Se registró un pico de 650 autos por hora con destino a la ciudad. La ocupación hotelera llegó hasta el 40%. El clima no ayudó.
El cielo nublado y el pronóstico poco alentador no condicionaron los planes de quienes ya habían decidido venir a la ciudad. Y la muestra fueron los registros de los vehículos que pasaron por el peaje de Maipú rumbo a Mar del Plata: hubo un pico de 650 por hora, cerca del mediodía.
La marca fue el mejor comportamiento de la circulación vehicular de la semana, ya que el viernes el mayor flujo indicó 500 por hora.
En cambio, las ocupaciones hoteleras y extra hoteleras no variaron demasiado a lo que vienen informando desde ambos sectores: el promedio fue del 40 por ciento, índice levemente superior al “25 o 30 por ciento” que se registra durante los días de semana.
Los operadores turísticos sostienen la teoría de que si bien la actual temporada es “mala”, resaltan que es “la posible” en el marco de la pandemia por el Covid-19. En ese sentido, explicaron el crecimiento de la llegada de vehículos que no se condice con la suba en los alojamientos hoteleros o de alquiler. “Vino gente a Mar del Plata, muchos tienen acá su segunda vivienda y se quedaron todo el verano, ya que pueden seguir trabajando a través del home office”, analizaron.
Y ese aumento del tránsito se pudo comprobar en determinados sectores de la ciudad, especialmente la costa, en los centros comerciales al aire libre como Güemes y Alem y el puerto, con su sector gastronómico incluido.
Fresco
Los programas “extra playa” parecieron condecirse con las condiciones climáticas, generando movimiento y especial atención a los protocolos para que no se generen aglomeraciones. Así, en muchos comercios se observó fila para entrar y habrá que ver si la concurrencia estuvo de la mano con la facturación.
En tanto, en los balnearios aseguraron que la ocupación del fin de semana no fue la mejor y no dudaron en calificarla como “floja”, advirtiendo que en los últimos días no contaron con su aliado especial. “No nos está ayudando el clima, parece que en la semana empieza a mejorar y esperamos que llegue más gente”, señaló uno de los directivos de la Cámara Empresaria de bares, Restaurantes y Afines (Cebra).
Sin embargo, se pudo apreciar una gran ocupación en determinadas franjas de arena como en las playas del centro y Varese. Justamente la bahía fue una de las más ocupadas (también hay que reconocer que con marea alta pierde mucho espacio público) y hubo hasta “aglomeraciones” en el mar, como consecuencia de la práctica de SUP. También se pudo ver algún kayak infiltrado.
Tendencia
El primer sábado de febrero amaneció gris y fresco, con las nubes ocupando la mayor parte del cielo, aunque con el correr de las horas y el ascenso de la temperatura muchos igual migraron hacia la playa. Es que, a pesar de la nubosidad, la temperatura ascendió desde los 12º de mínima hasta alcanzar los 21º7 a las 13.10, según el reporte del Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
En tanto, el pronóstico para hoy anuncia “cielo mayormente nublado, fresco a templado, inestable con probabilidad de precipitaciones aisladas, viento del sudeste y una máxima estimada en 23º”.
Asimismo, desde el SMN anunciaron que el que pasó fue el enero más frío de lo que va del siglo. El lado positivo fue que el frío y las condiciones lluviosas para el verano favorecieron el final de la intensa sequía que afectaba a varias provincias, aunque resultó un pelotazo en contra para el sector turístico.
Así, el SMN reveló que el último enero resultó “el más frío desde 1999 y el más lluvioso desde 2001”.
El organismo reconoció que el arranque del año mostró “mucha variabilidad” con valores inicialmente bajos para la época de verano pero que finalmente, a partir de un cambio en la circulación de la atmósfera, generó días “muy calurosos”. “Aún así, no fue suficiente para contrarrestar el gélido comienzo y enero 2021 finalizó como el más frío desde 1999”, aseguraron desde el SMN.