Los tres abogados -en representación del padre de la víctima, de la madre y de dos de los adolescentes heridos-, acompañaron la acusación del fiscal de "homicidio con dolo eventual", pero solicitaron a los jueces una pena de 2 años superior.
Los tres abogados querellantes que participan en el juicio contra Federico Sasso por la muerte de Lucía Bernaola acompañaron la acusación del Ministerio Público Fiscal, pero a diferencia de lo planteado por Rodolfo Moure en su alegato, que había solicitado 10 años de prisión para el imputado, pidieron una pena más dura, de 12 años de prisión.
En sus alegatos, los tres abogados, Marcelo Savioli Coll (por el padre de Lucía Bernaola), Maximiliano Orsini (por la madre) y Mauricio Varela (por los heridos), acompañaron la acusación del fiscal Moure de “homicidio en concurso ideal con lesiones graves y leves con dolo eventual”, pero, reforzaron los agravantes y, por tales motivos, solicitaron una condena superior.
También, todos estuvieron de acuerdo en solicitar el cese de la prisión domiciliaria de Federico Sasso y exigir que cumpliera la condena, a pesar de no quedar firme, en una unidad penitenciaria bonaerense.
“Sasso tenía pasión por la velocidad, la ingesta de alcohol y conducir”, expresó Savioli Coli, el primero de los abogados querellantes en brindar su alegato.
En los agraventes que tuvo en cuenta el abogado del padre de Lucía Bernaola, mencionó “la intensidad del hecho, circunstancias modo, el tiempo y lugar: ya que ocurrió de noche, durante el fin de semana en una zona con circulación de personas y una curva extrema”.
“Sasso tuvo un accionar disvalioso, sus amigos se lo dijeron y por sus acciones pudieron morir más personas“, consideró Savioli Coli.
El abogado de la mamá de Lucía, Maximiliano Orsini, remarcó que “es clara la autoría y responsabilidad de Sasso, como así también la mecánica del hecho”.
Orsini consideró que “no hay factores externos” en lo que sucedió y que Sasso “tuvo que prever la velocidad precautoria para tomar la curva”.
“Sasso comprendía a la velocidad a la que iba, una velocidad de despiste de 78 km/h”, remarcó Orsini y agregó: “Un testigo graficó lo que sucedió al atropellar a Lucía y sus amigos: ‘Hizo como un bowling‘”.
“El plan de Sasso era correr por la costa como si fuera un autódromo, o mostrar una pericia al volante que no tenía. Tuvo un desprecio por su vida, por la de sus acompañantes y la sociedad”, expresó el abogado que representa a la madre de Lucía Bernaola y agregó: “Sasso es un peligro para la sociedad, no puede manejar”.
“Este hecho calo hondo en la sociedad, que reclama una pena ejemplar”, finalizó Orsini.
Mauricio Varela, en representación de heridos en el siniestro vial, acompañó “in totum” lo expuesto por el fiscal y por los otros abogados querellantes.
“Sasso mostró una intempestiva y criminal forma de conducir”, expresó Varela en su alegato, quien también destacó la supuesta “adicción” a la velocidad del imputado.
“Él se pudo representar ese disvalioso fin de su accionar, pero priorizó su gusto por autos y velocidad”, dijo el abogado querellante, quien también destacó que el hecho se haya producido durante la madrugada de un domingo en un sector muy concurrido de la costa marplatense.
Varela remarcó la extensión del daño causado por Sasso, ya que uno de las víctimas sigue con secuelas físicas por el accidente, con problemas en la muñeca que, a pesar de las operaciones, probablemente sean permanentes.
De esta manera, todos los abogados querellantes coincidieron tanto en la calificación del hecho, “homicidio en concurso ideal con lesiones graves y leves con dolo eventual”, y en el pedido de una pena de 12 años de prisión.