Desde antes de las 8 había largas filas esperando para poder hacer las compras. Clientes con calculadora en mano para no pasar el tope de reintegro y reclamos hacia el Gobierno al encontrarse con los precios actualizados.
Explotados. Así se encuentran por estas horas los supermercados de la ciudad adheridos a los miércoles de descuento que ofrece el Banco Provincia. Además, este es el primer día con los productos de la canasta básica sin IVA y tras la fuerte devaluación que sufrió el peso argentino luego que el dólar se disparara de $46 a $60 en apenas dos días.
Desde hace ya más de un año que la entidad bonaerense ofrece a sus clientes la posibilidad de comprar productos al 50% de descuento dos días al mes. Esta medida, originada para aliviar los bolsillos de muchos argentinos afectados por la crisis económica de los últimos tiempos, se transformó en los días de mayor trabajo para los supermercadistas, muchos de los cuales decidieron adelantar el horario de apertura habitual (9.30) una hora y media antes.
Sin embargo, este miércoles fue particular. La fila de hombres y mujeres esperando ingresar al supermercado, minutos antes de las 8 de hoy, ya era más larga de lo habitual. Para las 8.30, los supermercados se encontraban explotados.
“La gente busca que la devaluación los afecte lo menos posible”, señaló un joven, mientras esperaba su turno para abonar la compra en el VEA de Independencia y Quintana. Era el último de una fila de casi 30 metros.
Una recorrida por el lugar permitió ver a personas con calculadora en mano, haciendo cuentas para no pasarse del tope de reintegro o verificar que el IVA no esté aplicado en los productos, tal como lo anunció el presidente Mauricio Macri el miércoles pasado. También se pudieron oír varios reclamos hacia el Gobierno, sobre todo cuando la calculadora marcaba el resultado de la suma de los productos en el changuito o cuando se encontraba, por primera vez, con los precios actualizados de algunos productos como las yerbas, el café y el pan.