En el mes de noviembre no hubo crímenes y hay que remontarse al 3 de octubre para encontrase con el último, el del jóven Joaquín Taborda.
Mar del Plata atraviesa el período más prolongado sin homicidios de los últimos años al acumular casi dos meses en ese situación, lapso a la baja que posibilita contrarrestar aquella nefasta serie del mes de julio de este 2021 en el que se produjeron diez casos.
Si bien el homicidio doloso es un tipo de delito que ancla la referencia de la seguridad en cualquier centro urbano, también es cierto que su estadística es volátil y muchas veces se incrementa por episodios relativamente prevenibles, como pueden ser los crímenes intrafamiliares o aquellos que son consecuencia de brotes psicóticos.
El mes de noviembre concluyó sin homicidios y para conocer del último hay que remontarse al 3 de octubre, fatal madrugada en la que el joven Joaquín Taborda (20) fue asesinado de un disparo por Maximiliano Escobedo (22), en una esquina del barrio Juramento.
La inusual distancia al último crimen puede quedar graficada con un dato: el fiscal Alejandro Pellegrinelli ya hizo la investigación y la cerró con el requerimiento de elevación a juicio contra Escobedo.
Desde el año 2017 hasta abril de 2021 no había pasado un mes calendario completo sin homicidios y entonces sucedió, aunque por muy poco, porque a Lautaro Pilú lo mataron por una serie de incidentes en el barrio Libertad que se iniciaron en los primeros minutos del 1° de mayo. En esa ocasión habían pasado 55 días sin asesinatos, contra los 59 que lleva la actual racha.
El año 2021 lleva acumulados 36 homicidios dolosos, desde el que tuvo como víctima a Facundo Maidana, en los festejos de Año Nuevo, hasta el de Taborda. El recorrido de casos mostró en el mes de julio su pico con diez hechos, encadenamiento de crímenes que llevó a algunos políticos y a otros actores sociales a comparar a Mar del Plata con Rosario. El origen del conflicto de esos diez asesinatos fue disímil y una mínima parte correspondía a problemáticas de “inseguridad”, como pueden ser los homicidios en ocasión de robo. Más bien, se advirtió violencia social o interpersonal (cuando víctima y victimario se conocen). Entonces la cifra había alcanzado los 28 casos.
Desde que se mencionó a Mar del Plata como una réplica (a menor escala, por cierto) de Rosario solo se reportaron 8 homicidios, entre ellos los de los jóvenes Jonathan Costadura, “Lele” Gatti y Joaquín Taborda. Como medida definitiva para avalar esa absurda comparación, vale decir que Rosario contabiliza en este año 2021 un total de 223 asesinatos.
La baja cifra de homicidios también contribuye a una descongestión en los recursos de investigación forense y criminalística, en una ciudad en la que aún tiene abandonado y sin inaugurar el Laboratorio de Ciencias Forenses del predio del HIGA, equipado con una sala de autopsia de alta complejidad.