Frente a San Martín de Tucumán y con la camiseta de Estudiantes jugará su último partido oficial. Dejó un gran recuerdo en Aldosivi, donde integró el equipo que ascendió a Primera División en diciembre de 2014 y se hizo ídolo con su aporte para el elenco portuense en la elite.
Pablo Lugüercio anunció oficialmente que el lunes cuando Estudiantes enfrente a San Martin de Tucumán será su ultimo partido como jugador profesional y remarcó que “es una decisión meditada, pensada y que iba a darse en diciembre pero por pedido del club seguí este tiempo”.
“No sé si será fácil el martes cuando no venga a entrenarme porque es algo que hago desde los 4 años, pero es el momento que los más chicos tengan su lugar y disfruten como lo hice yo”, agregó el hombre que dejó un gran recuerdo en Aldosivi, donde integró el equipo que ascendió a Primera División en 2014.
Más adelante destacó que “es un buen momento para este punto final para mí y para el club que hoy tiene en Gabriel Milito a un gran maestro, como tuvimos nosotros en el 2006 a Diego Simeone, los chicos lo tienen que disfrutar y aprovechar”.
El “Payaso” hizo un balance de su carrera y puntualizó que “en todos lados dejé y me llevé un gran recuerdo pero salir campeón en mi club, con amigos, con los que crecimos y soñamos es algo maravilloso. El gol que más recuerdo es el del 4 a 3 a Sporting Cristal porque representó claramente lo que es la mística de Estudiantes”.
En otro tramo de la conferencia añadió que “de Estudiantes me llevo todo lo mejor y lo sintetizo en los nombres de Cacho Malbernat y Rubén Bedogni, que me enseñaron todos los valores para ser un buen profesional y buena gente”.
Sobre su futuro aclaró que “desde hace tiempo vengo trabajando en una empresa de couching deportivo. No necesariamente ser representante, quiero aportarle a los chicos otras cosas, que lo importante no es tener el mejor auto sino valores y educación, eso es clave para llegar”.
Por su parte, Agustín Alayes, secretario técnico del club, compañero y amigo de Lugüercio destacó que “Pablo compitió hasta el último día con la misma seriedad y pasión. Ojalá el lunes tenga una gran despedida, se lo merece porque es un fiel exponente de nuestra escuela y de lo que pretendemos sembrar en nuestros chicos”.
Pablo se inició en Estudiantes de La Plata en 2001 y luego pasó por Defensa y Justicia, Universidad San Martín de Perú, Racing Club, Barcelona de Guayaquil, Arsenal, Olimpo y Aldosivi, antes de regresar a Estudiantes.
En el conjunto marplatense disputó 81 partidos y marcó 14 goles, siendo parte fundamental del equipo que en 2014 logró el ascenso a Primera División.