Derrotó 80-77 a San Lorenzo en su regreso a la competencia. El equipo local alternó buenas y malas y sufrió hasta el final a un buen rival y a un Lucas Pérez endemoniado. El domingo recibe a Gimnasia de Comodoro Rivadavia.
Por Sebastián Arana
Peñarol regresó a la competencia en la Liga Nacional de Básquet con un triunfo tan angustioso como valorable por 80-77 sobre San Lorenzo. Tuvo pocos buenos ratos de básquet, la jerarquía enorme de Thornton en el primer tiempo y aplomo cuando el rival se vino para no fallar desde la línea.
El que esperaba un partido sencillo para el conjunto “milrayitas” se llevó una sorpresa. Los de Boedo, con sus problemas a cuestas, se lo disputaron palmo a palmo. En gran medida por la formidable tarea de Lucas Pérez, tan dueño de su equipo como certero para anotar desde lejos.
Todavía en proceso de acomodarse a sus cambios, al equipo local le costó fluir en ataque y tampoco fue demasiado confiable en defensa. Por un lado, Pérez dominó el duelo de bases. Por otro, “Chuzito” González comenzó impreciso, como si le hubiera costado sacarse de encima la incertidumbre que rodeó en las horas previas a la cuestión de su habilitación, resuelta a último momento, minutos antes del inicio del encuentro. Y, por último, Kramer cometió dos faltas en dos minutos y vio gran parte de la primera parte desde el banco.
En consecuencia, a Peñarol le costó despegar. Fue casi siempre adelante sin dar sensación de superioridad. Sostenido por sus buenos porcentajes de tiro exterior y por todos los recursos de Thornton, imparable en la primera parte. Pero siempre San Lorenzo dio la impresión de jugar más cerca de su techo y le detuvo sus dos tentativas de fuga. Así, al entretiempo, llegaron apenas separados por dos puntos: 43-41 para los de Laginestra.
De regreso al partido, el conjunto local mostró lo mejor. Por fin endureció la defensa con dos aportes vitales: el de Andújar en la primera línea y el de Kramer cerca del canasto. Los logros defensivos de ambos motivaron al resto, crecieron todos y apareció el contraataque. Peñarol logró frenar a Pérez, San Lorenzo se nubló y la ventaja trepó al orden de los diez puntos promediando el parcial.
No obstante, tampoco ahí pudo aplicar el tiro de gracia. Ese pasaje duró cinco minutos. Luego no pudo mantener la energía defensiva y el correlato fue una merma de su dinámica en ataque. Puesto a luchar cuerpo a cuerpo en el cinco contra cinco, perdió más de las que ganó. Ni Thornton pudo mantener el nivel de la primera parte.
San Lorenzo, luchador y disciplinado, recortó la brecha paulatinamente y puso máxima presión en el minuto final con otro triple de Pérez y una contra de Stenta que achicó la luz a un punto (74-73) a falta de diecisiete segundos. Pero Peñarol, pese a sufrir la última “bomba” del base rival, no falló desde la línea de libres y festejó un triunfo muy valioso.
Síntesis
Peñarol 80
L. Andújar 12, M. Thomas 14, L. González 11, A. Thornton 24 y K. Kramer 4 (FI); V. Fernández 3, I. Bednarek 4, F. Marín 2, D. Pineda 6 y F. Tolosa 0. DT: Hernán Laginestra.
San Lorenzo 77
L. Pérez 30, L. Latorre 6, G. Córdoba 7 (x), N. Stenta 7 e I. Basualdo 6 (FI); S. Safar 5, D. Collomb 9 (x) y F. Alorda 7. DT: Leonardo Costa.
Estadio: Polideportivo “Islas Malvinas”.
Árbitros: Alejandro Chiti, Raúl Sánchez y Raúl Lorenzo.
Parciales: 21-18, 43-41 y 64-57.