La mujer fue hasta la Escuela N°27 para exigirle a la maestra del nene y a la directora que lo pasaran de año. Las amenazó, golpeó, rompió el libro de actas y quedó aprehendida. No podrá acercarse al establecimiento ni a las víctimas.
La madre de un alumno de la Escuela N° 27 fue detenida por golpear a la maestra de su hijo, a la directora y otras docentes a quienes, además, había amenazado para exigirles que el nene, de 8 años, pasara de curso. Por disposición de la Fiscalía de Flagrancia la mujer no podrá acercarse al establecimiento ni a las víctimas.
El hecho se registró el pasado martes, a pocas semanas de terminar el ciclo lectivo, en la Escuela N°27 -Garay 10.037- cuando cerca de las 13.30, una madre que había ido a retirar a su hijo de 8 años del colegio, tuvo una entrevista con la maestra de grado y la directora para hablar del presente y futuro académico del menor.
“Más vale que pase de grado, porque sino se van a tener que atener las consecuencias“, habrían sido las palabras de la madre al momento que tomaba el libro de actas y le arrancaba hojas.
Otra docente y la vicedirectora, al escuchar la discusión, se acercar e intentaron apaciguar a la mujer que, visiblemente desencajada, lanzó una serie de golpes que lastimaron a las docentes en los brazos y muñecas.
Personal de la Escuela N°27 llamó al 911 para denunciar las agresiones de la madre del alumno y la policía fue inmediatamente al lugar, aprehendió a la mujer y la trasladó al Destacamento Femenino de Batán, donde pasó la noche.
El miércoles, el fiscal Gastón De Marco le tomó declaración a la mujer y la imputó por “daño, amenazas y lesiones leves”. Si bien la acusado admitió romper el libro de actas, no reconoció haber amenazado o golpeado a las docentes.
En vistas a que la mujer no tenía antecedentes penales recuperó la libertad, pero el fiscal De Marco dispuso una serie de medidas que, en el caso de incumplirlas, ordenará su inmediata detención.
La mujer no podrá acercarse a menos de 300 metros de la Escuela N°27. Fuentes judiciales consultadas aclararon que esto “de ninguna manera busca afectar el derecho a la educación del niño”, pero lo cierto es que para respetar esta medida la mujer no podrá llevar ni retirar a su hijo de 8 años del colegio, sino que dependerá de que otra persona lo haga.
La mujer tampoco podrá acercarse a ninguna de las víctimas de la causa, tampoco podrá llamarlas o comunicarse con ellas por algún medio informático, como redes sociales, mail o whatsapp.
Finalmente, para seguir a derecho, la mujer deberá presentarse una vez por semana en la Fiscalía de Flagrancia.
Desde la Federación de Educadores Bonaerense destacaron la actuación del fiscal en esta situación y agregaron: “No nos cansamos de denunciar este tipo de situaciones de violencia que se vuelven cotidianas. Es hora que las leyes y que el Ejecutivo respondan a este tremendo estado de situación de violencia que viven nuestras docentes en sus ámbitos de laborales”.
Ante situaciones de violencia de este tipo, desde la Fiscalía de Flagrancia recomiendan a los docentes que llamen inmediatamente al 911 y denuncien.