El intendente señaló que la reunión con Kicillof fue "de consulta" y que el gobierno provincial tendrá la definición. Dijo que el problema es la clandestinidad y advirtió que un cambio de horario "no va a modificar esa situación".
Guillermo Montenegro fue uno de los primeros en salir de la reunión que hubo ayer entre el gobernador y los intendentes de la costa atlántica. Sin mayores certezas sobre el alcance que tendrán las medidas, el jefe comunal de Mar del Plata reveló que la reunión “fue de consulta” y remarcó que la definición será del “gobierno provincial”.
“No es una decisión que pasa por los municipios”, sostuvo.
Montenegro aseguró que por el momento no habrá modificaciones en cuanto a la actividad nocturna en la ciudad. “Es una decisión que, después de las consultas que está realizando el gobernador, lo va a definir el gobierno provincial”, explicó.
En referencia a la reunión con el resto de los intendentes y el gobernador, el intendente dijo que “fue una reunión de consulta” y que a partir de ahora “el gobernador va a seguir haciendo una ronda de consultas con el resto de los intendentes de la provincia de Buenos Aires”. Tras ello, “nos va a hacer saber cuál es la decisión”, indicó el jefe comunal.
A pesar de que no hay certezas sobre el alcance que pueden tener las medidas, Montenegro reiteró que respetará la decisión del gobierno bonaerense. “Las decisiones siempre se acatan, por más que uno esté de acuerdo o no”, destacó. Sobre la situación en Mar del Plata, el jefe comunal refirió que -al igual que en la reunión del último martes en San Bernardo- “siempre venimos planteando lo mismo: que la problemática la tenemos centrada en el cumplimiento de los protocolos y trabajar para evitar la clandestinidad”.
“Se planteó cuáles eran las modalidades que estábamos realizando cada uno y también seguir trabajando mucho y en conjunto en lo que son los lugares donde hay control, donde hay protocolo, para tener claro que el control se cumpla y que vamos a hacer muy duros con quienes no los cumplan“, amplió el intendente y remarcó la necesidad de “trabajar muy fuerte con la clandestinidad”.
Más tarde, en diálogo con TN, Montenegro volvió a destacar la problemática de las actividades que se realizan sin protocolo y consideró que “un cambio de horario no va a modificar esa situación”.
“Lo vengo planteando hace mucho tiempo y hoy lo reiteré”, apuntó.
Por su parte, el intendente de Villa Gesell, Gustavo Barrera calificó a a reunión de “productiva”.
“Continuaremos articulando para proteger a los turistas, trabajadores y vecinos, que esperaron esta temporada todo el año. Seguimos comprometidos con los cuidados para tener el mejor verano posible”, señaló.
En tanto, el jefe comunal de Pinamar, Martín Yeza, sólo señaló que el gobernador “nos escuchó y seguirá escuchando al resto de los colegas en la provincia para tomar una decisión”.