Cedió el invicto ante Paracao en el Torneo Argentino de Clubes de vóleibol.
Por Marcelo Solari
Esta vez le tocó perder. Pero aún ante el resultado adverso y en condición de local, bien vale extraerle una conclusión positiva: Once Unidos compitió de igual a igual frente a un muy buen equipo, que había ganado sus dos primeros compromisos ante rivales pesados y mostró que tiene múltiples argumentos. En definitiva, el conjunto marplatense cayó por 3-1 (22-25, 19-25, 28-26 y 23-25) y resignó su invicto en el Torneo Argentino de Clubes de vóleibol.
Once Unidos controló el inicio del primer set, con Iván Quiroga implacable en el bloqueo y una acertada reconstrucción colectiva para sumar por el contraataque hasta tomar una ventaja de 10-7. Sin embargo, cuando llegó adelante el central Julián López, Paracao se robusteció en el bloqueo, equilibró las acciones y hasta sacó ventajas (14-17 y 17-21) con el eficaz Gonzalo Lapera por la punta.
Y aunque el local luchó hasta el final, apoyándose en la defensa y una buena ráfaga ofensiva de Bautista Gazaba, la visita sostuvo su ventaja y cerró el segmento por la vía del bloqueo.
Algunos errores propios y ciertas virtudes del oponente, como la correcta distribución del armador Martín Molinaro, el crecimiento de Luciano Coto por la punta y un gran volumen de juego a partir de una enorme gestión defensiva, marcaron el camino del segundo capítulo en favor de la visita.
Once Unidos tuvo que correr siempre de atrás para intentar remontar una desventaja que osciló entre los 2 y los 5 puntos.
Un excelente bloqueo de Mauro Zelayeta acortó a la mínima (17-18) y parecía que el desenlace iba a ser muy apretado. Sin embargo, algunos problemas con la recepción facilitaron la lectura del bloqueo rival y Paracao tomó distancias importantes para adelantarse 2-0 y vislumbrar un horizonte despejado en el partido.
El “albiverde” se hizo dueño de un tercer set de alto voltaje emotivo desde el comienzo. Mostró su mejor cara, trabjando los puntos con cabeza y acertada ejecución. Presionó con el saque, especialmente con Zelayeta, y Paracao comenzó a equivocarse. El 11-6 parcial mostraba una luz considerable que había que administrar. El equipo de Gonzalo Borstelmann lo hizo hasta el 15-10 (bloqueo formidable de Macció que liiteralmente hizo estallar el estadio que otra vez tuvo un marco muy importante en las tribunas).
Claro que Paracao exhibió todos sus recursos, tomó envión y la diferencia se esfumó. En el tramo final del segmento comenzaba otra batalla. El corazón, la gente, Ian Mehamed con alto porcentaje en ataque y el enorme capitán Macció lograron extender el encuentro al cuarto set.
De inusitada paridad resultó ese segmento que a la postre sería el definitivo. Side-out tras side-out hasta el 9-9, ninguno consiguió establecer ventajas y la paridad se prolongó de principio a fin del parcial (23-23).
La moneda podía caer para cualquier lado y lo hizo para los paranaenses, que por mínimos detalles hicieron lo necesario para quedarse con una victoria valiosa.
Síntesis:
Once Unidos (1): Juan Ignacio Macció, Bautista Gazaba, Iván Quiroga, Alejandro Manzín, Lucas Sass, Mauro Zelayeta y Matías Martín (líbero). DT: Gonzalo Borstelmann.
Ingresaron: Marcos Richards, Joaquín Aquindo Tomás Russo, Alejandro Saadía, Ian Mehamed.
Paracao (3): Martín Molinaro, Enzo Maggiolo, Julián López, Lucas Sansone, Gonzalo Lapera, Luciano Coto y Mariano Destri Vélez. DT: José Ignacio Saucedo.
Ingresaron: Fernando do Espirio Santo “Tchau”, Adrián Gayoso, Santiago Escanés.
Estadio: Once Unidos.
Arbitros: Gabriel Castañarez y Robin Bustamante.
Parciales: 22-25, 19-25, 28-26 y 23-25.acilitaron