Aseguró, a su vez, que "si no nos convencemos de que esta es una enfermedad, no se podrá resolver bien el problema".
El papa Francisco afirmó que si hay sacerdotes envueltos en abusos de menores, “está en acción la presencia del diablo que arruina la obra de Jesús” a través de aquellos que deben anunciarla, y pidió no recibir en una diócesis a quien haya sido rechazado por otro seminario o instituto religioso sin antes “pedir información muy clara y detallada sobre los motivos del alejamiento”.
“De cuatro personas que abusan, dos han sido abusadas a su vez. Se siembra el abuso en el futuro, es devastante”, aseguró el pontífice argentino en un diálogo con la Congregación General de los Jesuitas en noviembre pasado y que el diario Corriere della Sera publica hoy.
En ese marco, Jorge Bergoglio añadió: “Si hay religiosos o sacerdotes envueltos (en abusos), está claro que está en acción la presencia del diablo que arruina la obra de Jesús a través de aquellos que deben anunciar a Jesús. Pero hablemos claro: esto es una enfermedad”.
“Si no nos convencemos de que esta es una enfermedad, no se podrá resolver bien el problema. Por lo tanto, atención a recibir para la formación a candidatos a la vida religiosa sin comprobar bien su madurez afectiva”, pidió el Papa, y propuso, “por ejemplo, nunca recibir en la vida religiosa o en una diócesis candidatos que hayan sido rechazados por otro seminario o de otro instituto sin pedir información muy clara y detallada sobre os motivos del alejamiento”.
Francisco instauró bajo su Pontificado una comisión dedicada a tutelar a los menores y promover la prevención para los casos de abusos.
El diálogo publicado hoy por Corriere es parte de un número especial de la revista más antigua de Italia, “La Civiltà Cattolica”, en ocasión de su número 4000.