Juntos por el Cambio condenó la entrega de las 140 hectáreas a la agrupación vinculada a Grabois. Sol de la Torre, del Frente de Todos, defendió la iniciativa y convocó a discutirla "sin chicanas".
Con la cesión de tierras en la zona de El Marquesado en el centro de la escena, el interbloque oficialista y la oposición protagonizaron este jueves un extenso debate en el Concejo Deliberante que tuvo desde cruces y acusaciones políticas hasta invitaciones al diálogo.
En la primera sesión ordinaria del año, en la que además hubo bancas 25 a favor y en contra del proyecto agroecológico para la zona sur de la ciudad, el interbloque de Juntos por el Cambio condenó las formas con que procedió el Gobierno nacional, mientras que Sol de la Torre, la concejala del Frente de Todos que responde a Juan Grabois, describió y defendió la iniciativa.
El debate lo abrió y lo cerró el presidente del bloque oficialista, Agustín Neme. “Lo que está sucediendo no nos sorprende, es un modus operandi que se viene desarrollando en nuestro país con una clara intención, una clara estrategia de avasallamiento, de no respeto, de querer imponer una determinada lógica”, lanzó de movida.
“Es lo que viene realizando el kirchnerismo en el país y puntualmente en nuestra ciudad. Recordemos: primero con las tierras de OSSE, luego con lo que estamos viviendo en el barrio Las Heras, con lo que se intentó llevar adelante en el barrio Libertad y ahora con una decisión del Gobierno nacional de entregarle a su socio Grabois 140 hectáreas en el partido”, agregó.
Agustín Neme, presidente del bloque de Vamos Juntos.
Neme habló de “un convenio ridículo” que “no pasa por ninguna cuestión legal” y favorece a una “asociación civil desconocida que tiene domicilio en un kiosco de Mar del Plata”.
Dijo que “don Luis (el casero del campo) fue echado a las patadas, llorando, pidiendo por favor que le dejaran sacar sus pertenencias”. Y aseguró que “intentan avasallar a los marplatenses y al intendente”, lo que no va a suceder porque el jefe comunal “los va a seguir enfrentando”.
“Sabía que iba a haber una invitación a la provocación, al enojo, a la confrontación”, respondió De la Torre, y anticipó que no iba a entrar en la pelea porque eso “solo promueve la utilización de la violencia como herramienta política”.
En cambio, en su discurso se propuso “llegar al fondo de las cuestiones”. En ese sentido, consideró necesario discutir “la convivencia del desarrollo productivo con el desarrollo inmobiliario”.
El tema en cuestión, consideró, es “una oportunidad de discutir la Mar del Plata y Batán que queremos, lo estratégico”, y para “construir los consensos y la unidad para que todos los marplatenses y batanenses puedan vivir con dignidad”.
Sol de la Torre, del Frente de Todos.
De la Torre –que fue la única vocera de su bloque en el debate– insistió en que el ex secretario de Desarrollo Productivo, el hoy concejal Fernando Muro, le presentó el proyecto en marzo de 2021. También mencionó la adhesión del municipio a la Red Nacional de Municipios y Comunidades que Fomentan la Agroecología (Renama) y enumeró las dificultades de los productores del cordón frutihortícola que no tienen tierras y deben arrendarlas.
“Creo que necesitamos desarrollar emprendimientos productivos desde el Estado que permitan a las familias agricultoras acceder a una porción de tierra por un período de tiempo en el que puedan capitalizarse para después comprar su propia tierra”, dijo. Y aclaró: “Acá no queremos que nadie le regale nada a nadie, sino que todos tengamos la oportunidad de comprar nuestro pedazo de tierra, de construir nuestra casita para vivir, eso es lo que estamos buscando”.
En ese contexto explicó que el Estado entregó “en custodia por 180 días” las tierras “en desuso” de la zona de El Marquesado a la asociación civil Tercer Tiempo para desarrollar el proyecto productivo agroecológico. “Hay que estudiar la tierra para desarrollar un proyecto definitivo”, señaló. Y pidió: “Discutamos el proyecto. No entremos en la chicana, en la utilización de la angustia de los vecinos para hacer campaña electoral”.
El concejal radical Daniel Núñez.
Más críticas
Buena parte de los concejales del PRO, el radicalismo y la Coalición Cívica profundizaron los cuestionamientos. “Fue violento cómo los marplatenses nos enteramos el sábado al mediodía de la toma de la tierra en el sur de Mar del Plata, es violento que el intendente se tenga que enterar por los medios lo que está pasando, es violento para los vecinos”, aseguró Guillermo Volponi.
Por momentos, el oficialismo también ensayó un respaldo al proyecto agroecológico, pero no para ese lugar ni con las formas que se usaron. “Desarrollamos un plan de fomento a la agroecología en el partido. Apoyamos ese modelo de producción, está muy bien llevarlo adelante”, señaló Muro. “Pero esto es otra cosa. Es la asignación de un campo enorme que da al mar. No lo impulsamos, ni gestionamos, ni hacemos nada para que se lleve adelante, lo quiero dejar en claro”, se desmarcó.
Los radicales Daniel Núñez y Marianela Romero insistieron en que los “militantes del MTE (Movimiento de Trabajadores Excluidos” tomaron “por asalto” y “a las patadas” los terrenos, mientras que Nicolás Lauría (Creciendo Juntos) consideró que hubo una “cesión avasallante” para la comunidad.
Horacio Taccone, de Acción Marplatense.
Por su parte, Horacio Taccone (Acción Marplatense) responsabilizó a los gobiernos nacional y municipal por no dialogar. “Al contrario del rey Midas, que todo lo que tocaba lo convertía en oro, acá todo lo que tocan lo convierten en conflicto”, lanzó, y si remarcó que “sin consenso social no se debe seguir adelante” con el proyecto.
Sobre el final, Neme volvió sobre el llamado al consenso de De la Torre. “Nos invitan al diálogo cuando desde ese sector se metieron a las patadas y se quieren quedar con 140 hectáreas de nuestra ciudad. Yo quiero invitarlo a Grabois a que se retire de Mar del Plata, a que deje las 140 hectáreas que no le pertenecen”.