El dirigente arroyista habló así sobre los dirigentes locales de ese partido. En una entrevista, Saenz Saralegui dijo que Arroyo terminó siendo candidato de Macri "por azar" ya que también evaluaba apoyar a Massa. Elogios para algunos radicales.
El presidente del Concejo Deliberante, Guillermo Saenz Saralegui, formuló nuevas definiciones sobre la dinámica política de la gestión del intendente Carlos Arroyo.
“La gente del PRO, en sí, no existe”, sentenció durante una entrevista radial en la que se definió como amigo de Arroyo y dejó en claro cuáles son las diferencias que a su juicio existen dentro de la alianza de gobierno Cambiemos, que en Mar del Plata, está constituida por la Agrupación Atlántica, el PRO y la UCR.
Además, aseguró que cuando el año pasado su partido analizó con quién aliarse políticamente resultaba indistinto hacerlo con Sergio Massa o Mauricio Macri y que como resultado se optó por esta última alternativa “por azar”.
En diálogo con el programa Una Mañana Perfecta que se emite por Radio Continental Mar del Plata, Saenz Saralegui describió una vez más cuál es el vínculo que lo une con el jefe comunal, cuál fue la historia de ambos como militantes, sus inicios junto a Mohamed Seineldín y Luis Patti y analizó el presente y el futuro del gobierno local.
Elogios a la UCR
Saenz Saralegui, uno de los principales dirigentes del arroyismo, tuvo elogios para figuras del radicalismo, como el diputado provincial Maximiliano Abad y el concejal Nicolás Maiorano, quien además de ocupar ese cargo ejerce tareas en el Ministerio del Interior de la Nación, asegurando que ambos le están proveyendo una ayuda crucial a la gestión local.
En este sentido, hizo saber que la tarea de ambos fue decisiva para que el gobierno nacional aceptara enviarle al municipio un ATN de 50 millones de pesos para poder pagar los aguinaldos de los trabajadores municipales.
Consultado sobre por qué esas gestiones no fueron encomendadas a dirigentes del PRO, el presidente del Concejo respondió:
“Lo que pasa es que la gente del PRO, en sí, no existe. Yo no lo veo como un partido político sino como una gestión política. Es un partido de transición, lo que no es malo. Si es exitoso será un gran partido político. Digo que es de transición, no descartable. Será descartable si la gestión es mala”.
Esa no fue la única apreciación política del dirigente de la Agrupación Atlántica durante la entrevista.
También reveló cómo Carlos Arroyo y su partido terminaron integrándose a la Alianza Cambiemos, el año pasado, apoyando la candidatura de Mauricio Macri.
Saenz Saralegui dijo que en su momento, junto al actual intendente se analizó cómo “sacar a esta gente que estaba usurpando el poder, porque estamos viendo día a día que era tal vez un grupo de delincuentes que hacían negocios con el Estado, el kirchnerismo”.
Dos alternativas
Recordó que ese momento la oposición tenía dos alternativas fuertes y dijo que para Agrupación Atlántica las opciones indistintamente eran “Massa o Macri”.
El concejal aseguró que se llegó a una definición “por azar” y reflexionó sobre el perfil ideológico del Presidente y su partido.
“Pensaremos que es un liberal y que es una transición porque acá tenemos que volver a los partidos políticos. Los ?ismos? como el duhaldimo, kirchnerismo, massismo, macrismo no me parece que sean referentes para un país. El referente para un país son los partidos políticos”, aseguró.
Tras definirse como un “nacionalista”, “peronista ortodoxo” y fustigar a Carlos Menem por “neoliberal”, Saenz Saralegui relativizó las contradicciones por pertenecer ahora a una alianza con el macrismo.
Y sostuvo no ejercer ahora “ninguna crítica al liberalismo” sino realizar una “evaluación” sobre cómo está constituida la alianza Cambiemos y de lo que “puede llegar a pasar”.
A su juicio, tras las elecciones ocurrió lo que él había vaticinado ya que “el radicalismo siguió con sus radicales y la gordita Carrió con su partido”, sin ocupar ningún cargo al igual que el dirigente de la UCR, Ernesto Sanz. Pese a eso “salieron muy beneficiados” al obtener “gobernadores, intendentes, diputados nacionales, diputados provinciales”.
Así ocurrió con “el radicalismo que prácticamente no tenía ninguna chance de ganar ninguna elección, y bueno, Carrió que si nos vamos al torneo de los descensos, estaría en primera C”, sostuvo.
El producto de un frente
En este contexto, Saenz Saralegui definió al gobierno de Arroyo como producto de un frente atribuyendo a eso las habituales tensiones que existen entre Agrupación Atlántica, la UCR y el PRO.
“Nosotros tenemos la suerte de tener un intendente con muchísima personalidad y con muchísima gestión. Tal vez no haga la comunicación que tendría que hacer hacia afuera pero está trabajando muchísimo y con muy pocos recursos económicos, porque acá el problema, sin hablar de herencia, es el recurso económico. Porque pongámosle que hay una herencia; sí, macanudo, pero un gobierno tiene que bajar los dineros, los fondos como para que se pueda gestionar con un mínimo para cubrir las necesidades.
Yo pienso que eso está empezando a ocurrir, porque acá hay gente tal vez radicales y peronistas, trabajando en Capital Federal justamente gestionando ese tipo de oportunidades económicas”, explicó.
Y en este contexto, elogió la tarea de los radicales Nicolás Maiorano y Maximiliano Abad. “Es un frente al cual algunos radicales lo han entendido muy bien. Uno a nivel provincial como es Maxi Abad y el otro en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, que muchos por ahí piensan que Nico está pasando unas vacaciones allá y no es así, está gestionando a nivel nacional. Vemos los resultados”, sostuvo.
Los orígenes con Arroyo
Durante la entrevista realizada por los periodistas Jorge Penín y Rubén González, Sáenz Saralegui volvió a repasar los orígenes de su relación con el actual intendente.
Contó que ante su interés por crear un partido político, en el año 1996, decidió recurrir a él y que lo encontró gracias a un dato que le dio un conocido en una peluquería.
Así fue como llegó a su casa, le tocó timbre y lo convenció de formar juntos un partido político, que en aquél entonces se inició bajo la figura de los militares carapintadas Mohamed Alí Seineldín y Gustavo Breid Obeid, ambos presos por alzarse contra el gobierno de Raúl Alfonsín.
El presidente del Concejo recordó que en aquel entonces, luego de ser funcionario del ex intendente Mario Russak, Arroyo “había medio como colgado los botines políticos y le prendimos de vuelta el fuego, basado en un nacionalismo bien entendido, argentino. Entonces nos dimos manija entre los dos y caminamos unos 10 años o 12 años hasta conseguir el primer éxito que fue que entrara él como concejal”.
Saenz Saralegui recordó que en ese entonces “conseguimos la personería jurídica y las dos elecciones las perdimos por no sacar el 2 por ciento a nivel provincial. Perdimos la personería jurídica y con Fernando Arroyo, estuvimos pidiendo partidos prestados. Así, fuimos a varias elecciones, tal vez sin conocer los orígenes. Lo conocí a (Luis Abelardo) Patti personalmente y fuimos con el Paufe”, el partido que tenía en ese momento quien luego fuera condenado a cadena perpetua por delitos de lesa humanidad.