El gobierno provincial elevó el protocolo y el nacional ya dio el visto bueno. Guillermo Montenegro habló con Alberto Fernández. Se espera que el lunes llegue la confirmación
Los comerciantes marplatenses se preparan para recibir mañana la noticia que más esperan: podrán abrir sus puertas a partir del martes.
Luego de que las protestas y los pedidos crecieran en los últimos días, la llegada de la habilitación por parte del gobierno nacional es cuestión de horas. En realidad, se trata más de una demora administrativa: el municipio ya tiene el visto bueno de presidencia.
Para destrabar una situación que se tornaba cada vez más difícil por la creciente presión de empresarios y comerciantes, fueron fundamentales dos conversaciones telefónicas entre Guillermo Montenegro y Alberto Fernández. Al igual que en otras ocasiones durante la pandemia, el intendente habló sin intermediarios con el presidente.
La diferenciación del desarrollo de la epidemia entre Mar del Plata y otras grandes ciudades fue la columna vertebral de la habilitación.
“No somos AMBA”, fue el concepto que prevaleció a la hora de insistir en el pedido. Es que mientras los casos de Covid-19 crecen a ritmo sostenido en Capital Federal y Gran Buenos Aires, la foto de Mar del Plata muestra otra realidad.
Operativamente, la habilitación se motorizó hoy. El jefe de gabinete de Provincia de Buenos Aires, Carlos Bianco, le confirmó a Montenegro que mañana se elevarán los protocolos de comercios minoristas de bienes no esenciales, al gobierno nacional por lo que se espera que se concrete la habilitación para el lunes .
El visto bueno del gobierno provincial y el aval que el propio Alberto Fernández le brindó al intendente, permitirán que a partir del martes los comerciantes puedan volver a la actividad.
En los últimos días, las protestas de los comerciantes fueron en aumento. Hubo “cacerolazos”, “percherazos”, movilización a la municipalidad y diferentes medidas para reclamar. Todas con un argumento válido: el derrumbe económico por tener las persianas bajas durante dos meses.
Para mañana se habían realizado dos convocatorias para insistir con el reclamo. Una a la mañana en la Catedral y otra a la tarde con una caravana de autos.
“No estoy pidiendo abrir boliches, espectáculos masivos, cines o teatros, estamos pidiendo abrir comercios porque somos responsables para poder hacerlo”, aseguró el intendente Guillermo Montenegro en declaraciones a una radio capitalina, insistiendo en su postura aperturista.
“Hoy -dijo- la prioridad no es la recreación, ni los eventos masivos, es la reactivación económica del pequeño y mediano comerciante, que la verdad es que hace sesenta días que no puede mantenerse, en el caso que trabaje solo, o si tiene que sostener algunos empleados, alquiler y demás”.
El anuncio del gobierno sobre la extensión de la cuarentena, el sábado a la noche, había generado expectativas en Mar del Plata. Entre las nueva condiciones del decreto, se especulaba con la posibilidad de que se flexibilicen más actividades. Pero eso no ocurrió. “En el interior bonaerense seguirán las condiciones del aislamiento como hasta ahora”, señaló el gobernador Axel Kicillof, acompañado por el presidente Alberto Fernández y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta.
Pero la situación se modificó en las últimas horas y sólo falta una formalidad para que los comerciantes marplatenses puedan volver a abrir sus puertas.