Los mediocampistas de Real Madrid y Barcelona buscarán llevar a Croacia a su primera final en la historia del Mundial de fútbol.
por Lucía Santiago
MOSCU, Rusia.- Hay complicidades que pueden deducirse por miradas o gestos, como la existente entre el ’10’ y el ‘7’ croatas.
Luka Modric e Ivan Rakitic, ‘enemistados’ cuando compiten al amparo de Real Madrid y Barcelona, pasan a ser socios cuando visten la camiseta de su país. “Son un mismo cuerpo y una misma alma”, avanzó el seleccionador Zlatko Dalic.
Modric, en efecto, buscó a Rakitic después de que el azulgrana anotara ante el conjunto anfitrión su segundo penal decisivo en este Mundial de Rusia. Interrumpió a pie de campo la entrevista que estaba concediendo su compañero al golpear tres veces la cristalera que sostiene los logotipos de los principales patrocinadores.
A continuación alzó el puño y dirigió su sonrisa hacia un jugador elevado a la categoría de “héroe”, dado su acierto sobre la distancia de once metros.
“Creo que estamos viendo una continuación de la excelente temporada que Ivan tuvo en Barcelona. Sinceramente, creo que está mostrando el nivel más alto de toda su carrera”, convino el técnico bosnio en una rueda de prensa celebrada en Moscú.
El preparador de los Vatreni se felicitó por poder alinear juntos “a los dos mejores centrocampistas del Mundial”.
Es posible que ninguna otra escuadra reúna sobre la línea central a dos jugadores con su visión de juego, su liderazgo y su entendimiento. El arreglo entre ambos, insistió Dalic, “es una de las razones del éxito del equipo”.
Así, mientras los aficionados cierran el debate sobre quién es más determinante -porque la Croacia de Modric es también la Croacia de Rakitic-, ambos se convencen de su capacidad para poder pisar la ronda final del certamen, una cota inalcanzable hasta ahora para su combinado nacional.
“Ganar el Mundial con Croacia es casi impensable, como el cuento de hadas más bonito”, reconoció el madridista.
Este domingo, 15 de julio, el estadio de Luzhniki encumbrará al nuevo campeón del mundo y en el bando croata confían en ver premiada la magia de su ’10’ y la entrega de su ‘7’.
“Los dos son futbolistas de clase mundial. Están jugando a un nivel fantástico”, se sumó desde la concentración de la selección de Inglaterra en Repino el también centrocampista Eric Dier.
Mario Mandzukic, de hecho, advirtió en Luka Modric a un potencial ganador del Balón de Oro, siendo en 2018 campeón de Europa con Real Madrid y aspirante a todo con Croacia en el Mundial. De momento, con dos goles -uno de ellos de penal- y una asistencia, se presenta como el jugador más influyente por los ajedrezados.
“Es nuestro guía. Nosotros lo seguimos a él. Es de los mejores jugadores del mundo y para nosotros su equilibrio es fundamental”, dijo el delantero del Juventus.
Tras el capitán se agolpan otros 21 jugadores ávidos de gloria: la mejor actuación mundialista de Croacia data de 1998, cuando capturaron el bronce en Francia.
“Queremos llevar a Croacia a la final del Mundial para que durante muchos años se hable de nosotros. Es nuestro sueño y haremos todo lo posible para hacerlo realidad”, anunció Andrej Kramaric.
El camino más fácil es el que pasa por Modric y Rakitic.
Si logran activarlos en el poblado mediocampo inglés -Gareth Southgate llena esa línea con cinco piezas- la hazaña parecerá más factible. Y es que ante Argentina, un rival que formó ante ellos con un esquema similar (3-5-2), ambos se lucieron. El bando ajedrezado derrotó a la Albiceleste por 3-0, en un partido en el que anotaron el ’10’ y el ‘7’ después del acierto de Ante Rebic.
EFE.