos del AVL (sistema de gelocalización simil a un GPS) revelaron que había estado en la casa nuevamente y que luego se había dirigido a Miramar, algo que no tenía permitido por estar fuera de su jurisdicción.
Entonces la fiscal Caro solicitó allanamientos para los domicilios de ambos policías y también su detención. Durante la requisa en las casas, el personal de la DDI halló todo lo robado. Así se corroboró la hipótesis de la fiscal Caro que aseguraba que Toloza y Roldán habían usado el patrullero para cargar todo el botín y, mediante un itinerario cuidado para evitar que las cámaras urbanas los captaran, lo llevaron a sus viviendas de Miramar.
Sin embargo, la fiscal Caro tuvo a su alcance una evidencia que los policías no previeron: las imágenes de una cámara de seguridad privada en las que se ve al patrullero cargado.
Los dos policías fueron desafectados de sus funciones y ahora afrontan cargos que podrían mantenerlo un tiempo prolongado en prisión.