Demoledor 103-75 sobre Unión de Santa Fe. El equipo marplatense sacó treinta puntos de ventaja en un cuarto inicial casi perfecto. El resultado le permitió despegar todavía más del fondo. El rendimiento ilusiona con objetivos más importantes.
Por Sebastián Arana
Con un primer cuarto de alto vuelo, varias buenas actuaciones individuales y solidez colectiva, Peñarol destrozó a Unión de Santa Fe por 103-75 y confirmó su trayectoria ascendente en la Liga Nacional de Básquet.
Fue tal la diferencia que estableció Peñarol sobre Unión, hasta hace semanas uno de los rivales en la pelea por mantener la categoría, que cualquier observador no puede menos que suponer que el equipo marplatense tiene poco de qué preocuparse en esa discusión y que es hora de redefinir los objetivos.
Puede argumentarse que al elenco “milrayitas” le salieron todas en el primer cuarto y que la oposición “tatengue” fue pobrísima. La diferencia de potencial pareció abismal. El de anoche se asemejó a un duelo entre un plantel de mitad de tabla para arriba y otro que hace lo que puede. En consecuencia, quedó flotando la sensación de que de ahora en más Peñarol, aunque debe remar de atrás, está para ir a buscar un lugar más importante en la tabla de posiciones.
Lo del primer cuarto fue casi perfecto. El elenco de Laginestra despedazó a Unión con una defensa sin concesiones y una puntería sencillamente endiablada. El gol llegó desde lejos y desde casi todas las manos. Para muestra, el cuarto cerró con un triple sobre la bocina de …¡Filippa!
Los números de ese parcial fueron asombrosos. Peñarol llegó a los 43 puntos con un increíble 10/13 en triples, más 5/5 en dobles. Thornton brilló, Monacchi fue el sólido tirador a pie firme de sus mejores noches, Valinotti mantuvo su nivel de los últimos partidos, Barlow mostró calidad y casi todos se acoplaron en la misma sintonía.
El 43-13 dejó definida la lucha prematuramente. A los hinchas “milrayitas” -llegaron al Polideportivo en muy buen número- les quedaron rojas las palmas de tanto aplaudir. Naturalmente, luego, los porcentajes de eficacia se normalizaron. Y, con semejante ventaja, la defensa dio algunas concesiones.
De todos modos, otros datos auspiciosos se sumaron a la libreta de apuntes. Whitfield entró muy bien con el aro y Simpson, de opaco comienzo, hizo otro buen aporte defensivo. La idea de jugar al ritmo de Thornton nunca se dejó de lado, más allá de que aparecieran oportunidades para correr. Y, pese a la amplia ventaja, se vieron gestos de contrariedad cuando transitoriamente las cosas no salieron. Nunca dio lo mismo.
Fue una noche feliz. Fue el partido del despegue. A este equipo se le puede pedir bastante más que escaparle al fondo de la tabla.
Síntesis
Peñarol 103
J. Valinotti 8, K. Barlow 10, T. Monacchi 19, A. Thornton 26 y D. Simpson 7 (FI); F, Filippa 3, J. Morales 5, R. Whitfield 23, N. Chiaraviglio 0, G. Rossi 0 y M. Chapero 2. DT: Hernán Laginestra.
Unión (Santa Fe) 75
J. Sandrini 5, M. Butler 13, J. Martin 0, D. Hure 4 y P. Bombino 15 (FI); Martín Gómez 0, T. Moore 10, V. Duvanced 4 (x), J. Alessio 12, Manuel Gómez 9, F. Chamorro 0 y A. Ferrari 3. DT: Sebastián Puñet.
Estadio: Polideportivo “Islas Malvinas”.
Arbitros: Pablo Estévez, Enrique Cáceres y Franco Anselmo.
Parciales: 43-13, 62-30 y 84-52.