El hecho ocurrió en el barrio La Zulema. Fue la hija de ambos, de 5 años, la que comenzó a gritarle al padre que dejara de agredir a su madre, a la cual asfixió hasta casi hacerle perder el conocimiento. Poco después, la policía detuvo al hombre.
Otro grave caso de violencia de género se registró en la ciudad en las últimas horas y es el tercero en cuatro días que van del nuevo año: ocurrió en el barrio La Zulema este martes, cuando un hombre fue hasta la casa de su ex pareja, la golpeó delante de la pequeña hija de ambos y la encerró en una habitación.
Todo comenzó de madrugada, cuando por razones que son materia de investigación el acusado se dirigió a la vivienda donde la mujer de 31 años vive con la niña de 5. En ese lugar, le sustrajo su teléfono celular y comenzó a revisarlo.
Según se supo luego, fue entonces que la acusó de mantener relaciones con otros hombres y empezó a agredirla física y verbalmente. Conforme indicaron fuentes policiales, la tomó del cuello y posteriormente la encerró en una habitación donde la asfixió, casi llevándola a perder el conocimiento.
En esos instantes, la niña intervino y golpeó la puerta en varias oportunidades hasta que logró que su padre depusiera su actitud. Más tarde, la mujer pudo recuperar su teléfono celular y dar aviso a sus amigas de lo que ocurría.
Esa maniobra posibilitó que alguna de ellas llamara a la comisaría decimosegunda y advirtiera del hecho a los efectivos de dicha dependencia, quienes poco después, junto al personal de la Policía Local, se presentaron en el lugar.
Al darse cuenta de que la víctima había pedido ayuda, el hombre -de 25 años- se encerró en una habitación con un encendedor y servilletas de papel, para de esa forma amenazarla con incendiar la casa y darse a la fuga. Pero, por el rápido accionar de los investigadores, ninguna de esas dos situaciones sucedió.
Tras arribar a la vivienda, el personal policial detuvo al acusado y, por orden del fiscal de Flagrancia, Guillermo Nicora, lo trasladó a la Alcaidía Penitenciaria Nº 44 de Batán. Quedó imputado en una causa caratulada “Privación ilegítima de la libertad, lesiones leves agravadas mediando violencia de género, amenazas y violación de domicilio”.
El caso ocurrió menos de dos días después de que un médico de 43 años fuera acusado de asaltar a su ex pareja en su departamento de Colón al 2500, atarla de pies y manos, robarle y raparle la mitad de la cabeza.