Piden que las Cámaras Empresarias del sector den respuesta a la solicitud de evaluación de los elementos de seguridad a bordo tanto para contingencias como para el abandono del buque.
“Tomamos esta decisión hasta tener respuesta a una solicitud presentada en agosto de 2017, después del hundimiento del Repunte, en el que murieron 10 trabajadores, para que se adecuara la normativa y se modernizaran las medidas y los equipos de seguridad en caso de siniestros”, dijo el titular del SIMAPE, Pablo Trueba.
Entre los elementos de seguridad reclamados figuran “trajes anti exposición de inmersión y chalecos” con dispositivos de asistencia de flotación, así como balsas salvavidas y extintores de incendio.
Los sindicatos señalaron que en 2017 realizaron “distintas audiencias con la totalidad de los gremios y cámaras de la pesca marplatense en el Ministerio de Trabajo Delegación regional Mar del Plata, con el fin de acordar” estos temas.
“Un año después, seguimos sin respuestas. El Rigel salió a pescar con las normas de seguridad actuales, que una vez más queda claro que deben ser readecuadas”, señaló Trueba.
Por otra parte, la Asociación Argentina de Capitanes y Patrones de Pesca se declaró en estado de alerta tras la desaparición del Rigel y señaló en un comunicado que “parece haber naufragios y muertos de segunda categoría”.
“Los capitanes de pesca no podemos aceptar más balsas vencidas y buques vetustos. Mientras los familiares de los compañeros muertos en el naufragio del Repunte aún esperan, la misma preocupación que se tuvo con la dramática desaparición del submarino ARA San Juan, hoy desaparecen nueve pescadores y solamente los buscan los barcos
El pesquero Rigel perdió contacto en la noche del viernes último, cuando navegaba a 220 kilómetros al sur de la capital chubutense para participar en la campaña de pesca de langostino, con nueve tripulantes a bordo.