"Mis lectores fueron creciendo con mis historias y hace tiempo tenía ganas de escribir este género, adulto, que también me encanta leer" contó la escritora en una charla con LA CAPITAL, acerca de "Mi deseo es odiarte".
Hay quienes la siguen desde su serie ’14/7′ que retrata las aventuras de cuatro amigas que comparten un particular don. Otros la descubrieron con ‘Starly y Zoe’, las “amigas imperfectas” que transitan, como pueden, los conflictos de la adolescencia, golpeándose y aprendiendo en el camino. O por “Las siete vidas de Mason Daft”, con el que incursionó en el género fantástico.
A fines de 2023, la periodista, influencer y escritora Pamela Stupia, desembarcó en el sello Umbriel de la editorial Urano, con “Mi deseo es odiarte”, una historia para un público más adulto y con suspenso, acción y, sobre todo, mucho romance.
“Es un género que me encanta y tenía muchas ganas de abordar. Mis lectores fueron creciendo con mis historias y hace tiempo tenía ganas de escribir este género, adulto, que también me encanta leer”, confió la autora en una charla con LA CAPITAL, en el marco de una gira de firma de libros, que la trajo a Mar del Plata con su flamante edición de esta novela que protagonizan la hija de Starlie y Santi y el hijo de Luca (,Amistades imperfectas,), en una historia que ocurre varias décadas después.
Los jóvenes amigos, tras años de no verse, se reencuentran en Los Angeles y se enfrentan a una realidad inexorable: no son los mismos que cuando se vieron por última vez.
“Leo mucho romance y me gusta un montón, pero no me siento cómoda escribiendo solo romance, siento que tiene que tener otro canal, por eso tiene mucho de suspenso, escenas de acción, porque tenemos un protagonista que está metido en las mafias y una protagonista que crece mucho, entonces es un sube y baja de emociones”, definió la escritora.
Stupia destacó que comenzó a escribir el libro “por gusto”, sin tenerlo acordado con ninguna editorial, por lo que “lo fui llevando por el camino que quise y el resultado, la verdad, me encantó”.
“Siento -continuó- que para que un libro te guste y para que te involucres con la historia, tenés que sentir que los personajes son reales, entonces para mí el desarrollo, su interior, es fundamental. Qué les gusta, qué no les gusta, qué problema tienen, qué tienen que resolver. Eso hace que vos conectes y que tengas más ganas de leer y que a lo mejor al final te quedes con una linda sensación porque acompañaste al personaje a lo largo de todo ese proceso”.
Por ello, los protagonistas de “Mi deseo es odiarte”, no solo tienen un desarrollo parejo, sino que toman “malas” decisiones, se equivocan y aprenden en el camino.
“La realidad es que a todos en algún momento, en algunas situaciones, seamos hombres o mujeres, hay cosas que nos generan miedo o que nos descolocan o en las que no sabemos cómo actuar. Es real a veces nos equivocamos y los personajes de ficción no pueden escapar a eso”, consideró.
“Ni mujeres muy sumisas, ni que se las sepan todas. Ni héroes perfectos, ni perdedores absolutos, porque eso es frustrante. En este libro tenemos a Dolores que empieza haciendo una lluvia de corazones y en el camino va creciendo un montón y tenemos a Mauricio que en un principio parece que se las sabe todas pero en realidad no es tan así. Tiene un montón de cosas guardadas, miedos, inseguridades. Tienen que ser lo más reales posible” agregó.
Si bien cuando escribe, Pamela Stupia “solo pienso en función de la ficción”, reconoce que, a partir de ciertas acciones de la novela “me doy cuenta que tienen un impacto muy concreto en la vida de quién está leyendo, con sus experiencias o con lo que les puede estar pasando. Entonces me parece que el desarrollo de personajes es súper importante no solo para mantenerte entretenido durante el tiempo que estás leyendo, sino para que cuando cerras el libro te quede algo más”.
En el caso de “Mi deseo es odiarte”, una situación en particular tuvo un impacto que la escritora no esperaba. “Me generó un poquito de miedo escribirla, no lo había hecho antes y la verdad que intenté hacerlo de la forma más real posible, pero al mismo tiempo intentando que la protagonista se expresara como para dar un mensaje también. Y justamente, en la en la firma de libros, me pasó que una chica me agradeció porque pasó por una situación similar y nunca se había animado a decírselo a nadie, excepto su psicóloga” compartió.
Por otra parte, Pamela reconoce que le encanta escribir en primera persona. “Podés ayudar al personaje a que se exprese mucho mejor. Y en este libro en particular los personajes son tan diferentes -un personaje masculino recontra oscuro y conflictuado y un personaje femenino que es súper romántica pero que se va reinventando- que me parecía que estaba bueno que en la novela estuvieran los puntos de vista de cada uno, porque ese contraste hacía que sea un poco más divertida la historia”.
Mientras disfruta de la repercusión que está teniendo “Mi deseo es odiarte”, con la que sorprendió al público que fue creciendo a la par de sus historias, Pamela está comenzando una nueva novela. “No puedo contar mucho, pero tendrá condimentos de romance, suspenso, acción y oscuridad”, adelantó.