Según precisaron los abogados el hombre es testigo y víctima en el debate por los crímenes cometidos en el Pozo de Quilmes durante la última dictadura, causa en la que Etchecolatz está imputado.
Abogados querellantes en causas de derechos humanos solicitaron al Tribunal Oral Federal 1 de La Plata “garantizar la seguridad, protección e integridad” de las víctimas de Miguel Etchecolatz, quien ayer recibió el beneficio de prisión domiciliaria y residirá en la zona del Bosque Peralta Ramos de la ciudad de Mar del Plata.
A la vez, pidieron a los miembros del TOF 1 de La Plata que “revean el lugar de residencia” del represor por habitar allí uno de los testigos que fue víctima de su accionar durante la última dictadura cívico-militar.
“Nuestro querellante, testigo y víctima por el cual Etchecolatz fue condenado, se domicilia en el mismo barrio donde residirá el genocida luego de que la justicia dispusiera el cumplimiento de la prisión domiciliaria en el inmueble ubicado en la calle Nuevo Boulevard del Bosque entre Guaraníes y Tobas, Bosque Peralta Ramos“, indicaron en la presentación firmada por los abogados Guadalupe Godoy y Emanuel Lovelli.
Tengo que interponer una medida de protección para que el genocida Etchecolatz no vaya a vivir a la misma calle que una de sus víctimas. Pero el Tof 1 De La Plata no la quiere recibir. Es victima directa de Etchecolatz en un juicio por el que fue condenado y en otro pendiente.
— guadalupe godoy (@guadalgodoy) 27 de diciembre de 2017
Allí hicieron mención a lo dispuesto ayer por el Tribunal Oral Federal 6 de la Ciudad de Buenos Aires, que concedió la prisión domiciliaria al ex jefe de Investigaciones de la provincia de Buenos Aires por su edad avanzada -88 años- y su “delicado cuadro de salud”.
Según precisaron los abogados, el domicilio de la víctima es Boulevard Nuevo Bosque y Los Robles.
“Dicho barrio se trata de una reserva forestal cerrada, con una sola vía de acceso a la cual la víctima fue a vivir de egreso de su exilio en Francia y que su madre había adquirido en 2008, fecha en la que Etchecolatz ya se encontraba detenido en las prisión de Marcos Paz“, indicaron.
Agregaron además que el sobreviviente del terrorismo de Estado “es testigo y víctima en el debate que espera fecha de inicio ante ese tribunal por los crímenes cometidos en el Pozo de Quilmes durante la última dictadura y en el cual el propio Etchecolatz resulta imputado”.
En ese contexto, apelaron a los jueces a “dimensionar el daño e impacto que produce a una víctima directa de Etchecolatz de quien fuera Director General de Investigaciones de la Policía de la Provincia de Buenos Aires y que jamás mostró arrepentimiento alguno por sus crímenes, haciendo gala del desprecio que siempre manifestó para con sus víctimas en cada una de las audiencias de debate desde el año 2006 a la fecha”.
El 18 de septiembre de ese año, el testigo y querellante Jorge Julio López fue visto por última vez cuando iba a asistir a la audiencia de alegatos contra Etchecolatz y aún continúa desaparecido.
Los abogados solicitaron al Tribunal “evitar la revictimización de aquellas personas que sufrieron en carne propia el poder y la práctica de la tortura de Miguel Osvaldo Etchecolatz“, al referirse al damnificado que durante su secuestro compartió celda en la Unidad 9 de La Plata con el albañil desaparecido tras testimoniar contra Etchecolatz, Jorge Julio López.
En ese marco, recordaron que “es un deber de este Tribunal, en tanto representante de un poder del Estado, que los crímenes de lesa humanidad sean castigados de acuerdo a los compromisos internacionales asumidos por el Estado Argentino“.